Huelva llora, Santander r¨ªe

Huelva no tuvo su milagro. Esta vez, la Virgen del Roc¨ªodescans¨® en su ermita y no pudo echar una manita al Recre. Esta vez, el conjunto albiazul no tuvo capacidad para salvar una vida deportiva que corr¨ªa ser¨ªa peligro y consum¨® su descenso a Segunda sin anestesia. Casi tres a?os despu¨¦s de que un sue?o iniciado en Soria alegrara la vida de muchos onubenses. Ahora espera un infi erno, donde no caer¨¢ el Racing, que poco a poco y al ritmo de Zigic seguir¨¢ otro a?o m¨¢s entre los grandes del f¨²tbol nacional. Ese s¨ª que es un buen fi chaje en el mercado invernal... Y si no, miren el rendimiento que han dado en el Recre tanto Maidana como Nef. Tampoco la suerte ha acompa?ado al equipo de Lucas Alcaraz. En el momento clave de la temporada, el t¨¦cnico granadino perdi¨® a Adri¨¢n Colunga y Camu?as, sus dos mejores jugadores, y ah¨ª est¨¢n los n¨²meros, y los goles, para demostrarlo. Muchos le echar¨¢n la culpa de este descenso a los errores arbitrales, pero el an¨¢lisis de este fracaso debe llegar m¨¢s all¨¢ La grada, que es la que m¨¢s entiende de f¨²tbol, quiso se?alar a sus culpables. El tiempo dar¨¢ y quitar¨¢ razones.

Donde s¨ª se han hecho bien las cosas ha sido en Santander. Por eso no se entiende que Mu?iz sea tan criticado por tierras c¨¢ntabras. Quiz¨¢s el peso de sustituir a Marcelino sea muy alargado, y de eso entienden mucho en Huelva. El asturiano dej¨® tan buena impronta y sus equipos jugaron tan bien que todo lo que no se parezca suena casi a un crimen. Como el descenso onubense. Porque regresar al infi erno tiene que doler y mucho. Y no s¨®lo en lo econ¨®mico. Viendo la poca intensidad del Recre en el inicio de partido parec¨ªa como si el 0-0 le valiera. Estavez tiene la leve excusa de que la mayor¨ªa apenas ha entrado con asiduidad en el equipo y que al Racing tampoco le iba la vida en el empe?o, aunque no tuviera la salvaci¨®n de forma matem¨¢tica. Pero lo cierto es que el equipo albiazul estaba en Segunda desde el mismo minuto de silencio y poca gente lo notaba. S¨®lo los de siempre, los que de verdad le duelen el escudo del Recre. Eso s¨ª, nadie puede reprochar el apoyo de la grada. Se hart¨® cuando el milagro no pudo cumplirse.

Peligro.

Bien es cier to que el conjunto onubense lo intent¨® como pudo para batir a To?o. Marco Ruben, muy movidizo, se invent¨® un par de disparos desde la frontal e incluso quiso enga?ar a un desesperante Delgado Ferreiro con un penalti que casi ni la propia grada reclam¨®. Maidana, otro que desesper¨® a m¨¢s de uno, no vio a Javi Guerrero solo en la boca de gol cuando lo m¨¢s f¨¢cil era meterla. Pero si por algo este Recre ha pasado muchas penas esta temporada es, en otras cosas, por la falta de claridad en ataque.

Mientras, el Racing segu¨ªa a lo suyo. Los resultados en otros campos pod¨ªan meter cierto nerviosismo, pero este equipo de Mu?iz va a su ritmo. Si Zigic coge alguna el rival tiembla. Si entre Pereira y Munitis se al¨ªan, el rival desconf¨ªa. Entre tanto juego pausado, Jes¨²s V¨¢zquez cabece¨® un c¨®rner que To?o par¨® con muchos reflejos. Muchos le pidieron que tuviera en cuenta su pasado albiazul, pero cumpli¨® con su cometido a la perfecci¨®n.

Quien s¨ª pudo hundir en la miseria muy pronto fue el gigant¨®n serbio. Incomprensiblemente, Zigic fall¨® sin portero, con el buen trabajo de Morris que sac¨® el bal¨®n desde la l¨ªnea de meta. Esa acci¨®n fue la anestesia defi nitiva para los locales. Ni los cambios, ni nada de nada. Y la puntilla la dio el que casi nunca falla en Santander. Zigic, por decimotercera vez desde que lleg¨® al conjunto c¨¢ntabro en enero, bati¨® a placer a Riesgo.

Ese gol termin¨® por hundir al Recre. Los resultados de otros campos eran p¨¦simos, pero sobre el Nuevo Colombino no hubo ni una alegr¨ªa. En el Racing s¨ª sonr¨ªen, porque seguir¨¢n disfrutando. En Huelva hay muchos llantos, porque su equipo del alma regresa a Segunda. Ahora es donde se podr¨¢ comprobar su lealtad al Recre.