Liga de Campeones | Octavos | Vuelta | Manchester United 4 - Mil¨¢n 0
Rooney acribilla al Mil¨¢n y mete al Manchester en cuartos
El equipo de Ferguson arroll¨® y gole¨® al equipo italiano en Old Trafford con el delantero brit¨¢nico como jugador estrella. Dos goles en la ida y dos goles en la vuelta hacen sumar al atacante de los 'diablos rojos' treinta dianas en lo que ha transcurrido de temporada. Park anot¨® el tercer tanto y Fletcher el cuarto. Beckham fue ovacionado en su vuelta 'a casa' al entrar al campo a falta de media hora para la conclusi¨®n.
Repaso es la palabra que describe lo visto sobre el c¨¦sped de Old Trafford en el partido de vuelta de los octavos de la Liga de Campeones entre el Manchester y el Mil¨¢n. El desastroso planteamiento t¨¢ctico de Leonardo durante los noventa minutos anul¨® cualquier posibilidad de remontada de su equipo. Antes del cuarto de hora, Rooney ya hab¨ªa marcado el primer gol del partido (tercero suyo en la eliminatoria). Tras el descanso, s¨®lo transcurri¨® un minuto y de nuevo Rooney bati¨® a Abbiati (su cuarto gol en la la ronda de octavos) tras una buena acci¨®n individual y una buena asistencia de Nani desde la banda izquierda. Con el segundo jarro de agua fr¨ªa, el conjunto italiano baj¨® los brazos definitivamente, lo que posibilit¨® que Park y Fletcher certificasen la goleada cuando a¨²n faltaba media hora para el pitido final. De ah¨ª a la conclusi¨®n, lo ¨²nico destacable fue la entrada al c¨¦sped de Beckham en el minuto 64 y la ovaci¨®n recibida un minuto despu¨¦s por Rooney al ser retirado del terreno por Ferguson.
El Mil¨¢n llegaba a Old Trafford con la gran desventaja del 2-3 de la ida celebrada en Italia. Para el equipo de Leonardo la empresa era complicada, y lo fue m¨¢s a¨²n con la noticia de la milagrosa recuperaci¨®n de Rooney, que les hizo dos goles en San Siro, y la baja de ¨²ltima hora del brasile?o Pato por problemas musculares en uno de sus muslos. Se esperaba un Mil¨¢n volcado al ataque y que dejase espacios atr¨¢s para los r¨¢pidos atacantes brit¨¢nicos. En su vuelta 'a casa' siete a?os despu¨¦s, Beckham fue suplente como ya es habitual con Leonardo en el banquillo (s¨®lo cuatro veces ha sido titular el ingl¨¦s con el brasile?o como t¨¦cnico en los once partidos que han coincidido).
El partido comenz¨® con el Manchester como ¨²nico dominador del encuentro en todos sus aspectos, en el control del esf¨¦rico y en el aspecto f¨ªsico. Los de Ferguson llevaron la iniciativa desde el comienzo y en los primeros minutos efectuaron varios disparos lejanos que sirvieron de aviso a Abbiati. A¨²n as¨ª, la primera ocasi¨®n clara del partido surgi¨® de un fallo en la medular del conjunto ingl¨¦s y que acab¨® con un remate de cabeza de Ronaldinho que se perdi¨® por poco junto al palo izquierdo de Van der Sar. El aviso sirvi¨® a los locales para ser conscientes del peligro del rival de turno. Fue entonces cuando apareci¨® Rooney para marcar de cabeza su tercer gol en la Liga de Campeones (los tres al Mil¨¢n) a pase de Gary Neville. Los 'diablos rojos' daban un paso de gigante en la eliminatoria con el vig¨¦simonoveno tanto de su delantero centro en la temporada.
El Mil¨¢n acus¨® en exceso el mazazo recibido y entreg¨® el dominio de la posesi¨®n y del partido al United, limit¨¢ndose a disparos lejanos desde la frontal del ¨¢rea que Van der Sar solucionaba con solvencia y sin problema alguno. Pirlo fue uno de los que lo intentaron sin ¨¦xito. El conjunto brit¨¢nico gestionaba el resultado de la ida y de la vuelta de forma inmejorable, presionando a su rival y sin permitir en ning¨²n momento que probaran suerte de cara a porter¨ªa. Mal pintaban las cosas para el equipo de Leonardo, que necesitaba marcar tres goles en el 'teatro de los sue?os' para lograr el pase a la siguiente eliminatoria de la Champions.
El juego del equipo de Leonardo no se antojaba el id¨®neo para una remontada que se considerar¨ªa de dimensiones ¨¦picas. Evra, Fletcher y Scholes ten¨ªan gran parte de culpa de ello debido a su labor a la hora de taponar las salidas del conjunto milanista, que se ve¨ªa obligado a realizar un juego horizontal priv¨¢ndose de la verticalidad necesaria para marcar un primer gol que atisbara alguna posibilidad de remontada. Con el Manchester muy bien asentado en el campo y con un Mil¨¢n muy ap¨¢tico, debido a la dificultad del abultado resultado en contra, se lleg¨® al descanso con una ventaja justa por los m¨¦ritos de cada uno de los equipos. Impresionante es la palabra que describe a la perfecci¨®n la reforma que ten¨ªa que hacer Leonardo durante el intermedio para que su equipo tuviese alguna posibilidad, aunque lejana, de dejar en la cuneta al Manchester.
Si la historia del partido se preve¨ªa corta, dicha historia acab¨® en el primer minuto de la segunda mitad. Una galopada antol¨®gica de Nani por el costado izquierdo sirvi¨® a Rooney para recibir la asistencia del portugu¨¦s y batir con sutileza a Abbiati con su pierna derecha tras ganarle la espalda a Flamini. Trig¨¦sima diana del delantero ingl¨¦s en la temporada y cuarto gol de Rooney en la eliminatoria de los siete anotados por su equipo. Con el 2-0 en el marcador y fallando en las contadas llegadas al ¨¢rea de Van der Sar el partido y la eliminatoria estaba vista para sentencia desde bien antes de que Massimo Busacca pitase el final del choque. Entre tanto, Park y Fletcher se encargaron de certificar la goleada brit¨¢nica sobre el Mil¨¢n. El Manchester se clasific¨® con m¨¦ritos sobrados para los cuartos de final de la Liga de Campeones y su rival evidenci¨® el fin de un ciclo y la necesidad y la urgencia de una reforma general en todos los aspectos.