El Atl¨¦tico se encomienda al Calder¨®n

Cay¨® el Atl¨¦tico en Alemania en su intento de regreso a la Liga de Campeones. Lo peor no fue la derrota, por la m¨ªnima y casi dando las gracias, sino el aroma de equipo vulnerable que sigue ofreciendo el cuadro de Aguirre a sus rivales. Mucho tendr¨¢ que mejorar el equipo para remontar el gol del Schalke dentro de 15 d¨ªas. Y much¨ªsimo tendr¨¢ que hacerlo si no quiere que su regreso a la Champions sea una corta aventura de oto?o.

En el minuto 40, el Atl¨¦tico realiz¨® su primer tiro a puerta. No fue ni siquiera una ocasi¨®n. M¨¢s bien un intento. Una falta desde 30 metros que ejecut¨® Maxi sin que Schober apenas tuviera que poner las manos para embolsarse la bola. Dos minutos despu¨¦s, el propio argentino habilit¨® a Sinama Pongolle para que ¨¦ste engatillara con la zurda. Le sali¨® picuda.

M¨¢s o menos as¨ª fue la primera parte rojiblanca en su intento de regreso a la ¨¦lite europea. Picuda, extra?a, rara, fea... Pongan el adjetivo desasosegante que prefieran. Llegaba el equipo de Aguirre a Gelsenkirchen con ¨¢nimos e ilusi¨®n, pero sin Ag¨¹ero y con muchas dudas despu¨¦s de una pretemporada que tuvo en Vallecas su expresi¨®n m¨¢s absoluta de efectividad arriba y desaliento atr¨¢s.

Los miedos de la defensa no s¨®lo no se disiparon sino que dibujaron una interrogante en el cielo como la torre de comunicaciones de Berl¨ªn. En cinco minutos, el d¨²o Ujfalusi-Heitinga dej¨® tanto en cueros a Leo Franco -Rakitic y Farf¨¢n estuvieron a punto de finiquitar en cinco minutos la Champions rojiblanca- que al argentino no le volvi¨® el color a la cara hasta el final del partido.

As¨ª, bastante ten¨ªa el Atl¨¦tico con ese lastre como para ponerse a crear f¨²tbol. Y el caso es que por ah¨ª es por donde sigue ilusionando este equipo. Aunque lejos de lo que puede dar, la presencia de Assun?ao junto a Ra¨²l Garc¨ªa debe dar mucho vuelo a este Atl¨¦tico. No sucedi¨® frente al Schalke, pero la medular completada por Maxi y Simao promete alegr¨ªa y diversi¨®n. Mucho m¨¢s si la juntamos con Forl¨¢n, a¨²n lejos de sus mejores abdominales, y con Sinama, delantero muy interesante y que puede dar mucho juego a Aguirre hasta que llegue Ag¨¹ero... Y tambi¨¦n despu¨¦s.

El problema sigue siendo el del a?o pasado. El Atl¨¦tico guarda dinamita de centro del campo hacia delante, pero regala invitaciones de todo incluido de la medular hacia atr¨¢s. El Schalke aprovech¨® la coyuntura y, sin ofrecer mucho, caus¨® verdaderas pesadillas en el ¨¢rea de Leo. Kuranyi, Farf¨¢n y Rakitic hicieron saltar las alarmas antes de que Pander adelantara al Schalke de falta directa. Leo Franco mir¨® el bal¨®n y parece que le gust¨® mucho el gol.

Aliento

Otro susto de Kuranyi en forma de ocasi¨®n y el descanso parecieron despertar definitivamente a los de Aguirre. Tras el receso, el Atl¨¦tico se vio definitivamente en Champions y se dio cuenta, al fin, de que el partido no era una tonter¨ªa de verano. Adelant¨® l¨ªneas el equipo rojiblanco, dio un paso adelante y le hizo saber a su rival que la cosa no iba a ser tan sencilla como se cre¨ªa. Con Paulo como boya, se juntaron Ra¨²l Garc¨ªa, Simao y Sinama y le dieron otro aire al equipo. No lo debio entender as¨ª Aguirre, quien decidi¨® prescindir del franc¨¦s para dar entrada a Luis Garc¨ªa en vez de sacrificar a un Maxi demasiado alejado de sus buenos d¨ªas como futbolistas.

La salida de Sinama dej¨® cojo al equipo, que no volvi¨® en el ¨²ltimo tramo del partido a albergar el aliento que hab¨ªa llegado al comienzo del segundo tiempo. Un baj¨®n que termin¨® de rematar la expulsi¨®n de Antonio L¨®pez por doble amarilla. Encomend¨¢ndose al Vicente Calder¨®n, Aguirre quit¨® a Simao para dar entrada a Pern¨ªa y dejar al Atl¨¦tico con Forl¨¢n como ¨²nico adelantado. Demasiado miedo como para pensar en un gol que diera la vida. Demasiadas esperanzas en un partido de vuelta con el Manzanares desbordado. Demasiada confianza en la afici¨®n, ese plus que da al Atl¨¦tico el punto al que no llega su juego.