Preciado: "He entrenado a pocos como Marqu¨¦s"

Pese a que Fernando Marqu¨¦s vive el momento m¨¢s dulce desde que lleg¨® al Espanyol y desde que irrumpi¨® en el mundo profesional, su carrera no arranc¨® ayer. Desde que debutara en Primera en 2002, con tan s¨®lo 17 a?os, ha vivido numerosas experiencias, ¨¦xitos, fracasos y ha coincidido con varios entrenadores y jugadores de la actual Liga. Uno de ellos es Manolo Preciado, quien lo dirigi¨® en el Racing de Santander en la campa?a 2005-06. El actual entrenador del Sporting se qued¨® prendado de aquel joven y rebelde jugador madrile?o, que lleg¨® a Santander dispuesto a comerse el mundo pero al que "le faltaba madurez". "He entrenado a pocos jugadores como Marqu¨¦s. Ten¨ªa unas condiciones excelentes para este deporte, tanto a nivel t¨¦cnico como f¨ªsico. Ten¨ªa le pelota pegada a los pies, la conduc¨ªa con una velocidad espectacular. Era un chaval magn¨ªfico, pero le faltaba..., eso, madurar. Espero que lo haya hecho y le vaya todo muy bien".

Marqu¨¦s y Preciado comenzaron su relaci¨®n con un cari?o mutuo ("Es una gran persona. Est¨¢ demostrando que es un trabajador y las cosas le est¨¢n saliendo muy bien", coment¨® ayer el jugador), pero alg¨²n que otro acto de indisciplina del madrile?o le conden¨® al banquillo y, poco a poco, a no contar para los planes del entrenador. Seg¨²n el diario AS de septiembre de 2005, Marqu¨¦s se neg¨® a pasar una prueba de peso e insult¨® a Preciado, lo que provoc¨® que el club lo sancionara 15 d¨ªas sin poder entrenarse y sin sueldo. El jugador no cuaj¨® y se fue cedido al Atl¨¦tico de Madrid. Al acabar la temporada, rescindi¨® su contrato con el Racing.

Marqu¨¦s se reencontrar¨¢ ma?ana con Preciado, cuya relaci¨®n se ha movido entre el amor y el odio, aunque el t¨¦cnico reconoce que "ahora le guardo un gran cari?o".

Han pasado m¨¢s de cuatro a?os de aquel cap¨ªtulo y ambos han cambiado. Preciado es ahora un t¨¦cnico reconocido, que lidera un atractivo proyecto en el Sporting. Marqu¨¦s ha madurado y est¨¢ en un gran momento, como ¨¦l se encarg¨® de se?alar a este diario: "Estoy feliz, pero s¨¦ que no me puedo dormir. Debo seguir trabajando igual porque cada domingo hay una rev¨¢lida".

Marqu¨¦s, aquel chico rebelde que conoci¨® Preciado, ser¨¢ uno de los peligros del Espanyol en El Molin¨®n. Cualidades siempre ha tenido pero ahora, adem¨¢s, ha madurado: lo que le faltaba, seg¨²n Preciado.