ESPANYOL
El Espanyol ya no 'jugar¨¢ como local' en su ciudad, Cornell¨¤
La pe?a anfitriona echa definitivamente el cierre en Riereta, tras sufrir actos inc¨ªvicos e incluso vand¨¢licos. AS vivi¨® con ellos su ¨²ltimo partido.
No pudo el equipo, ni siquiera con ese bal¨®n que Javi L¨®pez estrell¨® en el larguero, despedir como se merec¨ªa al local de la Penya Espanyolista de Cornell¨¤ en la calle Riereta, que el domingo, tras decretarse el final del Deportivo-Espanyol, ech¨® el cierre. Historia viva de la militancia y testigo mudo de cientos de vivencias de quienes desde la inauguraci¨®n del cercano estadio ¡ªse ubica a unos 150 metros¡ª se congregaron para vivir la previa de cualquier partido. La persiana, desde ahora, permanecer¨¢ cerrada.
¡°No quiero enfrentarme a nadie¡±, asume Xavi Edo, presidente de la agrupaci¨®n, que ha pasado una de las peores semanas de su vida. Primero le cit¨® el Ayuntamiento de Cornell¨¤ para recomendarle que cerrase el local, despu¨¦s se reuni¨® con su junta y el abogado Arnau Baqu¨¦, quien les dio esperanza: sin una notificaci¨®n por escrito, no ten¨ªan por qu¨¦ tirar la toalla. Pero Edo reflexion¨®, en las muchas horas de insomnio de estos ¨²ltimos d¨ªas, y tom¨® la dolorosa decisi¨®n de dejarlo.
¡°De todos modos, no habr¨ªamos podido abrir m¨¢s en los partidos de casa, o a la larga hubi¨¦ramos tenido m¨¢s problemas¡±, reconoce Edo, agradecido a ese ¡°90 por ciento de la afici¨®n que ven¨ªa al local con alegr¨ªa pero pac¨ªficamente¡±, y resignado ante ¡°los cuatro desalmados¡±, cuyos enfrentamientos con vecinos y actos inc¨ªvicos como encendida de bengalas han acabado con el local de Riereta. ¡°El ejemplo fue lo sucedido antes del ¨²ltimo partido en casa, contra el Atl¨¦tico. ?Nos robaron la r¨¦plica de la estatua de la afici¨®n que ten¨ªamos en una estanter¨ªa!¡±, informa el presidente, sin todav¨ªa comprender el porqu¨¦.
Eso s¨ª, Edo lanza un aviso a navegantes: ¡°La pe?a de Cornell¨¤ no desaparecer¨¢¡±. ?l, que fue uno de sus fundadores, en 1981, tiene claro que ¡°abriremos un nuevo local con m¨¢s fuerza todav¨ªa¡±, aunque ¨¦ste se ubicar¨¢ m¨¢s lejos del estadio y seguramente no abrir¨¢ el d¨ªa de partido. Mientras tanto, Edo y su gente deber¨¢n seguir haciendo frente al pr¨¦stamo que pidieron en 2008 para adecuar la que hasta hoy ha sido sede de brindis y esperanzas horas antes de que rodase el bal¨®n. Por desgracia, el Espanyol no ser¨¢ profeta en su tierra.