Baptistao les quita las lega?as
El equipo de Quique actu¨® como un trilero. Le ense?¨® la bolita a los pepineros, que la vieron tan clara que se confiaron y dejaron espacios.
El giro final. Hay resultados inexplicables, partidos que tienen un desenlace que no corresponde con la trama. Un giro del gui¨®n en el a?adido que se resume en una pared entre Gerard y Baptistao y un espacio de 50 metros, all¨ª donde el delantero es letal. Una combinaci¨®n directa al gol. El ¨ªtalo-brasile?o despert¨® a un Espanyol aletargado y somnoliento, y lo coloc¨® a tres puntos de una s¨¦ptima plaza que, en los 90 minutos anteriores, ve¨ªa en la lejan¨ªa. El Espanyol ofreci¨® una de sus peores caras en Butarque ante un Legan¨¦s meritorio por estar fuera del descenso con lo que tiene. No puede decir lo mismo el Espanyol, que tiene m¨¢s de lo ofrece fuera de casa, donde ya ha sumando varios 0-1 milagrosos.
Entre bostezos. Como el del Villamar¨ªn o el de Vitoria, sujetos por Diego L¨®pez, ayer providencial en dos jugadas, y por esa efectividad insultante en ataque: cinco tiros a puerta del Legan¨¦s por solo dos del Espanyol. Adem¨¢s, los pericos jugaron todo el partido con lega?as, entre bostezos, lo que se contagi¨® al aficionado, en una ma?ana de domingo de poca pasi¨®n por lo que se ve¨ªa en el verde.
Perdidos. Como muestra, los 103 balones perdidos del equipo blanquiazul, un r¨¦cord que se traduce en casi dos balones perdidos por minuto, teniendo en cuenta que el juego efectivo en un partido acostumbra a estar entre los 50-55 minutos. Le cuesta al Espanyol dominar desde el juego posicional. Solo el tri¨¢ngulo David L¨®pez-Jurado--Gerard encuentra los espacios y interpreta las situaciones, mientras que los fogonazos de Aar¨®n y Roca ayudan. Piatti y Caicedo apenas intervinieron, mientras que Fuego y Reyes no hallan los caminos para sacar el bal¨®n con lucidez.
El trilero. Antes de ese fogonazo de Baptistao, el Espanyol ofreci¨® su peor cara. Le cost¨® generar juego y dio muchas facilidades en defensa. Sin el Legan¨¦s ahogar a los pericos, s¨ª demostr¨® m¨¢s fiereza en su juego. Aunque el conjunto de Quique actu¨® de trilero. Le ense?¨® la bolita a los pepineros, que la vieron tan clara que se confiaron y dejaron espacios a su espalda. ¡°Fuimos burros¡±, dijo con sinceridad Herrer¨ªn. Es el Espanyol de Quique, que necesita poco para hacer mucho.
Retornos. Desde el 11 de diciembre que no marcaba Baptistao y desde el 1 de marzo que no jugaba Marc Navarro. Los refuerzos ya est¨¢n aqu¨ª y el Espanyol se coloca con 49 puntos, con la mejor puntuaci¨®n de los ¨²ltimos 12 a?os, y de ese sue?o europeo que no se dilucidar¨¢ hasta las ¨²ltimas jornadas. Tiene el equipo perico una virtud que les puede hacer so?ar, y es la capacidad de no rendirse nunca, de seguir compitiendo aunque las cosas no le salgan. Ese elogio al tedio en la que se convierten algunos partidos es el h¨¢bitat del Espanyol. Y que siga si gana.
