Emery le ech¨® en cara a Helguera su poca actitud
El t¨¦cnico se lo dijo delante del resto de la plantilla

Unai Emery se ha cansado de la actitud de Iv¨¢n Helguera y as¨ª se lo hizo saber el pasado viernes al defensor delante del resto de compa?eros en el vestuario de Mestalla. El t¨¦cnico le dijo al c¨¢ntabro que, si segu¨ªa con su poca intensidad a la hora de entrenarse y no sub¨ªa su nivel de exigencia no entrar¨ªa en las convocatorias pues ya se hab¨ªa cansado de intentar reconducirlo en los ¨²ltimos meses.
Helguera no est¨¢ satisfecho con su situaci¨®n en el Valencia, con el que s¨®lo ha jugado un partido de Liga y, para el cuerpo t¨¦cnico, en las sesiones de trabajo no est¨¢ emple¨¢ndose como es debido. Por ello, tras tres reuniones privadas en las que Emery le ha pedido al defensor, ya desde la pretemporada, que cambie de actitud y se suba al carro del resto de compa?eros, la semana pasada explot¨® y se lo dijo ante todo el plantel, produci¨¦ndose una situaci¨®n muy tensa ya que Iv¨¢n le contest¨® y tuvieron un intercambio de recriminaciones. El futbolista le record¨® que, siempre que ha jugado (dos partidos de UEFA, uno de Copa en Portugalete y el de Liga en Valladolid) el Valencia ha ganado y que no le ha servido de nada, pues sali¨® del once en el siguiente compromiso.
Emery le replic¨® que su rendimiento diario no era el deseable y, en un caso similar al de Timo Hildebrand, le asegur¨® que debe dar mucho m¨¢s en los entrenamientos si quiere regresar a las citaciones, pues el resto de compa?eros s¨ª est¨¢n trabajando como es debido y se lo merecen m¨¢s.
El jugador ya tuvo un mal gesto
En el partido de vuelta de la Copa de la UEFA ante el Mar¨ªtimo, Helguera ya tuvo un mal gesto con Emery cuando ¨¦ste le sustituy¨® y el zaguero digiri¨® muy mal la decisi¨®n y se dirigi¨® al banquillo visiblemente enfadado y con palabras poco amigables hacia el cambio. Iv¨¢n evit¨® pasar por donde estaba su entrenador y cuando se sent¨®, golpe¨® el banquillo. Pese a ello, despu¨¦s del partido ambos dijeron que el tema estaba olvidado, que todo hab¨ªa sido un calent¨®n de Helguera y que pasaban p¨¢gina. Ahora, ya no ha sido as¨ª.