Osasuna hiperaltera al Atleti

El Atleti es el Atleti, un equipo ¨²nico, indefinible, que va a lo suyo. Y m¨¢s en primavera. Hoy se esperaba que el equipo de Abel Resino saliera a morder para aprovechar el pinchazo del Villarreal ante el Almer¨ªa y acercarse a puestos Champions. Sin embargo, el Atl¨¦tico sali¨® fr¨ªo y ausente y actu¨® guiado por impulsos descontrolados. Insuficiente para vencer a un ordenado Osasuna que vive de la punter¨ªa de Pandiani y de las genialidades de Masoud y Nekounam.

Ni el excepcional ambiente que se viv¨ªa en el Calder¨®n en el d¨ªa del ni?o; ni el cabezazo de Masoud en los primeros minutos que envi¨® al larguero evit¨® el letargo inicial de los rojiblancos. El Atl¨¦tico es como un adolescente que intenta levantarse a las 7 de la ma?ana para ir al instituto, le cuesta. Necesita que suene cinco veces el despertador, que su hermano encienda la luz, suba la persiana y ponga la m¨²sica. Y no se levanta hasta que su madre le arrastra a gritos desde la cama a la alfombra. Ah¨ª es cuando el chaval por fin abre su primer ojo.

La madre del Atl¨¦tico esta vez se llam¨® Walter Pandiani. El uruguayo aprovech¨® un saque r¨¢pido de falta de Nekounam, que sorprendi¨® a la defensa de Abel Resino, para adelantar a Osasuna en el marcador, mientras la defensa ped¨ªa fuera de juego. Era el minuto siete de partido.

Si el mazazo lleg¨® en el 7, fue en el 15 cuando el Atl¨¦tico se quit¨® las lega?as. Ujfalusi recuper¨® una bola en el centro del campo. Assun?ao y Ra¨²l Garc¨ªa la transportaron de un toque hasta Forl¨¢n, que se encarg¨® del resto. Control¨® con la derecha, se la acomod¨® a la izquierda y desde la frontal bati¨® a Roberto, que se esforz¨® en vano.

Pero como el chico que aprovecha el 'tr¨¢n tr¨¢n' del autob¨²s para echarse su ¨²ltima cabezadita, de nuevo el Atl¨¦tico hizo aguas a bal¨®n parado. Los de Abel dejaron que el saque de esquina de Plasil se paseara por su propia ¨¢rea hasta toparse con el checo Tomas Ujfalusi, que incapaz de despejar, asisti¨® 'de est¨®mago' al medio centro de Osasuna Cristian Vadozc. El sustituto de Pu?al no fall¨® y puso el 1-2, justo antes del descanso.

La hora de la sobremesa y el calorcito primaveral pas¨® factura incluso al presidente del equipo, Enrique Cerezo, retratado en la televisi¨®n con los ojos semicerrados por no decir cerrados. Quiz¨¢s por la desaz¨®n de ver a su equipo perder o quiz¨¢s porque era la hora de la siesta y eso no se perdona.

Seitaridis por Pern¨ªa y un par de chocolatinas en el recreo, que no hicieron el efecto deseado. Como en la primera mitad, Pandiani, solo en el ¨¢rea, arroj¨® un nuevo vaso de agua helada en la cara de los atl¨¦ticos rematando a la red un centro de Plasil por la izquierda. 1-3 y la algarab¨ªa de la grada, sin perder la esperanza pero con los nervios cada vez m¨¢s alterados y exteriorizados en forma de pitos. Si no, que se lo pregunten a Seitaridis (que mand¨® a Perea a la banda izquierda) o al valiente que retrasara la pelota.

Banega y Luis Garc¨ªa salieron por Assun?ao y Sinama. Dos espectadores m¨¢s para deleitarse con el florecido tanto del iran¨ª Masoud, que levant¨® el aplauso de la afici¨®n atl¨¦tica al bailar literalmente a Pablo Ib¨¢?ez con un bello gambeteo culminado en la red rojiblanca. Cuando parte del p¨²blico decid¨ªa pasar lo que quedaba de tarde en El Retiro, el mismo Pablo Ib¨¢?ez se resarc¨ªa y recortaba distancias tras la salida de un saque de esquina (minuto 73).

Obligado por las circunstancias, la apat¨ªa de la primera y parte de la segunda mitad del Atl¨¦tico de Madrid se convirti¨® en un estado de excitaci¨®n incontrolado que embarull¨® el escaso f¨²tbol rojiblanco y que maniat¨® a los jugadores locales, hiperalterados por su propia presi¨®n.

Con esta derrota, las cuentas del Atl¨¦tico se desajustan antes de coger la calculadora. Los rojiblancos confiaban en conseguir los puntos que iban a disputar en casa (antes de este partido, eran 18) para asegurarse un puesto de Liga de Campeones. Mal augurio. Por su parte, Osasuna ha conseguido salir hoy de los puestos de descenso y lo ha hecho dejando una gran imagen en esta calurosa tarde de primavera.