Liga BBVA | Granada - Celta
El Celta pide revancha a un Granada en peligro
El playoff sigue presente. Partido especial para Orellana
El 11 de junio de 2011 pas¨® a la historia como uno de los momentos m¨¢s emocionantes del f¨²tbol espa?ol. Al menos en los ¨²ltimos a?os. Un inicio trepidante de un magn¨ªfico playoff que acab¨® d¨ªas m¨¢s tarde con el Granada en Primera 35 a?os despu¨¦s y el Celta llorando por las esquinas. Y es que a los de Paco Herrera se le hab¨ªa escapado el tren sin saber que esas l¨¢grimas negras se volver¨ªan muy pronto en una sonrisa m¨¢gica. Ahora s¨ª disfrutan entre los grandes, como el Granada. Porque as¨ª es el f¨²tbol, que al final pone a cada uno en sitio. Y ese 11 de junio, el destino quiso que el Granada comprase medio billete hacia la ¨¦lite, en una noche vibrante y no exenta de pol¨¦mica. Un partidazo que acab¨® con el meta Roberto como h¨¦roe en la tanda de penaltis, con Michu desolado y todo Los C¨¢rmenes haciendo la ola.
Ausencias. En este reencuentro tildado de revancha para los celestes y de necesidad para los locales, faltar¨¢n protagonistas de esa noche como el propio Michu, triunfando en la Premier, Fabri, Trashorras o Dani Ben¨ªtez, que no dud¨® en lanzar el cuarto penalti cuando ya hab¨ªa fallado dos durante el partido. Y acert¨®. Hoy lo ver¨¢ en la grada porque a¨²n est¨¢ sancionado por el botellazo a Clos G¨®mez. Su puesto lo ocupa Orellana, otro que vivir¨¢ un d¨ªa especial. El chileno fue h¨¦roe con el Granada y un a?o m¨¢s tarde con el Celta. Dice tener morri?a de su pasado en Vigo y hoy tiene la oportunidad de volver a sonre¨ªr en Los C¨¢rmenes. Anquela se lo agradecer¨¢, su m¨¢quina debe salir ya del atolladero o su puesto correr¨¢ peligro muy pronto.
Herrera, que ha aguantado en Vigo vacas flacas y gordas, mantiene la forma de jugar que brill¨® en Segunda pero adaptado a los tiempos. Iago Aspas es el referente arriba y est¨¢ la duda de si le acompa?ar¨¢ el coreano Park o bien Bustos o Nacho Insa. En el Granada, la lesi¨®n de Floro Flores abre el puesto de nueve para El Arabi, que necesita dar ya un golpe en la mesa. El mismo que el Granada. O gana, o la vida se pintar¨¢ de negro. Y encima le espera una revancha. No es el playoff, pero el premio final tambi¨¦n es muy grande. Tanto o m¨¢s que el de aquel 11 de junio 2011.