REAL MADRID 4 - ATL?TICO 1
Cibeles core¨®: ¡°S¨ª, s¨ª, s¨ª, la D¨¦cima ya est¨¢ aqu¨ª¡±
La plantilla del Real visit¨® a la diosa pasadas las seis de la ma?ana. El c¨¢ntico de la afici¨®n blanca: ¡°Como no te voy a querer si fuiste campe¨®n de Europa por D¨¦cima vez¡±.Final Champions League en vivo online y en directo: Juventus Real Madrid .
Nada m¨¢s pitar Kuipers el final del partido, las bocinas de los coches comenzaron a sonar en los alrededores de Cibeles. Miles de madridistas con camisetas, banderas y bufandas comenzaron a poblar la plaza de Cibeles. ¡°S¨ª, s¨ª s¨ª, la D¨¦cima ya est¨¢ aqu¨ª¡± o ¡°C¨®mo no te voy a querer, como no te voy a querer, si fuiste campe¨®n de Europa por d¨¦cima vez...¡±, fueron los primeros c¨¢nticos que se escucharon. La euforia se desbord¨® por momentos. Ni?os y mayores. Madres y ni?as. El madridismo estaba exultante. Muchos salieron de sus casas, otros llegaron desde el Santiago Bernab¨¦u , donde disfrutaron del partido en las pantallas gigantes, otros lo vieron entre amigos en bares de la capital.
La alegr¨ªa era enorme. Risas, emoci¨®n, lloros. Todo vale en una noche inolvidable. Doce a?os despu¨¦s el Madrid vuelve a Cibeles para celebrar otra Copa de Europa, la D¨¦cima. ¡°Cu¨¢ntas veces lo he pronunciado a lo largo de todos estos a?os¡±, dec¨ªa un aficionado que fue de los primeros en llegar.
La expedici¨®n del Real Madrid aterriz¨® en Madrid pasadas las cuatro de la ma?ana en y dos horas despu¨¦s hac¨ªa su aparici¨®n en la plaza de Cibeles, lo que provoc¨® el j¨²bilo desatado de la entusiasta afici¨®n, que llevaba esperando horas sin cesar en sus c¨¢nticos.
El momento cumbre de la celebraci¨®n fue cuando Sergio Ramos, a quien Iker cedi¨® los honores en esta ocasi¨®n, engalan¨® a la diosa. La emoci¨®n era inmensa; hab¨ªa ganas de Copa de Europa. Demasiados a?os sin ganarla. Dos visitas a la diosa esta temporada, nada m¨¢s y nada menos. El sentimiento es grande, la alegr¨ªa es m¨¢s. Una nueva Copa de Europa se une a las otras nueve en el Museo del Real Madrid.
Se escuch¨® corear el nombre de Cristiano, el de Casillas o el de Ramos. Los aficionados no quer¨ªan olvidarse de nadie. Un mar de orejonas de papel, de pl¨¢stico o de cart¨®n recibi¨® a la verdadera. La fiesta sigue esta noche.