Liga de Campeones | Atl¨¦tico 0 - Oporto 3
El Chelsea le hace los deberes al Atl¨¦tico
La goleada recibida por el conjunto colchonero en el Vicente Calder¨®n ante el Oporto hace que los de Quique acaben el torneo sin conocer la victoria y con tan s¨®lo tres puntos. Los rojiblancos acceden a la Europa League como tercer clasificado del grupo por delante del APOEL, que empat¨® en Stamford Bridge. Bruno Alves abri¨® el marcador a los dos minutos del comienzo, Falcao aument¨® la diferencia al cuarto de hora y Hulk sentenci¨® en la recta final.
El Atletico de Madrid cerr¨® su participaci¨®n en la Liga de Campeones de la peor manera posible. Los de Quique sumaron su tercera derrota de la fase de grupos. En esta ocasi¨®n fue ante el Oporto y por cero goles a tres. En el minuto dos de partido fue Bruno Alves el que abri¨® el marcador con un remate de cabeza tras un saque de esquina anticip¨¢ndose a la pasiva defensa rojiblanca. El segundo gol portugu¨¦s, obra de Falcao al borde del cuarto de hora, signific¨® un mazazo insuperable para los colchoneros. Durante la primera mitad el Atl¨¦tico lo intent¨® sin suerte y fue objeto de dos posibles penaltis no se?alados por Lannoy. La intensidad del primer acto desapareci¨® tras el descanso, momento en el que Ag¨¹ero tuvo que abandonar el terreno de juego lesionado. Los del Manzanares se mostraron pasivos y contemplativos sin dar muestra alguna de poder remontar el partido. Un golazo de Hulk en la recta final del choque puso la sentencia. S¨®lo el empate logrado por el Chelsea en Stamford Bridge ante el APOEL permite al Atl¨¦tico acceder a la Europa League y seguir en competiciones europeas
El Atl¨¦tico de Madrid recibi¨® al Oporto con la obligaci¨®n de garantizar su participaci¨®n en la Europa League. La empresa no era nada complicada, bastaba con hacer lo mismo que el APOEL en Stamford Bridge ante el Chelsea. Para evitar sorpresas, los de Quique saltaron al c¨¦sped con todo la artiller¨ªa disponible decididos a lograr la victoria y no depender del otro encuentro del grupo. En el conjunto portugu¨¦s, ya clasificado para octavos de la Champions, ocurr¨ªa lo mismo. Ferreira no reserv¨® a ninguno de sus jugadores con el objetivo de pon¨¦rselo complicado al Atleti y "mantener el prestigio del club y del f¨²tbol portugu¨¦s". Los locales, en su mejor momento de la temporada, se jugaban adem¨¢s seguir aumentando la moral que le hab¨ªa proporcionado las dos victorias consecutivas logradas. Los rojiblancos volvieron al sistema del doble pivote y formaron de inicio con Asenjo, Valera, Perea, Juanito, Dom¨ªnguez, Maxi, Assun?ao, Cl¨¦ber, Simao, Ag¨¹ero y Forl¨¢n.
Dos minutos tard¨® el Atl¨¦tico en complicarse la vida. Un saque de esquina de Meireles fue rematado dentro del ¨¢rea con una facilidad sorprendente por Bruno Alves gan¨¢ndole la iniciativa a todos los defensas rojiblancos. Pero pudo ser a¨²n peor si Asenjo no hubiese acertado a despejar el mano a mano que tuvo con Meireles en la siguiente jugada de ataque del conjunto portugu¨¦s. La presi¨®n del Oporto no dejaba maniobrar al conjunto madrile?o y no le permit¨ªa crear f¨²tbol ni ocasiones. Para colmo, desde Londres llegaba la peor noticia posible, el APOEL se adelantaba en Stamford Bridge. Al borde del cuarto de hora de partido, el Atl¨¦tico estaba fuera de la Europa League. Fue justo en ese momento cuando los de Quique gozaron de sus dos primeras ocasiones claras de gol. Forl¨¢n y Cl¨¦ber no tuvieron suerte en sus disparos.
Cuando parec¨ªa que el equipo colchonero se ven¨ªa arriba y comenzaba a hacerse con el dominio del partido, lleg¨® el segundo mazazo del Oporto, m¨¢s inesperado a¨²n que el primero. Falcao aprovechaba un rechace de Asenjo a disparo de Fucile para subir el segundo gol al marcador. En apenas veinte minutos el conjunto madrile?o hab¨ªa convertido lo f¨¢cil en muy complicado. A falta de soluciones por parte del conjunto madrile?o, fue Essien el que alivi¨® al Vicente Calder¨®n logrando el empate del Chelsea ante el APOEL. Con el gol del ghan¨¦s, los rojiblancos estaban de nuevo dentro de la Europa League. A¨²n as¨ª, los locales prefer¨ªan arreglar el roto ellos mismos y no mirar a Londres. As¨ª, el conjunto madrile?o rob¨® la posesi¨®n a su rival y comenz¨® a crear ocasiones de gol. La mejor de ellas, una chilena de Ag¨¹ero que estuvo muy cerca de sorprender a Helton. Los riesgos asumidos por los de Quique permit¨ªan peligrosas contras del Oporto que pudieron significar la sentencia del partido.
El segundo gol del Chelsea ante el APOEL, obra de Drogba, fue la mejor noticia de la noche en el Calder¨®n cuando se llegaba a la media hora de juego. La parroquia rojiblanca, que ve¨ªa incapaz a su equipo, respiraba tranquila al ver que el conjunto ingl¨¦s sellaba el pasaporte de los suyos para la Europa League. La mejor¨ªa mostrada por los de Quique, que le permiti¨® visitar el ¨¢rea de Helton, se qued¨® en un espejismo en el tramo final de la primera mitad. Los colchoneros llegaban con facilidad a la zona de tres cuartos, lugar donde se mostraban atascados y faltos de ideas para sorprender a la rocosa defensa portuguesa. Un par de jugadas pol¨¦micas en el ¨¢rea del Oporto, posibles penaltis, provocaron que al descanso se llegase con una sonora pitada para el colegiado Lannoy. El Atl¨¦tico se retir¨® a los vestuarios con un marcador en contra excesivo a tenor de los m¨¦ritos contra¨ªdos por ambos equipos durante el primer acto.
Con una de las peores noticias para el Atl¨¦tico, la lesi¨®n de Ag¨¹ero, se reanud¨® el partido. El jugador argentino, con problemas musculares, fue sustitu¨ªdo por Jurado. Adem¨¢s, Valera dej¨® su sitio a Antonio L¨®pez. En lo puramente futbol¨ªstico, a los colchoneros no le quedaba otra opci¨®n que no fuese mostrarse implacables en defensa y activos y acertados en ataque. Era la ¨²nica soluci¨®n para tratar de evitar la derrota. Los minutos pasaban y el Atl¨¦tico no daba sensaci¨®n alguna de peligro y de poder poner en apuros a su rival. A los rojiblancos les costaba tener oportunidades de gol y, cuando la ten¨ªan, no la aprovechaba. Juanito pudo acortar distancias con un remate de cabeza en el ¨¢rea peque?a que mand¨® desviado cuando lo ten¨ªa todo para marcar. La respuesta del Oporto no se hizo esperar. Acto seguido, Asenjo se tuvo que emplear a fondo para despejar el disparo a bocajarro de Falcao que pudo matar el partido.
El Oporto logr¨® llevar el partido donde quer¨ªa. Los de Ferreira lograron bajar de revoluciones el choque y dormirlo con el objetivo de dejar pasar los minutos con los menos sobresaltos posibles. Entre tanta tranquilidad volvi¨® a aparecer Forl¨¢n para obligar a Helton a despejar a c¨®rner un peligroso disparo. En el banquillo, Quique decidi¨® disparar su ¨²ltimo cartucho y retir¨® a Maxi para dar entrada a Reyes. A medida que pasaron los minutos y se aproximaba el final, el Atl¨¦tico comenz¨® a mostrarse pasivo y muy contemplativo. Los de Quique hab¨ªan bajado los brazos definitivamente. La puntilla se encarg¨® de ponerla Hulk a quince minutos de la conclusi¨®n tras 'bailar' a Juanito y a Assun?ao para clavar el tercero en la escuadra de un at¨®nito Asenjo. Los ¨²ltimos minutos vividos en el Vicente Calder¨®n fueron dram¨¢ticos, el empate del APOEL en Stamford Bridge a falta de cinco minutos puso el coraz¨®n de los atl¨¦ticos al borde del infarto.