El Barcelona se pone nervioso

Estamos cerrando el mes de febrero y empieza la Liga. Lo que parec¨ªa imposible, lo que s¨®lo unos pocos se atrev¨ªan a reconocer en p¨²blico ya no se ve como una locura de unos cuantos fan¨¢ticos. Quiz¨¢ ellos sab¨ªan algo que a los dem¨¢s se nos escapaba. Ahora lo sabe el Real Madrid, pero sobre todo lo sabe ya el Barcelona, que en dos semanas ha visto reducida en cinco puntos su gigantesca ventaja, hasta quedar situada en siete. Una ventaja m¨¢s que apreciable, pero que ahora se ve obligado a administrar con criterio. El Barcelona se ha puesto nervioso, o al menos esa imagen dio contra el Espanyol, colista que lleg¨® al Camp Nou para tumbar a un equipo que parec¨ªa invencible y que qued¨® puesto en evidencia en el derbi. Lo derrotaron los dos goles de De la Pe?a, el segundo despu¨¦s de una irresponsable asistencia de V¨ªctor Vald¨¦s, que en un despeje lamentable mand¨® el bal¨®n a los pies de ese calvo genial, que marc¨® de vaselina.

El Barcelona ofreci¨® una imagen alejada de su est¨¦tica, de la finura y elegancia con la que se ha manejado. Se le vio espeso, sin encontrar el ritmo que m¨¢s le conven¨ªa, demasiado nervioso e irritable, hasta pareci¨® desquiciado. As¨ª fue el Bar?a, que nunca se sinti¨® a gusto y por primera vez en todo el campeonato pareci¨® superado por las circunstancias, desbordado por los acontecimientos. Este Barcelona pareci¨® el Madrid de hace unas jornadas.

Tan desconcertado estuvo el Barcelona, que a falta de 25 minutos y con 1-2 en el marcador, Guardiola retir¨® a Etoo, el m¨¢ximo goleador de la Liga y actual Bota de Oro en Europa, para dar entrada a Gudjohnsen. Sorprendi¨® la maniobra del t¨¦cnico, que complet¨® la jugada situando a Busquets como delantero. Seguramente, Guardiola tambi¨¦n sabe cosas que los dem¨¢s ignoramos.

El Espanyol plante¨® un duelo alejado del f¨²tbol. Asumi¨® su inferioridad futbol¨ªstica y llev¨® el choque a una lucha en el barro, en el que lo importante era que el bal¨®n no estuviera en juego, cortar el ritmo del Barcelona. Emple¨® todos los medios a su alcance, algunos m¨¢s l¨ªcitos que otros, y desactiv¨® al Bar?a, incapaz de hallar una soluci¨®n al problema que le plante¨® el rival.

Se cerr¨® atr¨¢s, acumul¨® jugadores en las cercan¨ªas de Kameni, tap¨® todas las v¨ªas de acceso hacia su porter¨ªa, hasta el punto de que Alves y Messi apenas aparecieron, y cuando recuper¨® el bal¨®n se lo dio a De la Pe?a. ?ste demostr¨® su magisterio y con sus dos goles dio vida a una Liga que parec¨ªa muerta.

El primero sirvi¨® para dejar en evidencia a todo el Barcelona, cuya defensa qued¨® retratada. Nen¨¦ puso un buen bal¨®n en el ¨¢rea peque?a y por all¨ª apareci¨® De la Pe?a para marcar de cabeza. El jugador m¨¢s bajo acababa con el equipo m¨¢s grande. Despu¨¦s lleg¨® el segundo, tras las desafortunada acci¨®n de Vald¨¦s. Recort¨® distancias Tour¨¦ Yay¨¢, en lo que no fue m¨¢s que un espejismo que no sirvi¨® para sacar al Barcelona del desconcierto en el que viv¨ªa.

A esas alturas eran ya muchos los minutos que llevaba con uno menos. Desde el 38 de la primera parte, cuando Delgado Ferreiro expuls¨® a Keita por una entrada a Mois¨¦s. Pareci¨® exagerada la roja y quien m¨¢s hizo para que la mostrara el ¨¢rbitro fue De la Pe?a, que par¨® el partido y reclam¨® la expulsi¨®n del barcelonista.

No vari¨® su esquema el Barcelona pese a su inferioridad y se mantuvo hasta el descanso con s¨®lo dos medios, Tour¨¦ y Xavi. Les acompa?¨® despu¨¦s Busquets, que finaliz¨® como delantero, en una imagen que resume el desconcierto con el que vivieron los azulgrana el choque.

El Espanyol ha puntuado en sus tres ¨²ltimas visitas al Camp Nou, donde no ganaba desde hace casi 27 a?os. El Madrid acab¨® ganando la Liga en esas temporadas.