MALLORCA 1 - REAL ZARAGOZA 0 | LIGA BBVA
Un Mallorca de Primera estrangula al Zaragoza
El Mallorca ratifica la permanencia gracias a su victoria en casa. V¨ªctor hizo el ¨²nico gol. Los de Jim¨¦nez, a cinco de la salvaci¨®n.
El Mallorca seguir¨¢ jugando en la m¨¢xima categor¨ªa del f¨²tbol espa?ol. Sell¨® su billete a falta de cuatro jornadas y encima ante su afici¨®n. Poco m¨¢s se le puede pedir a un equipo que coquete¨® con el descenso en el primer tramo de la Liga. Hasta la llegada de Joaqu¨ªn Caparr¨®s. Desde entonces el equipo bermell¨®n ha caminado con paso firme hacia la cima de la salvaci¨®n. Ha hecho cumbre antes de tiempo gracias a la sobriedad defensiva, el aplomo de su centro del campo y la pericia del Chori Castro en la banda y sobre todo a bal¨®n parado. Festeja el Mallorca y el Real Zaragoza se queda sin aire de primera. Despu¨¦s de unas bocanadas, para algunos prometedoras y para otros in¨²tiles, el equipo aragon¨¦s volvi¨® a mostrar la cara m¨¢s fea. La de equipo plano en la creaci¨®n y desastroso en defensa. Los de Jim¨¦nez dieron un paso m¨¢s hacia el abismo de Segunda tras caer por la m¨ªnima en Mallorca tras el gol de V¨ªctor Casades¨²s a la salida de un c¨®rner, el punto negro del Zaragoza esta temporada.
Mallorca no tra¨ªa buenos recuerdos a la parroquia blanquilla. All¨ª consum¨® su ¨²ltimo descenso a la categor¨ªa de plata del f¨²tbol espa?ol (en la temporada 2007-2008) y sus viajes siempre fueron devastadores. A los viejos fantasmas hab¨ªa que a?adir ausencias significativas como Micael, Obradovic, Pinter o Aranda. Adem¨¢s el Mallorca no iba a regalar nada. Los baleares pod¨ªan dar carpetazo a su temporada y disfrutar del buen tiempo de la isla antes de tiempo. As¨ª que el partido pintaba duro, de los que cuesta masticar. La intenci¨®n del Zaragoza fue hacerlo digerible desde el comienzo. Sin trenzar en exceso los aragoneses avisaron a Aouate desde el comienzo con ocasiones de Zucullini y Helder Postiga. El portugu¨¦s tuvo la m¨¢s clara al cuarto de hora al desaprovechar en boca de gol una falta esquinada botada por Luis Garc¨ªa.
Al Mallorca le cost¨® m¨¢s tiempo entrar al partido pero en ese intervalo de t¨ªmido dominio blanquillo tuvo su momento gracias a Da Silva. El paraguayo se li¨® a la hora de despejar un bal¨®n en el ¨¢rea chica y el error pudo ser mortal en el devenir del encuentro. Y el Zaragoza no est¨¢ para esos regalos. Cosa que no entr¨® en algunas cabezas zaragocistas. Otro despiste de la zaga roz¨® la histeria pero por ah¨ª apareci¨® ?lvarez Izquierdo para anular un gol de Chico por fuera de juego inexistente.
El Mallorca se consolid¨® en el encuentro cuando su centro del campo tom¨® posiciones. Con eso, unas descargas del Chori desde la izquierda y el olfato de Hamed bastaron para desconectar el ¨ªmpetu inicial del Zaragoza. Se hizo de noche en las cabezas aragonesas y de forma natural se arrinconaron a la espera de la tragedia. Y el m¨¦todo de ejecuci¨®n no fue novedoso. Los balones a bal¨®n parado han condenado al Zaragoza durante toda la temporada y de esa forma solt¨® la cuerda de la permanencia en el Iberostar. El Chori Castro sac¨® su guante en un c¨®rner y V¨ªctor Casadesus entr¨® como un morlaco desde atr¨¢s mientras Lanzaro y Paredes chocaban en el salto.
El Zaragoza sinti¨® v¨¦rtigo al verse colgando al borde del abismo. Qued¨® noqueado ante el empuj¨®n del Mallorca y hasta el descas¨® se limit¨® a mantener el tipo sin mirar en ning¨²n momento a Helder, un compa?ero en la lejan¨ªa.
El paso por los vestuarios no mejor¨® la cara del Zaragoza. Jim¨¦nez quiso ventilar el equipo con la entrada de Oriol por Dujmovic, pero el Mallorca no otorgaba ni un metro de esperanza aragonesa. Marti y Pina eran los terratenientes de la zona medular y les malhumoraba cualquier intromisi¨®n blanquilla. Como el centro del campo era territorio minado, el Zaragoza busc¨® el juego directo para amargar lo que ven¨ªa siendo una pl¨¢cida tarde para el equipo de Caparr¨®s.
El Mallorca palpaba la salvaci¨®n matem¨¢tica y no quiso complicaciones. Dio un par de pasos hacia atr¨¢s para asegurar la categor¨ªa a falta de cuatro jornadas para el final y festejar junto a su afici¨®n. El Zaragoza acept¨® el papel de creador, aunque s¨®lo fuera por unos minutos, pero nunca consigui¨® encerrar a su rival. Fue un quiero y no puedo de un Zaragoza que se ahoga en el mismo campo donde toc¨® fondo hace cuatro temporadas.