Yashin: el ¨²nico portero capaz de convertir un bal¨®n en oro

El n¨²mero uno. No ha habido otro portero en la historia del f¨²tbol como el ruso Lev Yashin, ¡®La Ara?a Negra¡¯, ¨²nico en su demarcaci¨®n que ha logrado el Bal¨®n de Oro que otorga 'France Football'. Fue en 1963. Durante medio siglo nadie ha vencido a los genios que patean la pelota para merecer tal distinci¨®n. Y eso que Mazurkiewicz, Banks, Iribar, Maier, Zoff, Schmeichel, Buffon o Casillas han forjado carreras envidiables.

Yashin (Mosc¨², 22 de octubre de 1929) fue un adelantado a su tiempo. Aprovech¨® su envergadura y agilidad para brillar en la por ter¨ªa de hockey hielo antes de pasarse al f¨²tbol, donde obtuvo todos los reconocimientos personales pese a haber ganado con la URSS s¨®lo una Eurocopa. La segunda se la quit¨® de sus gigantescas manos Marcelino con aquel inesperado cabezazo.

En el Mundial 58 de Suecia, sorprendi¨® al ser pionero al utilizar guantes. Su jersey oscuro denotaba la sobriedad con la que se mov¨ªa de palo a palo para blocar todo lo que estaba a su alcance. Ten¨ªa cualidades muy especiales: un gran saque con la mano de arriba a abajo para facilitar el contragolpe, una dote de mando tal que avergonzaba a su mujer en el campo y unas salidas de pu?os que hac¨ªan temblar a los delanteros. Los tent¨¢culos de ¡®La Ara?a¡¯ llegaban a todas partes.

Esas virtudes y m¨¢s, como su humanidad y la fidelidad a unos colores (los del Dinamo de Mosc¨²), impactaron a Iribar, quien admite que fue su gran ¨ªdolo. De ah¨ª que, aprovechando una visita del Athletic al Lokomotiv, aceptase el plan de AS para visitar la tumba de Yashin en el cementerio de Vagankovskaya, donde yace su cuerpo desde que falleciese el 20 de marzo de 1990. Antes, ya retirado, se apunt¨® a un homenaje al de Zarautz en San Mam¨¦s, cuando bati¨® el r¨¦cord de internacionalidades de Ricardo Zamora, detalle que jam¨¢s olvidar¨¢ el futbolista m¨¢s emblem¨¢tico en la historia rojiblanca.

Emoci¨®n sin freno. La visita a la tumba de Yashin, cargada de emoci¨®n por el reencuentro y ambientada por una espectacular nevada, queda ah¨ª para el recuerdo. Es un simple detalle comparado con sus cientos de blocajes y estiradas que tantas admiraciones arrancaron. Ambos fueron sacados a hombros de un campo y llenaron sus estadios hasta la bandera en el adi¨®s a la porter¨ªa.

¡°Gracias, amigo¡±, despidi¨® Iribar a Yashin, quit¨¢ndole la nieve de la figura que tan fielmente refleja en su tumba al ruso. Deposit¨® unas flores rojiblancas y volvi¨® la mirada ya y¨¦ndose. ¡°Era una persona a la que admiraba tanto que hasta la quer¨ªa¡±. Una frase para reflexionar: se puede amar a un rival en el f¨²tbol.