OSASUNA 1 - REAL ZARAGOZA 0
Osasuna saca la cabeza y asoma al Zaragoza al abismo
Un gol de cabeza de Kike Sola le bast¨® para la victoria. El Zaragoza hizo un buen primer tiempo, tuvo ocasiones pero le falt¨® acierto. Silva fren¨® el control aragon¨¦s.
Osasuna estaba a ocho puntos del Zaragoza al final de 2012 y anoche lo sobrepas¨®: una llamada a la alarma en toda regla para un Zaragoza que no ha logrado sumar una sola victoria este a?o y que en Pamplona exhibi¨® juego suficiente en el primer tiempo para reclamar la justicia mayor de un empate, una posibilidad negada por su insuficiente p¨®lvora en el ataque y por la inseguridad flagrante dela defensa. Situvo m¨¦ritos, no logr¨® capitalizarlos. Un gol de Kike Sola cuando el partido a¨²n estaba naciendo le bast¨® a Osasuna para imponerse. El Zaragoza domin¨® la primera mitad, pero los cambios t¨¢cticos de Mendilibar en el intermedio frenaron su control y dejaron al equipo de Jim¨¦nez varado en su derrota y en la clasificaci¨®n.
Con su gol en el minuto 4, Osasuna someti¨® al Zaragoza a la exigencia de un largo regreso que no completar¨ªa. El gran cabezazo de Kike Sola le son¨® a Osasuna como un cornetazo de retreta. Su ¨ªmpetu entr¨® en receso y Apo?o comenz¨® a mezclar el juego del Zaragoza con buen criterio y algunas gotas de su mejor gusto. Aunque el conjunto de Jim¨¦nez produjo aproximaciones sustanciales, Osasuna no dio nunca la impresi¨®n de sentirse inc¨®modo en ese escenario. Mucho del peligro del Zaragoza vino desde la izquierda, con centros de Monta?¨¦s, Abraham y Rochina, que tomaba perfiles cambiantes. Una vez que se asom¨® al ¨¢rea encontr¨® un remate que oblig¨® a Andr¨¦s.
Bienvenu y Apo?o no llegaron a alcanzar esos servicios por poco. El camerun¨¦s, debutante como titular en el puesto de H¨¦lder Postiga, tuvo escasas apariciones, pero estuvo m¨¢s cerca que nadie del gol. Un pelotazo desde el fondo le permitir¨ªa mostrar su exuberante carrera, rebasar a Fla?o y obligarlo al derribo camino del ¨¢rea. Velasco Carballo interpret¨® que la cobertura de Rub¨¦n, que ven¨ªa en paralelo, bastaba para que la jugada no fuese ocasi¨®n manifiesta de gol. Lo era. Fla?o vio amarilla.
Osasuna se equilibrar¨ªa mucho m¨¢s con la entrada de Silva en el descanso. Mendilibar hab¨ªa localizado sin dificultad las superioridades num¨¦ricas en el medio que el Zaragoza traduc¨ªa a control del juego. Con Silva, esa prevalencia se acab¨®. Nino y Armenteros se abrieron a los lados y eso bast¨® para contener el dominio aragon¨¦s y recuperar la pelota m¨¢s adelante. As¨ª, el partido gan¨® un animado vaiv¨¦n de lado a lado: Kike Sola y Oier se plantaron frente a Roberto con balones salidos del pie de Armenteros porla derecha. Noencontraron el remate. Rochina culebre¨® otra vez en la frontal y dispar¨® cruzado.
La din¨¢mica del segundo tiempo result¨® m¨¢s equilibrada. Osasuna estuvo m¨¢s pr¨®ximo al gol, con Silva abanicando su centro del campo y Oier en el papel de pulm¨®n. Apo?o, la luz del Zaragoza en la primera mitad, perdi¨® protagonismo y, aunque Monta?¨¦s y Rochina siguieron intent¨¢ndolo con incursiones desde los flancos, la nula capacidad de Bienvenu para bajar ninguna pelota o siquiera tocarla, le impidi¨® avanzar posiciones. El peligro para Andr¨¦s qued¨® circunscrito a los balones parados, pero ni el Zaragoza encontr¨® rematadores ni el portero autoriz¨® excesos en su territorio. Una falta de Apo?o que busc¨® el palo derecho fue el ¨²ltimo aliento del Zaragoza, que se asoma al abismo un a?o m¨¢s.