Pel¨¦ deja Brasil para jugar en el Cosmos (1975)

Edson Arantes do Nascimento, Pel¨¦, fue el m¨¢s grande, seg¨²n la opini¨®n m¨¢s extendida. Su aparici¨®n con diecisiete a?os en el Mundial de Suecia result¨® estelar. Entraron ¨¦l y Garrincha por Altafini y Joel, en una delantera que no funcionaba del todo, y el equipo despeg¨®. Y Brasil fue campe¨®n del mundo, con dos goles de Pel¨¦ para el 2-5 de la final, ante Suecia. Luego desarrollar¨ªa una prodigiosa carrera en su equipo, el Santos, y en Brasil, con la que gan¨® dos mundiales m¨¢s: en Chile-62 (si bien solo jug¨® dos partidos de la primera fase, luego no pudo hacerlo m¨¢s, por lesi¨®n) y en M¨¦xico-70, donde dej¨® sus ¨²ltimas maravillas. Por en medio, en Inglaterra- 66, le cosieron a patadas hasta que les sacaron del Mundial, a ¨¦l y a Brasil. Tras el Mundial de M¨¦xico renunci¨® a la selecci¨®n.

Pel¨¦ era idolatrado por todo Brasil, pero dio un golpe muy duro a toda su gente cuando anunci¨® que dejaba el pa¨ªs para fichar por un club de nueva creaci¨®n, en una liga que apenas ten¨ªa siete a?os: hablo del Cosmos de Nueva York y la NASL, la North American Soccer League, un intento de relanzamiento del f¨²tbol profesional en Estados Unidos, una iniciativa con aires muy de hoy: show, las mejores estrellas, agitaci¨®n, marketing, fuertes inversiones de las que se esperaba obtener retorno¡­ Todo un poquito artificial. La afici¨®n de Henry Kissinger al f¨²tbol estuvo detr¨¢s de aquel empuj¨®n. El Cosmos era una creaci¨®n de la Warner Communications, formidable empresa de comunicaci¨®n propietaria, entre otras cosas, de los derechos de las universal¨ªsimas pel¨ªculas de Walt Disney. Para el aficionado brasile?o fue una traici¨®n en toda regla que Pel¨¦ les dejara para saltar al mundo rico, a lucrarse en la tierra de los gringos, siempre acusados de abusos en la mitad sur del Nuevo Continente.

A Pel¨¦ le dieron cuatro millones y medio de d¨®lares libres de impuestos, una fortuna en la ¨¦poca, para que jugara y para utilizar su nombre asociado a la marca Warner. ?Vengo para extender el f¨²tbol en un pa¨ªs que todav¨ªa no lo conoce.? ?Y el dinero? ?Tengo que pensar en mi familia.? La verdad es que Pel¨¦ jug¨® honradamente tres temporadas para el Cosmos y gan¨® dos veces el t¨ªtulo. Sucesivamente, el club le fue acompa?ando con otras viejas glorias, procedentes de Europa o de Brasil: Beckenbauer, Chinaglia, Carlos Alberto¡­ ?l abri¨® el camino a otros varios, entre ellos a Cruyff, que jug¨® en los Washington Diplomats. Finalmente se retir¨® all¨ª, en un emotivo partido final Cosmos-Santos (v¨¦ase el d¨ªa 1 de octubre), en el que jug¨® un tiempo en cada equipo y marc¨® el ¨²ltimo de sus 1283 goles. Pero aquella llamarada se apag¨® tan bruscamente como hab¨ªa empezado. Retirada aquella gran generaci¨®n, pasada la moda, el p¨²blico se retrajo de nuevo, los grandes clubes siguieron cerrando y el f¨²tbol languideci¨® otra vez en Estados Unidos como espect¨¢culo. Eso s¨ª: se fortaleci¨® su pr¨¢ctica como deporte escolar, seg¨²n hab¨ªa deseado siempre el reverendo Louis Mayer, que desde la YMCA hab¨ªa predicado durante muchos a?os las virtudes del f¨²tbol para fortalecer los cuerpos y las almas.

Sigue el partido de la fase de grupos de la Copa Libertadores entre: Cristal-Santos.