Un Atl¨¦tico supercampe¨®n

El Atl¨¦tico coron¨® ayer el techo de Europa con una autoridad que le negaban los pron¨®sticos de la v¨ªspera. Gracias a los goles de Reyes y de Ag¨¹ero y a un juego inteligente, ordenado y sin equivocaciones fue minimizando al Inter hasta hacerlo desaparecer para proclamarse supercampe¨®n continental y acabar con el sue?o 'neroazzurro' de replicar los seis t¨ªtulos del Bar?a en una temporada. Quique entrar¨¢ en la historia con todo merecimiento y con el m¨¦rito a?adido de que consigui¨® m¨¢s con menos.

El Inter tir¨® de curr¨ªculum en el arranque. El ba?o de gloria de sus futbolistas en la gala de la Champions del d¨ªa anterior obligaba al arrim¨®n inicial que qued¨® resumido en un inquietante disparo de Diego Milito, desviado por la zaga atl¨¦tica. Pero en el minuto 7, Ag¨¹ero estuvo a punto de fusilar a quemarropa a Julio C¨¦sar, tras un centro con intenci¨®n de Simao. Lo evit¨® Chivu, quiz¨¢ desde el otro lado de la ley, aunque el suizo Busacca obvi¨® el empuj¨®n, el penalti y la roja al rumano. Y es que el Atl¨¦tico devolvi¨® golpe por golpe y no mostr¨® un tama?o inferior al del Inter.

Y eso que Quique abrig¨® al equipo m¨¢s de lo previsto. Dej¨® a fuera a Filipe Luis para poner en la banda izquierda a Dom¨ªnguez y tampoco se atrevi¨® con Fran M¨¦rida en lugar de Simao. La longitud de Maicon por la derecha intimid¨® lo suyo. God¨ªn fue el ¨²nico fichaje que encontr¨® sitio en el once inicial y su rendimiento result¨® sencillamente impresionante.

Tambi¨¦n fue conservador Ben¨ªtez, que se siente administrador de una gran herencia. Y as¨ª lo reconoci¨® con su once, el mismo que le gan¨® la Champions al Bayern con el ¨²nico cambio de Stankovic por Pandev, y con el mismo dibujo. Pero el Inter no tuvo el golpe de autoridad que se le supon¨ªa, probablemente porque el Atl¨¦tico le cerr¨® el camino hacia Sneijder, el almirante de este equipo, cuyo rendimiento es directamente proporcional a lo importante que se siente en el grupo. Aqu¨ª pinta mucho, pero sus compa?eros no le encontraron ayer. Ni a ¨¦l, ni a Milito, ni a Etoo, que en la izquierda trabaja m¨¢s, pero mete menos miedo.

Sin ocasiones

El Atl¨¦tico tampoco jug¨® a campo abierto. Se ancl¨® al partido con Assun?ao y Ra¨²l Garc¨ªa, no se equivoc¨® en defensa y coloc¨® a Ag¨¹ero en dos ocasiones con ventaja sobre los centrales del Inter, pero el argentino no dio con la puerta ni con la izquierda ni con la derecha. Forl¨¢n tambi¨¦n se movi¨® mucho sin ofrecer dividendos, aunque siempre dio la impresi¨®n de estar por encima de Samuel y Lucio en chispa y punta de velocidad. Al descanso no qued¨® registrado ning¨²n disparo entre los tres palos, huella inequ¨ªvoca del exceso de precauci¨®n de unos y otros. Al Atl¨¦tico le pareci¨® bien e incluso corto el combate nulo.

El Inter no cambi¨® de registro tras el descanso y el Atl¨¦tico ya se sinti¨® definitivamente lejos del matadero en el que le hab¨ªa situado la opini¨®n p¨²blica. Y se fue a por el partido, siguiendo la estela m¨¢gica de la zurda de Reyes. Avis¨® el utrerano desde fuera del ¨¢rea y sac¨® una soberbia mano Julio C¨¦sar. Y repiti¨® dos minutos despu¨¦s con m¨¢s ¨¦xito. Empez¨® su obra en la derecha y, tras superar un enredo en el que particip¨® Ag¨¹ero, y la finaliz¨® en la izquierda para marcar en el primer palo, hecho que siempre deja en mal lugar al portero.

Ben¨ªtez volvi¨® al Mourinho puro y dio entrada a Pandev, un futbolista con m¨¢s vigor y llegada que Stankovic. No estuvo ah¨ª la soluci¨®n. El Inter busc¨® un atrevimiento equivocado y s¨®lo se encontr¨® con las contras del Atl¨¦tico, cada minuto m¨¢s peligrosas que el anterior. Despu¨¦s se march¨® Sneijder, enarbolando la bandera blanca, y entonces aprovech¨® el Kun para rematar al moribundo y dejar su firma en un partido para la historia. Tambi¨¦n De Gea, en el ¨²ltimo minuto, le par¨® un penalti a Diego Milito y se gan¨® su placa en este hito rojiblanco, que supo a mucho por la categor¨ªa del trofeo y por lo inesperado, ese terreno en el que nadie se manej¨® a trav¨¦s de los tiempos mejor que el Atl¨¦tico.