La permanencia es el combate de Alfaro

Hay una par¨¢bola sobre el k¨¢rate que refleja a la perfecci¨®n el sentido de este deporte. Cuentan que hubo una vez un practicante de esta disciplina que pregunt¨® a su maestro por las diferencias entre el ser insignificante y el hombre que elige el buen camino. Y el sensei, cauto, replic¨®: "Cuanto mayor sea la experiencia, habilidades y potencia del buen hombre, mayores ser¨¢n tambi¨¦n su prudencia y humildad". No hacen falta demasiadas pistas para concluir que es lo que ocurre en el caso de Alejandro Alfaro, karateca del f¨²tbol: prudente y humilde como dice el sensei, pero tambi¨¦n imbuido de la tranquilidad y espiritualidad que preconiza esta pr¨¢ctica.

"Todo va a ir bien, nos vamos a salvar, la situaci¨®n no es preocupante, ganaremos el pr¨®ximo partido, no hay motivos para la alarma" Todos sus mensajes invitan a la calma y no es una tendencia nueva, siquiera un matiz reciente, tampoco una consecuencia directa del ascenso a Primera Divisi¨®n. Es, sin ir m¨¢s lejos, el fiel reflejo de su confianza en sus compa?eros y su seguridad expl¨ªcita sobre el trabajo bien hecho. Siempre fue optimista y a la vez inalterable en el ¨¢nimo este jugador diferente, r¨¢pido, creativo, vertical. Bien lo saben los rivales, v¨ªctimas de tres goles en una decena de partidos del andaluz en la elite.

Como aquel karateca que sucumbe al mejor hacer de su adversario, ya saben los que visitan el Heliodoro que es el onubense uno de los m¨¢s preparados y temibles futbolistas del Tenerife. Y le avala su trayectoria, intachable; y su tarjeta de presentaci¨®n, inmaculada: partidos sobresalientes a granel, un ascenso, la renovaci¨®n de una cesi¨®n pedida a gritos, un recibimiento multitudinario, un regreso feliz.

"El respeto no me lo he ganado s¨®lo yo, pienso que es un sentimiento que tienen todos los que nos visitan porque saben c¨®mo y a qu¨¦ jugamos, nos gusta hacer las cosas bien", apunta el mediapunta, quien cree que la propuesta sobre la hierba del representativo pone de acuerdo a sus compa?eros y rivales. "Les atrae a todos, m¨¢s que nada porque jugamos con estilo, sin voleones", precisa. Alfaro pronuncia sus palabras en el gimnasio Vistabella, uno de los centros neur¨¢lgicos de las artes marciales en Tenerife. Sitio id¨®neo para hacerle karateca por un d¨ªa, se convierte tambi¨¦n en escenario de confesiones sobre f¨²tbol y deporte en una entrevista diferente. Y es que ha accedido Ale a ce?irse la indumentaria propia de cualquier practicante de esta disciplina milenaria (el karategi) y lo hace, como no pod¨ªa ser de otra forma, con mono blanco y cintur¨®n azul. Los colores del Tenerife.

"Aqu¨ª me siento como en mi casa; siempre mantuve que, si no me quedaba en el Sevilla, quer¨ªa hacerlo aqu¨ª". Del futuro no habla. No es el momento. Hay otras prioridades. "Es pronto para aventurar qu¨¦ pasar¨¢ en junio, pero lo primordial no es qu¨¦ acontecer¨¢ conmigo, sino lo que suceder¨¢ al Tenerife", explica. Y abunda en que lo que debe de producirse es la salvaci¨®n. Eso s¨ª, antes deja una frase para la posteridad. "No me importar¨ªa quedarme, porque aqu¨ª estoy encantado", subraya.

"Sobre el equipo y su porvenir hay que estar tranquilos; tenemos la misma plantilla del a?o pasado y no hemos entrado en puestos de descenso en todas las jornadas que llevamos". Se?al para el sosiego, cree el 21 del Tenerife que la trayectoria blanquiazul hasta la fecha deber¨ªa de generar elogios, y no cr¨ªticas. "Adem¨¢s, hay que tener en cuenta que hemos contado con un h¨¢ndicap imprevisto: las lesiones, y todas de hombres important¨ªsimos: Kome, Ricardo, Juanlu, Marc Bertr¨¢n...", comenta el futbolista , quien cree que "ha costado arrancar, pero la posici¨®n del equipo no es mala". "Estamos despegando y cada vez son menos los problemas para hacer gol", recalca Alfaro.

Encantado con la experiencia de verse karateca, rodeado de especialistas, encuentra el andaluz sus analog¨ªas entre el f¨²tbol y esta disciplina oriental. "Nunca hab¨ªa estado en ese entorno, pero me gust¨® estar en el gimnasio y ver el compa?erismo que hay entre todos", aduce el habilidoso blanquiazul, quien ve que, en un deporte como en el otro, "hay tiempo para todo". "Lo mismo pasar¨¢ en un asalto que en un partido: hay instantes para ser fino y cuidadoso con el bal¨®n, como hay otros para ser contundente y agresivo. Eso, lo tenemos claro", concluye. Y, ataviado con su karategi, se introduce en la din¨¢mica del grupo y disfruta como uno m¨¢s de las instrucciones magistrales de Javier Or¨¢n, nada menos que campe¨®n mundial de katas hace unos cuantos a?os.

Rec¨ªproca la sensaci¨®n de agradecimiento -de Alejandro Alfaro para los que han sido sus anfitriones en el Vistabella, y de ¨¦stos para el jugador onubense- acaba el encuentro con un deseo. "El de que gane el Tenerife este domingo un combate decisivo".