Anzhi ruso: de megaproyecto a peor equipo de toda Europa

Daguest¨¢n, la rep¨²blica que colinda con Chechenia y el Mar Caspio, al sur de Rusia, lleg¨® a ilusionarse con que en su capital, Makhachkala, jugasen los mejores jugadores del mundo. El Anzhi, el modesto club de la ciudad, cay¨® en manos del magnate Suleyman Kerimov, que quer¨ªa hacer del equipo de su infancia un conglomerado de estrellas y figuras.

Para ello invirti¨® dinero de forma llamativa. El ascenso a la Primera Divisi¨®n rusa dispar¨® ese gasto. Contrat¨® a Roberto Carlos, a Etoo, a Lass, a Boussoufa, a Tardelli, a Willian. Dio las riendas del banquillo a Guus Hiddink. La f¨®rmula para que llegaran tantos nombres propios fue vivir y entrenarse en Mosc¨² y viajar a Makhachkala ¨²nicamente para los encuentros, haciendo uso de un jet privado que recorr¨ªa los 3.000 kil¨®metros de distancia.

El curso pasado los resultados respaldaron el proyecto. El Anzhi lleg¨® a pelear por el t¨ªtulo aunque en las ¨²ltimas jornadas acabase descolg¨¢ndose. Al menos s¨ª se clasific¨® para la Europa League. Sin embargo, el mal arranque de esta temporada volte¨® por completo la situaci¨®n. Kerimov se cans¨® y cort¨® el grifo econ¨®mico. Y con ello se desplom¨® todo. Se fueron las estrellas una a una. El club vendi¨® a todas para recuperar parte de la inversi¨®n, lo que hizo que el nivel deportivo descendiera ipso facto.

Lo que nadie esperaba es que este descenso fuera tan marcado. El Anzhi es colista ahora mismo en Rusia y no ha ganado un solo encuentro de los 19 disputados. Ning¨²n otro equipo en toda Europa repite tan p¨¦simos registros. Su balance de ocho empates y once derrotas le sit¨²a como colista de la liga, a cinco puntos ya de la promoci¨®n por mantener la categor¨ªa. El flamantemente renovado Anzhi Arena fue estrenado para dar cobijo a los m¨¢s grandes futbolistas, pero en cambio est¨¢ viendo c¨®mo su equipo se diluye. Las gradas se est¨¢n vaciando. El sue?o parece ya lejano. Un sue?o en realidad imposible.