liga bbva | barcelona 4 - numancia 1
El Barcelona derriba la muralla en la segunda parte
El Numancia resisiti車 durante la primera parte, en la que adem芍s P谷rez Lasa le anul車 un gol legal, pero cedi車 en la segunda ante un Barcelona m芍s insistente que brillante, que domin車 el partido con absoluta autoridad pero al que se le atragant車 durante muchos minutos el planteamiento ultra defensivo de los de Kresic. Cuando Messi marc車 el primer gol fue coser y cantar aunque Barkero devolvi車 la emoci車n al partido durante unos minutos con un buen gol de falta.
Sergio Kresic hab赤a avisado durante la semana: el Numancia del Camp Nou no ser赤a el equipo alegre que se pasea sin complejos por los campos de Primera y que navega fuera de los puestos de descenso. Al contrario, el plan era eficiencia defensiva y trabajo a destajo para intentar incordiar lo m芍s posible a un Barcelona que se presentaba con toda la artiller赤a, Iniesta por fin el centro del campo junto a Xavi y Toure y Etoo, Henry y Messi en ataque.
Y desde luego que cumpli車 lo prometido el equipo soriano, que fue un ej谷rcito blanco y rojo parapetado en torno a la porter赤a de Juan Pablo, concediendo el bal車n y la responsabilidad al rival. Cada vez que Xavi levantaba la cabeza, encontraba tres hombres que cerraban cualquier pase posible. La arquitectura futbol赤stica del de Terrassa chocaba una y otra vez contra el mismo muro que encontraban Alves y Messi en la banda derecha, superpoblada hasta el extremo. Con todo el equipo en pocos metros, la posesi車n en el primer tiempo arroj車 una estad赤stica casi sonrojante para un Numancia sin embargo encantado con ese rol de equipo sin nada que perder, capeando el temporal futbol赤stico con la misma calma que el climatol車gico. El Barcelona, mientras, acumulaba llegadas al 芍rea, remates, tentativas. Todo a un ritmo lento, sin brillantez, con paciencia, esperando al gol como una certeza, algo que a la fuerza ten赤a que suceder. Por calidad o por tozudez.
Y, sin embargo, lo m芍s significativo de la primera parte sucedi車 en el 芍rea de Vald谷s, donde P谷rez Lasa se invent車 una falta inexistente en un remate de Del Pino que acabo en gol. El interior soriano carg車 legalmente, gan車 el salto a Iniesta y remat車 a la red, pero el 芍rbitro sac車 del atolladero a un Barcelona perezoso de lo habitual, en el que s車lo parec赤a completamente enchufado Etoo, como si quisiera sepultar de un plumazo los dimes y diretes de una semana larga, un manch車n de tinta en el impecable trayecto de su equipo y en el fino equilibrio con el que Guardiola maneja su relaci車n con la peliaguda personalidad del camerun谷s.
Con todo, el Bar?a hab赤a rastreado cada rinc車n del c谷sped buscando un resquicio, un espacio para la creaci車n. Sobre todo por la derecha pero tambi谷n por la izquierda, con Henry, y por el centro, con Iniesta m芍s participativo que Xavi, que entreg車 la batuta al de Fuentealbilla y se descolg車 hacia el balc車n del 芍rea buscando el protagonismo en el remate y no en el pase, la suerte del juego que domina como nadie y que le convierte en, seguramente, el mejor centrocampista del mundo.
Alves y Messi derriban la muralla
Como si el descanso no hubiera existido, el Barcelona sali車 de vestuarios atacando y percutiendo sobre el 芍rea de Juan Pablo. Iniesta lo prob車 justo antes de que, a los cinco minutos de la reanudaci車n, el Numancia dejara de ser el 迆nico equipo al que el Barcelona no hab赤a sido capaz de marcar un gol en Liga. La resistencia numantina, nunca mejor dicho, se prolong車 durante todo el partido de Soria y la primera parte del Camp Nou. Mucho m谷rito, sin duda. Pero el bal車n hab赤a rondado demasiado tiempo la porter赤a soriana, y finalmente Alves pele車 un bal車n al borde del fuera del juego y encontr車 petr車leo. El resto fue un toque sutil de Messi, que se bes車 el escudo tras una semana, tambi谷n en su caso y por otros motivos, de rumorolog赤a.
El Numancia, sin nada que perder y con su plan A demolido, se estir車. A su primer conato de valent赤a le respondi車 el Barcelona con un sopapo que llev車 la firma del pichichi Etoo, en posici車n justa pero legal. 97 goles en Liga de Etoo con el Barcelona y aparentemente, con 2-0, partido resuelto. Sin embargo, el Numancia, admirable en cuanto a disposici車n y capacidad de trabajo, volvi車 al partido de repente, superada la hora de partido y con un zapatazo de Barkero en un libre directo m芍s duro que ajustado a la escuadra. Partido abierto otra vez y obligaci車n para el Barcelona de mantener la concentraci車n para certificar la octava victoria consecutiva y evitar el patinazo que esperan ansiosos sus perseguidores.
El Numancia lo prob車 desde la distancia, con un tiro lejano de Nagore, antes de que Henry cerrara el partido con un remate mordido dentro del 芍rea. Doce goles del franc谷s, 44 del tridente Henry-Messi-Etoo y cap赤tulo cerrado en un Camp Nou que, por cosa de los horarios y los temporales, no lleg車 a la media entrada. Guardiola meti車 a Busquets por Henry para controlar todav赤a m芍s el flujo del juego y Messi sac車 petr車leo en el 芍rea a un cuarto de hora del final y entre regates y rechaces afortunados marc車 el cuarto , mucho castigo para un Numancia cuya Liga, obviamente, no pasa por el Camp Nou y que dej車 en todo caso imagen de equipo honesto y trabajador y termin車 con 10 por rigurosa expulsi車n de Palacios y que pudo recibir una goleada mayor, finalmente evitada por el larguero y un Juan Pablo acertado ante Etoo y Messi, dos jugadores cuya hambre nunca decrece.
Consumada la goleada feliz, hubo minutos para Bojan y c芍nticos triunfalistas en una grada que ve la Liga en el bote. A la carrera del Barcelona le quedan 18 estaciones, con la confianza al m芍ximo y un margen de cuatro partidos sobre sus perseguidores, cada vez m芍s abocados a un fe ciega, a un ejercicio de esperanza de espaldas a los datos, a la realidad de cada jornada. Eso era el partido para el Barcelona: un d赤a en el que no se pod赤a fallar, un partido en el que no hab赤a m芍s opci車n que los tres puntos. Y eso consigui車, con ayuda arbitral en la primera parte y adornos en la segunda, en cuanto salt車 por los aires la muralla de un Numancia que encaj車 cuatro goles pero sale intacto del Camp Nou. Plant車 cara y entorpeci車 mientras pudo al Bar?a. Su Liga, la de la lucha por la permanencia, se decidir芍 en otros campos.