El Madrid muri車 de pie
Igual車 dos veces la ventaja del Celta y se despidi車 de la Copa llamando a la puerta de Sergio ?lvarez. Los de Berizzo se aplicaron en la resistencia. Otro autogol de Danilo.Sevilla - Legan谷s: Copa del Rey
El Madrid de Zidane perdi車 su inmortalidad. Las primeras arrugas del curso le sacaron de la Copa y de las leg赤timas aspiraciones al triplete. Al Celta le bastaron sus buenas pr芍cticas del Bernab谷u y su aplomo para resistir el oleaje de un Madrid con bajas como para levantar un hospital. El equipo de Zidane anduvo largo de bravura y corto de rematadores. Cay車 en el centro del ruedo con la boca cerrada, muy en la tradici車n que ha hecho del club leyenda.
Dos minutos de juego y dos c車ners lanzados. El Madrid se precipit車 sobre el partido de acuerdo a su linaje. Fue una carga en toda regla, con tres defensas, uno de ellos Casemiro (la de curvas que tuvo que tomar Zidane para no poner a Coentrao, lateral izquierdo de honor en la plantilla), que a ratos se quedaron en dos, porque Ramos quiso llegar en la derecha donde no le alcanzaba a Danilo, un cordero en campo propio y un lobo en el ajeno. La Copa trae partidos as赤, en los que queda claro que no hay un ma?ana.
Hubo, en cualquier caso, m芍s tiros que blancos. Ese Madrid a la tremenda tuvo la pelota y el coraje, pero no se explic車 bien en las cercan赤as de Sergio ?lvarez. El temporal remiti車 por el norte, porque no dej車 testimonio de su presencia Benzema y porque a Cristiano le han encapuchado en el 芍rea.
El franc谷s no se vio arrastrado por la pasi車n del partido. La condescendencia de Zidane con 谷l parece infinita. Ah赤 hubo un d赤a un delantero de terciopelo, pero ha acabado falseando su papel. El mal de Cristiano es diferente. Anda en el tr芍nsito de jugador para todo el campo a jugador para todo el 芍rea y no acaba de encontrar su lugar en el mundo. No aparece fuera y no decide dentro. En la misma jugada estrell車 un cabezazo en el larguero y un remate en el palo. Pero su insistencia es enfermiza. Con el Madrid boca arriba acudi車 a su rescate a bal車n parado, uno de los muchos instrumentos que toca.
Lo cierto es que el Madrid, con Danilo y Asensio en la bandas, Kroos y Kovacic como infanter赤a e Isco como blanco m車vil, arrug車 al Celta durante media hora pero no fue capaz de hacerle un rasgu?o. El estado de necesidad le baj車 del estribo.
El paso de los minutos desorden車 al equipo, puso en evidencia a Casemiro en su papel de central interino y le quit車 el susto del cuerpo al Celta. En el cuarto de hora que condujo al descanso el Madrid jug車 a la ruleta rusa. Aspas tir車 un mal pase donde se aconsejaba un disparo y Casilla le sac車 dos trallazos a Guidetti. El segundo rechace golpe車 en el pie suicida de Danilo y acab車 en la red del Madrid. Segundo autogol del brasile?o en la Copa en un escenario sin cr赤ticos. No hay perd車n para los malditos. El Madrid se ha topado con muchos en esa banda, de Vitor a Secretario.
Fue el premio a la paciencia del Celta, que jug車 con los ahorros del Bernab谷u y con el estado de emergencia de su adversario. Primero fue ciudadela y despu谷s comando.
El gol de Cristiano
La autolesi車n del Madrid cerr車 el partido durante algunos minutos. El Celta se protegi車 mejor, empleando incluso a Aspas y Bongonda, y el Madrid baj車 las revoluciones. Se evapor車 Isco, dej車 de jugar en equipo, perdi車 la fe del misionero con la que aterriz車 en el partido... Hasta que Cristiano toc車 la tecla del bal車n parado. Un disparo en la suerte contraria, al palo del portero, pero con una potencia incontestable.
Aquel martillazo descompuso al Celta y dispar車 al Madrid, que sali車 a ocasi車n por minuto: Ramos, de cabeza; Benzema de disparo cruzado; Cristiano, otra vez de falta. De nuevo, la Copa, la mejor serie dram芍tica que ha ofrecido y ofrecer芍 el f迆tbol. Porque la acometida del Madrid estuvo llena de descuidos atr芍s, mal gestionados por Guidetti, que se dej車 ir buenas ocasiones. Zidane volvi車 a estar demasiado contenido en los cambios. Lucas V芍zquez y Morata fueron llamados a filas demasiado tarde. Las fuerzas hab赤an abandonado a Asensio e Isco mucho antes. A迆n as赤, la parte final se rod車 en el 芍rea del Celta, con Sergio ?lvarez por los suelos, d芍ndole dignidad a la muerte del Madrid, que se resisti車 a la derrota pese a encajar un segundo gol a falta de seis minutos. El sue?o del Celta entra en el bombo del viernes mientras el Madrid desperdici車 una bala.