Castro, la madera y Juan Pablo tumban al Getafe

La suerte hay que buscarla y el Sporting fue el que la encontr¨® en un partido vibrante, competido y disputado con un ritmo muy alto. Diego Castro, al aprovechar un disparo de Maldonado, cambi¨® la din¨¢mica de un partido en el que el Getafe dej¨® muestras de tener un potencial superior, los de Preciado lo aplicaron mejor sobre el campo.

El partido empez¨® con un correoso control de los dos equipos para no dar respiro a los delanteros rivales. Los dos entrenadores aplicaron dibujos t¨¢cticos similares. En el Getafe, M¨ªchel opt¨® por Adri¨¢n en la media punta, para alternar las bandas. En el Sporting, Preciado utiliz¨® a Carmelo como complemento de un fogoso Barral, y carg¨® el juego m¨¢s por la banda izquierda.

El conjunto visitante daba m¨¢s sensaci¨®n de peligro, pero sin llegadas claras a la porter¨ªa de Juan Pablo, que tuvo los principales sustos en dos faltas de Pedro Le¨®n. En el bando local hubo m¨¢s aproximaciones, pero muy impetuosas, con demasiadas prisas. Pudo marcar Barral, pero lo hizo Diego Castro, al recoger un pase de Maldonado, en un disparo defectuoso, que sorprendi¨® a la zaga madrile?a.

Madera.

En el segundo tiempo se acort¨® el campo, porque el Getafe domin¨® y M¨ªchel arriesg¨® al acabar con cinco delanteros. Tuvo m¨¢s llegada y remate, pero la madera, en una ocasi¨®n a remate de Mario, y un espl¨¦ndido Juan Pablo, acabaron con las ilusiones madrile?as, en un encuentro en el que Rivera derroch¨® un poder¨ªo agotador, frente al terreno Boateng, a quien le falt¨® apoyo de Casquero. El Getafe acus¨® la falta de chispa, tras el esfuerzo copero del jueves, mientras que el Sporting se adapt¨® al gui¨®n del partido, con un gol de ventaja, aunque nervioso cuando el rival apret¨®, que fue durante la mayor parte del segundo tiempo. Sobre todo, en la fase final, a la que lleg¨® con Manu, Kepa y Soldado como arietes y colgando balones a la zona en la que Bot¨ªa e Iv¨¢n se multiplicaban para rechazar los centros. El triunfo qued¨® en El Molin¨®n porque Castro rentabiliz¨® la suerte. El Getafe dej¨® buena sensaci¨®n e hizo m¨¦ritos para sumar, pero no supo concretar sus ocasiones.