liga bbva | Osasuna 0 - Betis 2
El Betis aprovecha los regalos
El conjunto de Camacho, que no mereci¨® un resultado tan negativo, fue presa de sus excesivos nervios y pag¨® caro los errores, tanto propios como arbitrales. Un gol mal anulado a Santi Ezquerro en los primeros compases marc¨® el desenlace del encuentro. Despu¨¦s, dos fallos garrafales de la defensa rojilla, permitieron que Mehmet Aurelio inaugurara el marcador al abrirse la barrera en una falta, y que Pavone sentenciara con la inestimable colaboraci¨®n del meta Ricardo.
Osasuna volvi¨® a perder una buena ocasi¨®n de conseguir su primera victoria en un partido con gran expectaci¨®n en el Reyno de Navarra por el debut del nuevo t¨¦cnico, Jos¨¦ Antonio Camacho, ante su afici¨®n. Los locales, que no merecieron un resultado tan negativo fueron presa de sus excesivos nervios y de los errores, tanto propios como ajenos. Por el contrario un Betis con las ideas muy claras y bien ordenado el campo supo manejar a su antojo el encuentro y aprovechar los regalos de la zaga rojilla. Con los goles de Mehmet Aurelio y Pavone, los de Chaparro cogen confianza y se instalan en la parte media de la clasificaci¨®n. El ¨¢rbitro tambi¨¦n tuvo su cuota de protagonismo al anular un tanto legal a Santi Ezquerro y eso a estas alturas es una losa demasiado pesada para los rojillos.
Tras una semana en la que Camacho ha tenido tiempo para familiarizarse con su plantilla, la consigna est¨¢ clara en estos primeros compases: l¨ªneas juntas, fuerte presi¨®n, salida r¨¢pida al contraataque y car¨¢cter, mucho car¨¢cter. No parece que le vaya a costar mucho contagiar a sus jugadores esa garra que siempre ha caracterizado al t¨¦cnico murciano, lo que si parece m¨¢s complejo es transmitir esa confianza y serenidad a la hora de generar ocasiones en el ¨¢rea rival. Camacho plant¨® de salida dos pivotes en el centro del campo para dar la consistencia que necesita el equipo atr¨¢s y situ¨® a Santi Ezquerro en el perfil izquierdo pero haciendo las veces de media punta. El comienzo fue esperanzador para los 18.000 aficionados que abarrotaban las gradas. Los rojillos comenzaron muy enchufados y trataron de apretar desde el principio a un Betis que, aunque tard¨® en entrar en el partido, no perdi¨® la compostura en ning¨²n momento.
El Betis de Chaparro salt¨® al campo con la confianza que da haber conseguido su primera victoria de la temporada. Con la filosofia del futbol vistoso por bandera, los verdiblancos supieron sacudirse la presi¨®n con un par de internadas a la contra, avisando a los locales de que el m¨ªnimo error podia costarle el partido. El t¨¦cnico andaluz parece haber encontrado la tecla en el centro de campo, apoy¨¢ndose en el poder¨ªo f¨ªsico de sus dos ejes en la medular. Mehmet Aurelio y Eman¨¢ se est¨¢n mostrando como dos de las grandes revelaciones del campeonato, liberando a Capi de las tareas defensivas y transmitiendo peligro en cada una de sus llegadas.
El ¨¢rbitro complica m¨¢s las cosas
Las buenas sensaciones de los navarros quedaron patentes cuando, pasado el primer cuarto de hora, un mal despeje de la zaga verdiblanca acab¨® con un gran pase a la espalda de Nelson, que ve¨ªa como Santi Ezquerro, completamente solo en el segundo palo, bajaba la pelota y con mucho temple la colocaba en la escuadra. Pero hay algo que no cambia en Pamplona, el arbitraje. El juez de l¨ªnea levantaba el bander¨ªn anulando un gol completamente legal. Pa?olada en las gradas y a seguir luchando contra viento y marea.
En pleno acoso rojillo y aprovechando la inercia atacante, Ezquerro lanz¨® una pared con Portillo y desde el carril del diez, solt¨® un fuerte disparo poniendo en problemas al meta b¨¦tico. El guardameta, que ve¨ªa impotente como los rojillos merodeaban con frecuencia sus inmediaciones, se desga?itaba exigiendo a su defensa que taparan el juego de segunda l¨ªnea. Una vez sacudida la presi¨®n local, el Betis comenz¨® a encontrarse consigo mismo y, bajo el mando de Capi comenz¨® a tocar de un lado a otro, llegando sus primeras ocasiones. En la primera Fernando Vega prob¨® al meta Ricardo con un potente disparo desde la frontal del ¨¢rea, y posteriormente Eman¨¢, puso un gran pase a la espalda pamplonica, pero Dami¨¢ cruz¨® en exceso ante el murmullo de la grada.
Con la igualdad como t¨®nica general lleg¨® el partido a su descanso, con m¨¢s aproximaciones del conjunto local pero con mayor sensaci¨®n de peligro por parte de los andaluces. Tras la charla de los entrenadores el partido contin¨²o por los mismos derroteros, pero con un punto m¨¢s de intensidad y ritmo. Osasuna pareci¨® confundir esa intensidad con ansiedad y eso, en ocasiones es bueno, pero en otras te puede costar un partido.
Osasuna, presa de sus errores
Fruto de la ansiedad Osasuna cometi¨® dos faltas consecutivas en la frontal del ¨¢rea. Eman¨¢ no supo aprovechar la primera oportunidad, estrellando el bal¨®n contra la madera. Mientras Camacho se desesperaba en el ¨¢rea t¨¦cnica, Mehmet Aurelio coloc¨® el bal¨®n y el resto lo hizo la barrera. El brasile?o nacionalizado turco lanz¨® a media altura, y la barrera abri¨® el hueco necesario para que el bal¨®n se colase dentro de la porter¨ªa ante la desesperaci¨®n del meta rojillo. Los peores augurios se cumpl¨ªan y la ansiedad se apoderaba de los jugadores locales.
A partir de ah¨ª, Osasuna se tir¨® a tumba abierta en busca de un empate, que seguramente mereciera. El partido se abri¨® de par en par y este tipo de partidos suele beneficiar a los que m¨¢s calidad y confianza tienen. El Betis con mayor serenidad guardaba la ropa, esperando su momento. Los rojillos tuvieron el partido en sus manos cuando en una nueva demostraci¨®n de inoperancia arbitral y con dos balones en el terreno de juego, Mateu Lahoz dej¨® sacar un libre directo que Portillo, a bocajarro, no supo cabecear para transformar el ansiado empate.
Con el run run en la grada y los primeros gritos acord¨¢ndose del presidente de la entidad, Osasuna se olvid¨® de la m¨¢xima de que para poder ganar hay que defender. Un bal¨®n perdido en ataque propici¨® un contragolpe de cuatro jugadores b¨¦ticos contra uno rojillo, que el omnipresente Eman¨¢ se empe?¨® en desperdiciar tras un mal pase a Capi.
Cuando parec¨ªa que el gol pod¨ªa llegar de un lado y de otro, lleg¨® la gota que colmaba el vaso. A falta de cinco minutos, el meta Ricardo no supo atajar un inocente y centrado disparo de falta de Eman¨¢, y Pavone con la ca?a preparada daba la estocada definitiva. Dos fallos y dos goles. Osasuna parece estar de rebajas y el Betis no dud¨® en aprovecharse.