366 HISTORIAS DEL F?TBOL MUNDIAL | 3 DE NOVIEMBRE
El Rangers elimina milagrosamente al Sporting de Lisboa (1971)
Aquella temporada la hab¨ªa comenzado mal el Glasgow Rangers. Pese a haber ganado la Copa de Escocia pocos meses antes, hizo un comienzo de liga desastroso. De los seis primeros partidos perdi¨® cinco y roz¨®, cosa ins¨®lita para este club, el ¨²ltimo puesto de la tabla. Sus aficionados no estaban nada optimistas con respecto a la Recopa. La primera eliminatoria la jug¨® con el Rennes, ante el que empat¨® de mala manera a domicilio, entre acusaciones de antif¨²tbol por parte de la prensa francesa. El partido de vuelta lo gan¨® 1-0 y sigui¨® adelante.
El sorteo le enfrent¨® luego con el Sporting de Lisboa. Por primera vez en la temporada, el Rangers hizo un gran f¨²tbol en el primer tiempo del partido de ida, en Glasgow, y se fue al descanso ganando por un rotundo 3-0. Pero en la segunda parte volvi¨® a flojear y concedi¨® dos goles, hasta terminar el partido con un incierto resultado de 3-2. La vuelta, en Lisboa, fue de gran dramatismo. Estaba el partido 2-2 cuando, cerca del final, el Sporting marc¨® el 3-2, lo que llev¨® a los equipos a la pr¨®rroga. En ella, el Rangers marc¨® por delante, pero de nuevo volvi¨® a distanciarse el Sporting, hasta un final de 4-3, lo que hac¨ªa un agregado de 6-6. El ¨¢rbitro, Laurens van Raavens, dio paso a la tanda de penaltis, que clasific¨® al Sporting de Lisboa¡ aparentemente. Un periodista escoc¨¦s del Sunday Mail, que estaba de enviado especial en el partido, baj¨® y le coment¨® al m¨¢nager del Rangers, Willie Waddel, que los penaltis no deber¨ªan haberse lanzado, ya que al ser el resultado final del partido, incluida la pr¨®rroga, 4-3, el Rangers estaba clasificado, puesto que primaba el n¨²mero de goles marcados fuera, y el Sporting solo hab¨ªa hecho dos (perdi¨® 3-2) en Glasgow. En esencia, el gol de la pr¨®rroga del Rangers ten¨ªa m¨¢s valor que el del Sporting, por haberse marcado fuera. El ¨¢rbitro hab¨ªa interpretado que en la pr¨®rroga ten¨ªan el mismo valor los goles del de casa que los del de fuera. El m¨¢nager reclam¨® y el ¨¢rbitro comprendi¨®, con horror, que se hab¨ªa equivocado. El Rangers estaba clasificado para la siguiente ronda.
Despu¨¦s de eso, el Rangers eliminar¨¢ al Torino y al Bayern de M¨²nich, y se plantar¨¢ en la final, en Barcelona, ante el Dinamo de Mosc¨². La ganar¨¢ 3-2, enmendando as¨ª su mal comienzo de temporada con un gran t¨ªtulo, que alz¨® su m¨ªtico capit¨¢n John Greig, un hombre extraordinario que roz¨® los mil partidos. Pero aquel ¨¦xito qued¨® empa?ado por la barbarie de sus hinchas, que sembraron el terror en Barcelona. Fue la primera vez que en Espa?a se ve¨ªa a los hooligans de cerca. Diez mil escoceses invadieron Barcelona y pillaron por sorpresa a la polic¨ªa local, que se vio desbordada. La copa no pudo ser entregada en el campo por la invasi¨®n de hinchas incontrolables, sino que se dio en los vestuarios. El choque dejar¨ªa un muerto, 20 heridos graves y 74 leves, y el c¨®nsul general de Gran Breta?a envi¨® una disculpa p¨²blica al alcalde de Barcelona por los hechos. Parad¨®jicamente, el Glasgow Rangers protest¨® a la UEFA porque ?Barcelona no ha tomado las precauciones necesarias ante una final de este tipo?.