Iv¨¢n, chicharrero

Iv¨¢n Alonso no es chicharrero, es uruguayo. Pero entiende de chicharros. Si hubiese nacido en Santa Cruz o alrededores el Tenerife y su gente lo habr¨ªan celebrado. Es un buen delantero, de esos que mejoran con los a?os, y que le viene de perlas a su equipo. Vi a Uruguay frente a Argentina y no descubr¨ª uno como ¨¦l en el enganche, tras los puntas. Ellos sabr¨¢n... Ahora juega en el Espanyol y espera que hasta el final de su carrera. Que vi¨¦ndole ayer se antoja lejano, por cierto.

Sus dos goles acabaron d¨¢ndole el triunfo a su equipo ante un buen Tenerife, una escuadra con maneras, buen manejo, un equipo con entrenador: Oltra. Vendi¨® siempre cara su piel y acab¨® mirando a Kameni, lo que habla bien de sus nobles afanes. Estuvo metido en el partido hasta el ¨²ltimo instante y le acabaron noqueando Alonso y la aparici¨®n de Fernando Marqu¨¦s, ojito con este muchacho que puede ser la gran revelaci¨®n de la temporada.

Marqu¨¦s es r¨¢pido, descarado, juega pegado a la cal si es menester, abre el campo y las ideas de sus compa?eros. Es un futbolista distinto que lleg¨® tras una traves¨ªa en Grecia, en busca de reengancharse a la Liga y va a conseguirlo. Tras una pretemporada personal de ¨²ltima hora, Pochettino le dio media hora y la aprovech¨®. El 2-1 lo fabric¨® ¨¦l en proyecci¨®n de extremo-extremo: pelota larga, lateral desbordado y centro atr¨¢s para que Iv¨¢n resolviera con un zapatazo monumental que el buen Aragoneses vio pasar.

Estall¨® entonces el nuevo estadio espa?olista en el primer d¨ªa feliz en mucho tiempo. Ya conocen ustedes el l¨ªo de Tamudo (pinta a que no volver¨¢ a vestirse de blanquiazul) y el equipo llevaba dos jornadas sin ganar no marcar. El d¨ªa 1 sin Ra¨²l volvi¨® a ganar el Espanyol. Por la m¨ªnima. Sufriendo como es menester en esta Liga apretad¨ªsima (Xerez, 2 - Villarreal, 1) donde el presunto tonto hace relojes suizos. Pero gan¨® y espant¨® fantasmas. Lo de ayer acaba 1-1 y alg¨²n titular hab¨ªa recordado que partidos como esos, igualados, inciertos, Tamudo los ganaba.

Y lo acab¨® ganando el Espanyol porque tuvo m¨¢s p¨®lvora, pues en juego la cosa anduvo m¨¢s pareja. Si bien es cierto que los locales acabaron la primera parte bombardeando la meta canaria, tambi¨¦n lo es que antes, y a lo largo del segundo tiempo, Kome y compa?¨ªa se estiraron siempre con intenci¨®n.

En el alero. Alfaro, buen partido el suyo, empat¨® cuatro minutos despu¨¦s del 1-0 y la pelota estuvo mucho rato en el tejado. Hasta que apareci¨® Marqu¨¦s, se junto con Alonso y se decidi¨® el partido. El Espanyol supera los 10 puntos (tiene 11) mientras el Tenerife sue?a con convertir en puntos sus buenas intenciones. Lo har¨¢.