LEGAN?S | EXREPRESENTANTE DE ETOO
"Etoo jam¨¢s olvidar¨¢ Legan¨¦s"
Mesas, ex representante y ex compa?ero del camerun¨¦s en el Lega, repasa para As la trayectoria de la leyenda blaugrana a las puertas de la visita de los pepineros al Camp Nou.
Samuel Etoo es leyenda en el Barcelona. Tambi¨¦n en Legan¨¦s. El camerun¨¦s dio sus primeros pasos en Espa?a en el equipo pepinero. Con apenas 16 a?os, reci¨¦n fichado por el Real Madrid, aquel muchacho descarado se hizo ¨ªntimo del capit¨¢n del equipo. Jos¨¦ Jes¨²s Mesas, a?os despu¨¦s, se convirti¨® en su representante. A las puertas del duelo que medir¨¢ al Bar?a y Lega en el Camp Nou, Mesas repasa para As la trayectoria de Etoo y revela alguno de los pasajes m¨¢s in¨¦ditos de esta leyenda blaugrana.
?A qu¨¦ le suena un Bar?a ¨C Legan¨¦s?
Es un partido impensable hace a?os. ?sa es la realidad. Pero ah¨ª est¨¢. Es un partido real. Es un momento para disfrutarlo. A su generaci¨®n el destino le deb¨ªa un partido de este tipo. Rozaron varias veces el ascenso. Hubo 4-5 a?os de mucho ¨¦xito de club. El Legan¨¦s se uni¨®n con la afici¨®n y con el equipo. El antiguo campo ayud¨® a esa uni¨®n. Fueron a?os de buen ambiente, de buen f¨²tbol, de incluso rozar el ascenso a Primera pese a no hab¨¦rnoslo marcado como objetivo nunca.
L¨¢stima que este partido llegue en este momento para el Legan¨¦s. De haber ganado al Sporting se habr¨ªa disfrutado mucho m¨¢s.
Suena a t¨®pico decir que no hay nada que perder, y mucho que ganar en este tipo de partidos. Bajo mi punto de vista no es mal momento que llegue este partido. El Legan¨¦s ha incorporado a varios jugadores que est¨¢ cogiendo ritmo y haci¨¦ndose su hueco. Este duelo no tiene tanta trascendencia. Es un partido perdible, aunque haya que disputarlo, claro. A esos jugadores nuevos les vendr¨¢ bien para acoplarse, coger sensaciones y tener un buen estado de forma.
?El Lega podr¨ªa dar la sorpresa?
Es f¨²tbol. S¨ª, tambi¨¦n es el Bar?a. Estamos hablando de uno de los mejores equipos del mundo. Cosas m¨¢s raras se han visto. Hay que ir con toda la ilusi¨®n del mundo. Y oye¡ pelear el partido. Puede salirte bien¡ o salir goleado.
?Ha hablado con Etoo ya de este partido?
No me he hablado con ¨¦l desde hace semanas. Quer¨ªa darle un toque estos d¨ªas para charlar un rato. Es el jugador del Legan¨¦s que ha llegado m¨¢s alto, sin ninguna duda. Y para el Bar?a en una ¨¦poca fue una ¨¦poca.
?Si habla con ¨¦l, qu¨¦ le dir¨¢?
M¨¢s que nada saludarle. Ya te digo que hace tiempo que no hablo con ¨¦l. ?Con qui¨¦n ir¨¢? Mira¡ Samuel es alguien que sabe mucho de esto. Su mejor virtud siempre fue aprender lo mejor de la gente que le rodeaba. Estoy seguro que dar¨ªa una respuesta diplom¨¢tica para quedar bien con ambos clubes.
Etoo no se olvida del Legan¨¦s.
?l no se olvida de nada. De sus or¨ªgenes, de la gente que ha conocido estos a?os, de los que le trataron bien y que ¨¦l considera como amigos. Creo que es un tipo con un coraz¨®n muy grande. Sabe de donde viene.
?C¨®mo era el Etoo de 16 a?os que lleg¨® a Legan¨¦s?
Mis hijos tienen 15 y 13 ahora. Entonces lo miraba de t¨² a t¨². Pero ahora lo pienso¡ ?y ten¨ªa la edad de mi hija! S¨ª, era muy ni?o, pero a la vez con mucha vida detr¨¢s, con dificultades¡
Hubo que pulirlo para que se convirtiera en el diamante que es hoy. Usted ayud¨® en ese proceso.
Hicimos amistad desde el principio. Yo era el capit¨¢n del equipo, pero al mismo tiempo era muy cercano a ¨¦l. Recuerdo que el d¨ªa que lleg¨® a Legan¨¦s, Paco de Gracia, que entonces trabajaba para el Madrid y me conoc¨ªa. Me dijo: ¡°Mesas, estate atento del chaval. Gu¨ªale¡±. Samuel viv¨ªa en la residencia que ten¨ªa el Real Madrid. Muchos d¨ªas yo lo acercaba en el coche y ten¨ªamos tiempo para charlar. Le gustaba aprender. Escuchar. Empaparse de todo lo que le pod¨ªa ayudar.
Sea sincero, ?en aquel momento realmente pens¨® que llegar¨ªa hasta donde lleg¨®?
El potencial todo el mundo se lo ve¨ªa. Pero en realidad super¨® cualquier cota de lo que pens¨¢bamos. Aqu¨ª lleg¨® sin ser delantero. Estaba m¨¢s tirado a una banda. Ten¨ªa mucha velocidad, pero, seg¨²n fue madurando hasta hacerse a s¨ª mismo, hasta convertirse en el mejor 9 del mundo. En los a?os del Bar?a no hab¨ªa nadie como ¨¦l, ya no s¨®lo en cuanto a gol, sino en cuanto a su capacidad de trabajo, de sacrificio, de implicarse con el equipo. Eso era lo que m¨¢s me gustaba de ¨¦l.
En el libro ¡®Memorias del Lega¡¯ se relatan dos an¨¦cdotas de Eto¡¯o. Una, la de la bota en Jer¨¦z.
La de la bota de Jer¨¦z es que, despu¨¦s de un cambio jugando contra el Xerez, le tir¨® la bota al entrenador. Aquella yo no la recuerdo muy bien.
?Y la del cintur¨®n?
La del cintur¨®n la viv¨ª en primera persona. En aquella ¨¦poca nos pagaban las primas de cada victoria la misma semana de la victoria. Un d¨ªa, despu¨¦s de ganar un partido, nos dieron 100.000 pesetas. Al d¨ªa despu¨¦s de cobrarla, lleg¨® al vestuario y me dice: ¡°?Te gusta capi?¡±. Yo le dije que s¨ª, que me gustaba. Cuando le pregunt¨¦ cu¨¢nto le hab¨ªa costado, me dijo que la prima entera. Pero la semana siguiente ganamos y se compr¨® el mismo cintur¨®n, pero de distinto color. ¡°?Capi, qu¨¦?¡±, me dijo de nuevo. ¡°Pero si me lo ense?aste la semana pasada¡±, le dije. ¡°No, no. ?ste es de otro color¡±, me respondi¨®. S¨ª¡ ¨¦se era Eto¡¯o.
Tendr¨¢ mil an¨¦cdotas.
Claro. Samu ten¨ªa mucho carisma. Era un tipo ganador.
Cuente una.
Estando en el Bar?a, un equipo le quer¨ªa. No viene a cuento contar cu¨¢l. Vinieron cuatro personas de ese equipo a verle en un partido contra el Chelsea. Llegaron en avi¨®n privado s¨®lo para ese encuentro. Hab¨ªamos quedado a cenar. Se lo dije a Etoo. ¡°Ok¡±, me dijo. Despu¨¦s del partido le llam¨¦. ¡°?Cu¨¢ndo te vemos?¡±. Me contest¨® que no pod¨ªa. Mi cara fue un poema. ?Hab¨ªan venido en un jet privado para esa cena y Samuel nos dijo que no! S¨®lo quer¨ªan conocerlo como persona. Ni siquiera era para negociar. Pero me dijo: ¡°Ha venido un jeque amigo que me ha tra¨ªdo de regalo un McLaren y tengo que cenar con ¨¦l¡±.
?Y qu¨¦ pas¨®?
Me coment¨®: ¡°Quedamos ma?ana a desayunar en el hotel Ars¡±. A las 9:00 hab¨ªamos quedado¡ pero eran las 9:30 y no aparec¨ªa. Ni me cog¨ªa el tel¨¦fono. Lleg¨® a eso de las 9:35. Me salud¨®, me dio dos besos y subimos a desayunar a una suit espectacular con un desayuno brutal. Nos sentamos. Le pregunt¨¦ que si quer¨ªa hablar en ingl¨¦s. No quiso. Pidi¨® que yo le tradujera. Empezaron las preguntas sobre su vida, aspectos casi todos personales. Al cabo de 30 minutos, se levant¨®. ¡°Me tengo que ir¡±.
No puede ser.
S¨ª. Fue tal cual. Me dijo: ¡°Capi, preg¨²ntale si quieres saber algo m¨¢s de m¨ª¡±. Nos dijeron que no. ¡°Gracias por venir aqu¨ª¡±, les dijo. Y se march¨®. Dejamos la suit y ya en recepci¨®n, me tom¨¦ un caf¨¦ con los emisarios del equipo interesado. ¡°?Bueno, qu¨¦?¡±, les pregunt¨¦. El manager del club me dijo: ¡°Es el jugador¡±. No le cre¨ªa. ¡°S¨ª, con lo que he visto, es el jugador. Valoro los goles, pero valoro m¨¢s todav¨ªa lo que veo cuando le miro. Esa personalidad¡±.
?Y hubo oferta formal?
Bueno¡ eso queda en los anales¡ tampoco vamos a hacerlo muy p¨²blico.
?Qu¨¦ genio Etoo!
El recuerdo que le ha quedado a la gente es el de un jugador d¨ªscolo, que pod¨ªa crear problemas, que era ego¨ªsta¡ pero nada m¨¢s lejos de la realidad.
La bomba aquella que dec¨ªa el Real Madrid que meter¨ªa en el vestuario del Bar?a. ?No jugar de blanco fue lo que m¨¢s le doli¨® a Etoo en su carrera?
?l no era as¨ª. Quiz¨¢ por eso le doli¨® m¨¢s esa situaci¨®n. Claro¡ es verdad que en una rueda de prensa era jugoso. No usaba los t¨®picos. Le preguntabas si iba a jugar despu¨¦s de una lesi¨®n y la respuesta de cualquiera habr¨ªa sido t¨®pica. ?l dir¨ªa que s¨ª, que ten¨ªa que jugar porque estaba recuperado y era el mejor.
Por esa imagen, ?le imagina volviendo al Bar?a como embajador tal y como ha sucedido con Ronaldinho?
No lo s¨¦. Yo creo que ¨¦l est¨¢ valorando muchas cosas de futuro para cuando se retire, pero no s¨¦ si esa es una de ellas. Claro que podr¨ªa ser embajador del Bar?a¡ y del Mallorca, del Inter¡ estar relacionado con cualquier tema de FIFA y ?frica, ser presidente de la Federaci¨®n Africana de F¨²tbol¡ cualquier cosa podr¨ªa ser.
?Le queda mucho para retirarse?
Tiene 36 a?os. Es ley de vida que le quede poco. No me ha dicho nada, pero por mucho que ¨¦l quiera jugar hasta los 50, no podr¨ªa. Yo creo que a ¨¦l le encanta el f¨²tbol y competir.
?El Eto¡¯o en plenitud podr¨ªa hacer sombra a la MSN?
El Etoo en plenitud podr¨ªa jugar en cualquier equipo. Cuando digo cualquier equipo es cualquier equipo.
?Ha tenido alguna vez Etoo la ocasi¨®n de volver a vincular al Legan¨¦s sea jugando, comprando parte del club¡?
Yo creo que se ha especulado mucho sobre eso, pero realmente no hubo nada cierto de esas opciones.
Verle de blanquiazul de nuevo ser¨ªa la bomba¡
?A m¨ª me encantar¨ªa! ?Aguantar f¨ªsicamente? Ver¨¢s¡ ¨¦l es muy listo. El otro d¨ªa le vi un partido y se ha convertido en un jugador m¨¢s tirado a la mediapunta, que jam¨¢s pierde un bal¨®n, que sabe elegir siempre. Que sabe cubrirla, elegir cuando arrancar, le queda velocidad¡ sigue siendo un jugador para un equipo de Primera Divisi¨®n, un jugador aprovechable.
?Ha existido esa opci¨®n, la de verle de nuevo en Espa?a?
El problema no es ¨¦se. El problema es que el salario de Samuel es tan desorbitado que yo entiendo que le mole, por ejemplo, jugar en el Legan¨¦s y al Lega, quiz¨¢ tambi¨¦n le molar¨ªa firmarlo, pero otra cosa es llegar a un acuerdo econ¨®mico. Ser¨ªa un esfuerzo por parte del club y que Samuel estuviera dispuesto a renunciar a su salario. De todas formas, jam¨¢s ha habido llamadas del Legan¨¦s para sondearlo.
