Bale: dise?ado para las finales
Ha sido protagonista en los ¨²ltimos cuatro t¨ªtulos blancos: su sprint ante Bartra en Mestalla, el vuelo sin motor en Lisboa, el gol en el Mundial de Clubes...
Lo de Bale son las finales. Aunque haya tenido altibajos durante sus tres temporadas en el Real Madrid, especialmente en materia de lesiones, destapa el tarro de las esencias cuando llega d¨ªa de la verdad. Se muestra impenetrable a los nervios y las altas pulsaciones que caracterizan estas partidos. Parece creado para los partidos a cara o cruz. Y es que ha jugado un papel protagonista en los ¨²ltimos cuatro trofeos que el Madrid llev¨® a sus vitrinas¡
El d¨ªa que le arranc¨® las pegatinas a Bartra.
16 de abril de 2014, final de la Copa del Rey en Mestalla. Enfrente el Bar?a y al lado una BBC coja porque faltaba Cristiano, lesionado dos semanas antes contra el Borussia en Champions. En el minuto 85 de un Cl¨¢sico muy disputado sali¨® dela nada El Expreso de Cardiff?para irse con una velocidad insultante de Bartra y recorrer 59,1 metros en 7,04 segundos, en los que dio 30 zancadas y seis toques al bal¨®n, antes de batir con un disparo entre las piernas a Pinto. ¡°M¨ªster 100 millones firm¨® una obra maestra de potencia y clase¡±, sintetiz¨® La Gazzetta dello Sport.?El propio Bale estaba, tras levantar la Copa, en una nube: ¡°Ha sido el gol de mi vida¡±.
En Lisboa complet¨® el '92:48' de Ramos.
Si en Valencia se sac¨® de la manga el gol de su vida, un mes y ocho d¨ªas despu¨¦s logr¨® otro de un valor incalculable. Ramos inyect¨® vida al Madrid con su hist¨®rico cabezazo en Da Luz cuando la final agonizaba, pero el que le plant¨® la estocada definitiva en el minuto 110 fue Bale. Di Mar¨ªa intent¨® marcar con el exterior pero el bal¨®n rebot¨® en Courtois, sali¨® despedido por el aire hacia el segundo palo y all¨ª apareci¨® el gal¨¦s para ganar el bal¨®n en el cielo a Alderweireld. ¡°Creo que me pas¨¦ dos d¨ªas en el aire antes de cabecear esa pelota¡±, recordaba esta semana entre risas el propio Bale. ?
En Cardiff no marc¨®¡ pero asisti¨®.
El 12 de agosto de 2014 la Supercopa de Europa se puso en disputa en Cardiff, la ciudad natal de Bale. Un Real Madrid-Sevilla en la cuna del drag¨®n madridista que parec¨ªa dise?ado para su tercera gran noche de gloria consecutiva. Cristiano se llev¨® finalmente el gran m¨¦rito (suyos fueron los dos goles en el 2-0 a los de Emery) pero Bale estuvo brillante y el primer tanto blanco fue una asistencia espectacular suya al segundo palo. No pudo marcar, pero sali¨® de Cardiff ovacionado por sus paisanos.
Marrakech, ¨²ltimo gol antes de la debacle.
El gal¨¦s tambi¨¦n aport¨® en la consecuci¨®n del Mundial del Clubes en Marruecos. El 20 de diciembre de 2014, el Madrid era un club feliz antes de despe?arse precisamente desde el inicio de 2015. Aquel Mundialito fue un punto de inflexi¨®n y Bale marc¨® el 2-0 final ante San Lorenzo de Almagro. Un gol simb¨®lico por ser un punto aparte con lo que vendr¨ªa despu¨¦s. Lo consigui¨® en el 51¡¯ tras un gran pase de Isco y despu¨¦s de un chut centrado en el que ¡®cant¨®¡¯ el portero argentino Torrico. Un gol para conseguir la escarapela de campeones del mundo de clubes que acab¨® siendo maldita para el Madrid.
?Y Mil¨¢n??
Queda por saber qu¨¦ har¨¢ este s¨¢bado en San Siro. Aparecer¨¢ sin marcar a¨²n en esta Champions, pero fue el mejor en la vuelta de semifinales contra el City aunque el gol blanco, en un disparo suyo, se lo acab¨® concediendo la UEFA a Fernando en propia puerta. Sea como fuere, est¨¢ en su mejor momento y amenaza con soltarse la coleta. ¡°Para esto es para lo que vine al Madrid, para jugar finales y ganarlas¡±.