Bougherra mete a Argelia en el Mundial pese al sufrimiento
Burkina Faso se top¨® con el larguero en el tiempo de descuento. El defensa argelino, que debi¨® ser expulsado, desnivel¨® el partido en una jugada embarullada.

El sufrimiento se adue?¨® de Argelia el d¨ªa en el que un gol de Bougherra le condujo de nuevo al Mundial. Cost¨® lo suyo. Cost¨® tanto que Burkina Faso tuvo la clasificaci¨®n en el descuento con un remate que se estrell¨® en el larguero. Argelia pr¨¢cticamente regal¨® el primer tiempo. En vez de salir decidido al ataque, se vio agarrotado y sin fluidez, incapaz de meter mano a una Burkina Faso c¨®moda con su superpoblaci¨®n en mediocampo. El t¨¦cnico visitante dej¨® solo en punta a Pitroipa con la esperanza de que el r¨¢pido extremo del Rennes pudiera cazar alg¨²n contragolpe, pero ni eso necesit¨® para respirar tranquilo en una primera mitad sin la intensidad propia de un choque de tanta relevancia.
La grada conten¨ªa la respiraci¨®n esperanzada de que la exigua ventaja de los burkineses pudiera ser neutralizada en cualquier acci¨®n puntual. No aparec¨ªan demasiado Brahimi y Feghouli, los dos jugadores de m¨¢s talento de los argelinos, y la ¨²nica oportunidad clara fue un remate de Slimani a centro lateral. Sin embargo, lo m¨¢s destacado en este periodo fue la dur¨ªsima entrada de Bougherra que el ¨¢rbitro transform¨® en tarjeta amarilla cuando todo el mundo esperaba la roja.
No result¨® un asunto balad¨ª. Al poco de salir del descanso, con el tiempo justo para que Burkina Faso a¨²n no se hubiera metido del todo en el partido, el propio defensor argelino resolvi¨® un barullo para poner en ventaja a su selecci¨®n. Menci¨®n especial merece en la jugada el central del Lyon Bakary Kon¨¦, quien en su intento por despejar estrell¨® la pelota en la cara de Bougherra. El rebote se introdujo inapelable en la porter¨ªa.
El gol trajo los miedos a Burkina. Su t¨¦cnico movi¨® ficha y meti¨® al tocado Alain Traor¨¦, que puso algo de luz en medio de la tiniebla. Pero solventar la situaci¨®n implicaba dejar en nada la ilusi¨®n de los miles de aficionados argelinos que desde primera hora de la ma?ana abarrotaban las gradas del estadio. Demasiado reto para una selecci¨®n que buscaba su primer Mundial y que pudo encontrarlo en el descuento en un c¨®rner que se estrell¨® en el larguero. Argelia sonri¨®, Burkina llor¨®. El mejor torneo del planeta no tiene espacio para todos los que lo merecen.