Europa League | Villarreal 3 - Oporto 2
Digno adi車s al sue?o
El Villarreal busc車 sin suerte una machada imposible

Que el pasaporte a la final de Dubl赤n se perdi車 en el encuentro de ida (5-1) parec赤a evidente, pero que merec赤a la pena intentarlo porque el Villarreal ten赤a argumentos futbol赤sticos para hacer historia, tambi谷n. Lo dif赤cil era hac谷rselo creer a los jugadores amarillos y Garrido lo consigui車. As赤 lo demostraron los extraordinarios primeros 40 minutos del Submarino en los que se rond車 la machada. Lleg車 un gol, mereci車 entrar otro y quedarse con diez el Oporto. Es la intrahistoria que quedar芍 en nuestro imaginario y que borr車 de un plumazo un accidente en forma de gol portugu谷s. Ah赤 muri車 el sue?o espa?ol.
El 1-1 fue un mazazo descomunal que consumi車 las fuerzas y la ilusi車n de un Villarreal tocado. Nadie duda de que el Oporto es un gran equipo, con futbolistas de nivel que pronto vender芍n a un alto precio, pero por encima de lo que diga el abultado 7-4 del global, lo cierto es que la distancia respecto al cuadro espa?ol no es 谷sa. Algunos imponderables se aliaron con Villas-Boas para entrar en una final que merecen, pero por la que deber赤an haber sufrido m芍s. Por ejemplo, la clave de anoche fue el 1-1, nacido en un disparo manso que s車lo envenen車 la pierna de Musacchio. Fue un mensaje claro de la diosa fortuna al Villarreal indic芍ndole que la de ayer no iba a ser su noche y que esta final no iba a ser la suya.
Para la fr赤a estad赤stica quedar芍 que la diferencia entre espa?oles y portugueses fue grande, pero vistos los dos partidos sabemos que no fue as赤. En la ida hubo una hora de dictadura amarilla falta de efectividad. Ayer los de Garrido adolecieron de lo mismo, de punter赤a y generosidad pues Rossi tuvo para asistir el 2-0 y decidi車 disparar sin 芍ngulo. Tambi谷n en la ida Nilmar pec車 de eso y lo ha acabado pagando el Villarreal. Es lo que pudo haber sido y no fue porque lo que lleg車 fue el 1-2 de Falcao reci谷n salidos del vestuario.
Orgullo.
Sin posibilidades de remontar, al conjunto espa?ol le quedaba hundirse o echar mano de su grandeza para, al menos, demostrar y demostrarse que no es peor que el finalista. Y fue eso lo que pas車. El amago de venirse arriba de los lusos lo cortaron los locales con dos duras entradas que le indicaron al rival que, de pasearse, nada de nada. Los de Garrido volvieron a encadenar llegadas, sumaron un remate al palo, un penalti que se qued車 sin pitar y dos goles m芍s.
Otro manojo de ocasiones que resumen lo que ha sido esta amarga semifinal. El Villarreal puso m芍s f迆tbol, tuvo m芍s llegadas pero le falt車 punter赤a. S車lo eso, que no es poco, marc車 la diferencia entre un semifinalista y un finalista. Pese al adi車s, la grada de El Madrigal se puso en pie para aplaudir a los suyos y agradecerles su magn赤fica Europa League y su magn赤fico f迆tbol.
tercera 'semi' sin premio
El Villarreal volvi車 a quedarse a las puertas de una final europea. ?sta ante el Oporto era la tercera vez que disputaba una semifinal, pero no la super車 como ante Valencia en la UEFA (2004) y Arsenal en Champions (2006).