James (II): De conquistar Banfield a explotar en el Oporto luso

Como si 113 a?os de espera no hubieran sido suficientes, los 90 minutos del ¨²ltimo partido del campeonato fueron tormentosos. Banfield ca¨ªa 2-0 ante Boca Juniors y rezaba para que San Lorenzo derrotara a Newell¡¯s en Rosario. Las oraciones dieron resultado y el juez pit¨® el final del partido. San Lorenzo hab¨ªa hecho su trabajo. Las c¨¢maras enfocaron la celebraci¨®n del t¨¦cnico Julio C¨¦sar Falcioni con los brazos en alto. Pocos segundos despu¨¦s, James Rodr¨ªguez apareci¨® en la escena. Corr¨ªa con una bandera de Colombia en la espalda.

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El 13 de diciembre de 2009, el Taladro se coron¨® campe¨®n de Argentina por primera vez en su historia y James consigui¨® su primer t¨ªtulo en Primera, en La Bombonera. ¡°Vibra el colombiano James Rodr¨ªguez que no puede creer tanto festejo¡±, public¨® Clar¨ªn en su cr¨®nica. No pod¨ªa ser de otra manera. Con 18 a?os era campe¨®n y figura de un Banfield que termin¨® la Liga con 41 puntos y con el portero menos goleado y el goleador del campeonato en sus filas.

Paciente. Fue dif¨ªcil llegar hasta ah¨ª, ser extranjero cuesta. Dos a?os atr¨¢s, James se entrenaba alejado del grupo, le hablaban poco y lo ¨²nico que lo retuvo en Buenos Aires fue la idea de no traicionar un sue?o. Tanta paciencia obtuvo la recompensa de una convocatoria con el primer equipo en Mar del Plata. En el f¨²tbol hay dos tipos de entrenadores: los que dan la oportunidad y los que creen. Para James, en Banfield, Jorge Burruchaga fue el primero y Julio C¨¦sar Falcioni, el segundo.

Se estren¨® en Argentina en el primer partido del Clausura 2009, con Burruchaga como t¨¦cnico. Jug¨® 13 minutos y se convirti¨® en el extranjero m¨¢s joven del f¨²tbol argentino en debutar (17 a?os). Dos partidos despu¨¦s, los periodistas tuvieron que buscar m¨¢s informaci¨®n: James anot¨® un golazo que mereci¨® notas aparte. Un zurdazo al ¨¢ngulo que se convirti¨® en su sello.

Un mes m¨¢s tarde, Burruchaga renunci¨® y lleg¨® Falcioni. El hombre que marcar¨ªa la carrera de James conoc¨ªa el f¨²tbol colombiano: crey¨® en su talento y ¨¦l respondi¨® con resultados. Vistiendo la camiseta n¨²mero 8 del Taladro, James jug¨® 48 partidos, marc¨® 10 goles y conquist¨® el coraz¨®n de los hinchas.

Jorge Mendes, agente de Cristiano, empez¨® a guiar su futuro. Udinese y River lo quer¨ªan, pero el Espanyol estuvo m¨¢s cerca. Tal como lo confirm¨® el exdirector deportivo del club catal¨¢n, Ram¨®n Planes, un problema de avales hizo que James terminara fichando por el Oporto. Fue presentado el 6 de julio de 2010. El 70% de su pase cost¨® 5,1 millones de euros.

Debut¨® con gol en un amistoso frente al Ajax, pero tuvo que luchar cuatro meses por hacerse con un puesto. Mientras, el Oporto ganaba la Supercopa de Portugal, su primer t¨ªtulo all¨ª. En ese equipo estaban sus compatriotas Falcao y Guar¨ªn, apoyo necesario en los d¨ªas de soledad y poco f¨²tbol.

Finalmente llegaron las oportunidades. Su primer gol oficial fue frente al CSKA de Sof¨ªa en la Europa League y esa misma temporada anot¨® un hat-trick frente al Vit¨®ria de Guimar?es en la final de la Copa portuguesa. James volv¨ªa a ser James. De ah¨ª en adelante vinieron m¨¢s t¨ªtulos, goles, asistencias, portadas y los primeros contratos publicitarios importantes. Todo en orden como para dar otro gran paso: el 24 de diciembre de 2010 se cas¨® con Daniela Ospina.

Logros. En julio de 2011, el Oporto aument¨® su cl¨¢usula de 30 a 45 millones. James respondi¨®. En los siguientes 12 meses marc¨® 14 goles y fue Jugador Revelaci¨®n. Falcao y Guar¨ªn se fueron, pero lleg¨® el colombiano Jackson Mart¨ªnez, con el que logr¨® hacer una gran dupla en la temporada 2012-13. El Oporto acab¨® invicto y gan¨® su 27? Liga. Tres Ligas, tres Supercopas, una Copa y una Europa League fueron su cosecha en Portugal. Si en Banfield forj¨® la personalidad para triunfar, en Oporto se convirti¨® en un jugador de ¨¦lite.

James se convirti¨® en el tipo de figura que Rybolovlev, due?o del M¨®naco, quer¨ªa en su equipo. Puso 45 millones sobre la mesa. La oferta era s¨®lida en lo econ¨®mico, pero dejaba dudas en lo deportivo y en Colombia caus¨® pol¨¦mica porque en ese momento el 10 ya era figura de la selecci¨®n dirigida por P¨¦kerman¡­ Pero esa historia merece un cap¨ªtulo aparte.