LIGA BBVA | MALLORCA 2 - ALMER?A 0
Un gol de chilena de Santana deja los tres puntos en Mallorca
Un gol de chilena del brasile?o Cl¨¦ber Santana en la segunda parte, y otro del uruguayo Gonzalo Castro en la pr¨®rroga, dieron tres puntos de oro y la novena victoria de la temporada, sexta en el Ono Estadi, al Mallorca frente a un Almer¨ªa que pag¨® muy cara su falta de ambici¨®n en la capital balear y que encaj¨® la d¨¦cimo cuarta derrota del curso.
La genialidad de Santana sentenci¨® el partido y, de paso, fue el mejor regalo que pudo recibir su entrenador Gregorio Manzano, que cumpl¨ªa su partido n¨²mero 300 en Primera divisi¨®n. Castro marc¨® cuando en el tiempo de descuento, cuando el Almer¨ªa jugaba con diez por la expulsi¨®n del central argentino Hern¨¢n Dar¨ªo Pellerano.
El conjunto almeriense se propuso aguantar el empate como sea en el Ono Estadi, y lo logr¨®, al menos en la primera parte, en la que todos sus esfuerzos estuvieron encaminados a proteger a su portero -Esteban salv¨® a su equipo en el minuto 26 tras un gran remate del argentino Lionel Scaloni- y blindar la zona ancha. En los primeros 45 minutos, los jugadores de Hugo S¨¢nchez remataron bajo los palos de Germ¨¢n Lux en una sola ocasi¨®n (Ort¨ªz, min. 38), pero, tampoco sufrieron demasiados agobios en su ¨¢rea, ya que el Mallorca, sin la sorpresa que aporta Jos¨¦ Manuel Jurado, que pas¨® desapercibido, no hall¨® espacios.
Todo se redujo a un juego insulso en el centro del campo, muchas entradas a destiempo y falta de criterio en los dos equipos cuando ten¨ªan el bal¨®n controlado. El vasco Aritz Aduriz dio mucho trabajo a la pareja de centrales del equipo almeriense -el peruano Whilmer Acasiete y el argentino Hern¨¢n Dar¨ªo Pellerano-, pero su esfuerzo fue in¨²til y, adem¨¢s, vio una tarjeta amarilla por protestar que le impedir¨¢ jugar el pr¨®ximo partido ante el M¨¢laga. Lo mismo que Jurado e Iv¨¢n Ramis, amonestados en la segunda parte.
Por parte del Almer¨ªa, la velocidad endiablada de Albert Crusat cre¨® algunos problemas en la zaga insular, pero en esta primera parte no encontr¨® la colaboraci¨®n de un solitario Alvaro Negredo. La igualdad sobre el terreno de juego era absoluta, aunque el Mallorca llev¨®, casi siempre, la iniciativa en el juego. Lo mismo ocurri¨® en la reanudaci¨®n, periodo que el equipo balear afront¨® con gran determinaci¨®n.
Antes del gol de chilena del brasile?o Cl¨¦ber Santana (min. 59), el Mallorca ya hab¨ªa avisado en varias ocasiones a un Almer¨ªa -con Corona en el sitio de Bruno desde el minuto 46- que hab¨ªa perdido el orden y la seguridad de la primera parte. Santana, cedido por el Atl¨¦tico de Madrid, quiso rendirle su particular homenaje a Hugo S¨¢nchez, que marc¨® goles hist¨®ricos de chilena en la Liga espa?ola, con una jugada similar que el Ono Estadi recordar¨¢ durante mucho tiempo. El brasile?o se elev¨® en el ¨¢rea peque?a y clav¨® el bal¨®n en el ¨¢ngulo de la porter¨ªa de Esteban.
El colegiado, con decisiones muy pol¨¦micas, sac¨® de sus casillas al p¨²blico del Ono Estadi. Clos G¨®mez mostr¨® nueve tarjetas y se?al¨® varias faltas dudosas cerca del ¨¢rea local que exasperaron a los aficionados. El Mallorca se dedic¨® a conservar su m¨ªnima ventaja en los ¨²ltimos minutos, que le daban tres puntos de oro para alejarse del descenso, ante un Almer¨ªa que pele¨® todas los balones en busca de su oportunidad que, finalmente, no lleg¨®.