Feliz regreso

En medio de una apote¨®sica fiesta volvi¨® el Calder¨®n a la competici¨®n de clubes m¨¢s prestigiosa del mundo. El estadio rojiblanco, adem¨¢s, disfrut¨® de la mejor versi¨®n de su equipo, esa que ofrece en la Champions, que vimos ante el Schalke y el PSV, y cuyo principal exponente es un peque?o genio de nombre Ag¨¹ero. El argentino volvi¨® a ser el mejor de su equipo, abriendo el marcador con un gol de muchos quilates, y lider¨® mientras las fuerzas le acompa?aron a un equipo que ya sigue con fe ciega a este joven fuera de serie. La victoria es un premio para el equipo, que ve como semana tras semana nacen dudas por su rendimiento en el torneo dom¨¦stico, un premio para el entrenador, pero sobre todo, un premio para la afici¨®n atl¨¦tica, responsable en buena parte del lugar a donde a llegado su equipo y que ya disfruta viendo a su equipo entre los grandes.

A excepci¨®n de los penosos incidentes protagonizados por los aficionados franceses (cafres hay en todos lados), el comienzo no pudo ser mejor. Por el fondo y la forma. Ocurri¨® lo so?ado por miles de atl¨¦ticos desde hace diez a?os. El Atl¨¦tico, as¨ª, para abrir boca, no s¨®lo se adelantaba a los tres minutos, sino que lo hac¨ªa de forma brillante, con una gran jugada iniciada por Maxi, con un gran pase destinado a ¨¦l, el 'Kun', que se invent¨® un control con retroceso para dejar clavado a su par y fusilar a un Mandanda que no se lo cre¨ªa. Ni ¨¦l ni muchos, porque ha decir verdad, por mucho que creamos en este chico, aunque sepamos que ser¨¢ el mejor del mundo alg¨²n d¨ªa, sigue fascin¨¢ndonos por lo que es capaz de hacer. S¨®lo tres minutos despu¨¦s, el argentino a punto estuvo de hacer el segundo, pero su intento de vaselina fue abortado por el guardameta galo. El Olympique ten¨ªa ya el miedo al 'Kun' en el cuerpo.

Al Calder¨®n se le dibuj¨® una sonrisa de oreja a oreja que el Marsella apenas amenazaba con borrar. Lo del Atl¨¦tico no era s¨®lo un arranque imponente, no se trataba de un arre¨®n sin m¨¢s. Hubo continuidad en el juego. El once de circunstancias, por las lesiones de unos y la necesidad de descanso de otros, que hab¨ªa decidido Aguirre estaba dando buenas sensaciones. Maxi Rodr¨ªguez, adem¨¢s de la genial asistencia ya comentada, se atrev¨ªa con el disparo, Miguel entraba en juego poco a poco y Ra¨²l Garc¨ªa aparec¨ªa desde la segunda fila con much¨ªsimo peligro. Quiz¨¢s el m¨¢s desaparecido era Sinama, eclipsado por el efecto Ag¨¹ero ante el que cualquiera sucumbir¨ªa.

El ¨²nico pero se pon¨ªa en defensa, donde Heitinga y Ujfalusi hab¨ªan dado muestras de nerviosismo, sobre todo en un saque de esquina de los marselleses que a punto estuvo de convertirse en un susto mayor. Minutos despu¨¦s, al cuarto de hora, llegaba el empate franc¨¦s, en una preciosa jugada iniciada por Valbuena, el mejor de su equipo, y que Niang cabece¨® a gol tras un preciso pase de Bonnart. El tanto, sin restarle m¨¦rito, fue facilitado por un error de marca de Heitinga y Perea, que dejaron al delantero un amplio radio de acci¨®n. Para m¨¢s inri, la igualada llegaba despu¨¦s de una clara ocasi¨®n de Ra¨²l Garc¨ªa.

Hab¨ªa que reponerse, dejar atr¨¢s lo ocurrido y seguir como si nada. El Atl¨¦tico mord¨ªa cada vez que llegaba al ¨¢rea, y hab¨ªa que seguir confiando en eso. No en vano el disgusto le dur¨® poco a la parroquia colchonera. S¨®lo seis minutos despu¨¦s, Taiwo comete falta sobre Ag¨¹ero. La entrada es muy dura y no viene a cuento. El ¨¢rbitro no se complica y muestra amarilla. Pern¨ªa bota la falta y Ra¨²l Garc¨ªa se adelantaba a la defensa francesa para hacer el segundo.

El delirio volv¨ªa al estadio colchonero, m¨¢s a¨²n cuando comprobamos que los rojiblancos segu¨ªan siendo los due?os del encuentro, que se ol¨ªa el gol cada ve que bal¨®n rondaba el marco de Mandanda, y que la magia de Ag¨¹ero, como en todas sus actuaciones en Champions hasta la fecha, estaba muy presente. Hubo alguna d¨®sis de sufrimiento, que se le va hacer, pero Leo Franco se encarg¨® de desbaratar la ocasi¨®n m¨¢s clara, un disparo lejano de Niang que el argentino despej¨® a c¨®rner tras una gran estirada. Al grito de "?Atleti, Atleti!" y con ganas de que siguiera la fiesta desped¨ªa el Calder¨®n a los suyos al descanso.

Poco f¨²tbol y menos sufrimiento

El encuentro cambi¨® de cara en la segunda mitad. El Olympique, que dio entrada a un viejo conocido, Boudewijn Zenden, en lugar de Ben Arfa (decepcionante), pas¨® a tener la dominar la posesi¨®n del bal¨®n, algo que no deb¨ªa preocupar en principio. Los franceses se estrellaban una y otra vez con el muro atl¨¦tico, pero la cosa cambiaba a bal¨®n parado. El miedo a un desliz defensivo sobrevolaba el Calder¨®n en cada aproximaci¨®n del rival. En ataque cada vez se sab¨ªa menos del Atl¨¦tico, que hab¨ªa comenzado como en la primera mitad, pisando el ¨¢rea marsellesa y rozando el gol, con un taconazo de Maxi que a punto estuvo de dejar el de Van der Vaart a la altura del bet¨²n.

Eso y un tiro de Sinama fue lo poco que estaba ofreciendo el conjunto espa?ol. Aguirre tom¨® cartas en el asunto y realiz¨® un sorprendente cambio. Maniche por Sinama. El portugu¨¦s, descartado hasta poco antes del encuentro, ten¨ªa que ayudar a ganar la batalla del centro del campo, y 'Kun' se quedaba sin descanso.

El cambio dio sus resultados y el juego baj¨® de ritmo considerablemente, tal y como quer¨ªa el mexicano. Los franceses comenzaron poco a poco a bajar los brazos, esperando que alg¨²n destello de Valbuena les sacara del atolladero. El Atl¨¦tico tuvo por fin eso que tanto falta en otras ocasiones, ve¨¢se la Liga. Supo dormir el choque, llevarlo a su terreno y obligar al rival a entrar en una lucha cuerpo a cuerpo en el centro del campo. Casi al final del partido un tiro de Niang puso el coraz¨®n en un pu?o a la grada. En los minutos finales, el Olympique exal¨® su ¨²ltimo aliento en busca de un tanto salvador, pero afortunadamente todo se qued¨® ah¨ª. El Atl¨¦tico es flamante l¨ªder de su grupo junto con el Liverpool, con el que se ver¨¢n las caras el pr¨®ximo d¨ªa 21. Ser¨¢ el reecuentro con el ni?o, ahora 'The Kid', pero eso ser¨¢ ya otra historia.