Portugal confirma su condici¨®n de favorita

Tuvo que sudar Portugal, y mucho, para comenzar con victoria su andadura en esta Eurocopa. Los de Scolari no quer¨ªan dejar escapar la victoria en su debut ante su te¨®rico rival directo por el primer puesto del grupo. Con un Cristiano aceptable, pero sin deslumbrar, Portugal mostr¨® su superioridad y fue justo merecedor de la victoria, que debi¨® ser m¨¢s amplia. La clasificaci¨®n a partir de aqu¨ª parece pan comido para los lusos.

Ambos equipos tuvieron bien claro lo que ten¨ªan que hacer para llevarse el choque desde el principio. Portugal, segura de su superioridad t¨¦cnica, sali¨® con la meta de Volkan Demirel entre ceja y ceja. Juego vertical y abundante uso de las bandas, su se?a de identidad. El problema es que eso lo saben todos.

Los turcos, un equipo muy serio, donde prima el orden y la concentraci¨®n a lo largo de los noventa minutos, se mostr¨® pronto como el equipo rocoso que esper¨¢bamos. Los de Fatih Therim aguantaron la avalancha inicial a base de disciplina, aguantando las acometidas atr¨¢s sin perder el posicionamiento en pr¨¢cticamente ning¨²n instante, pero con demasiada rigidez en la estrategia, quiz¨¢s por el miedo a que despertara la bestia.

Y esta no era otra que Cristiano Ronaldo, la gran atracci¨®n del encuentro. El de Funchal ya era la estrella de su selecci¨®n en el Mundial de Alemania, pero en esta ocasi¨®n es la estrella del torneo. Se esperaba por su parte el no va m¨¢s. Y le cost¨® entrar en acci¨®n. La primera mitad la comenz¨® pegado a la izquierda, y apenas rasc¨® bola.

En estos minutos Portugal estuvo m¨¢s cerca del gol, y Pepe, muy peligroso en las jugadas a bal¨®n parado, no se lo pod¨ªa creer cuando Herbert Fandel anulaba un remate del madridista, que ya celebraba el tanto corriendo por el c¨¦sped del estadio de Ginebra. El fuera de juego era correcto y Portugal ve¨ªa como su dominio se volv¨ªa infructuoso.

El ritmo del encuentro, sin dejar de ser bueno, fue bajando con el paso de los minutos. Una vez perdida la aceleraci¨®n de los primeros instantes, en los que los jugadores tienen que descargar toda la adrenalina y tensi¨®n acumulada durante los d¨ªas antes, Portugal sigui¨® llevando el peso del juego. El peligro se intu¨ªa en cada llegada, y no s¨®lo por parte de los de Scolari, pero las mejores ocasiones llegaron a bal¨®n parado. Cada equipo ten¨ªa sus especialistas. El mejor de todos, Cristiano, tuvo la que a la postre fue la ocasi¨®n m¨¢s clara de la primera mitad en un lanzamiento que se envenen¨® al botar en el ¨¢rea peque?a y termin¨® estrell¨¢ndose contra el poste ante la atenta mirada de Volkan.

Volviendo al seguimiento del astro del United, poco m¨¢s ofreci¨® en la primera mitad, apenas una galopada en eslalon que finaliz¨® con un tiro desviado. Turqu¨ªa por su parte fue a menos, cada vez le costaba m¨¢s acercarse al marco de Ricardo, e incluso parec¨ªan f¨ªsicamente algo mermados, pero segu¨ªan teniendo una pegada arriba respetable. En un par de ocasiones avisaron al portero del Betis, pero se quedaron en eso, simples avisos.

Pepe castiga la pasividad turca

Portugal hab¨ªa sido claramente superior en la primera mitad, y quiz¨¢s por la confianza lograda, la selecci¨®n lusa sali¨® a matar el encuentro. En los primeros quince minutos, nuestros vecinos tuvieron hasta tres buen¨ªsimas ocasiones para haberse adelantado en el marcador, la m¨¢s clara de ellas, un lanzamiento de Nuno Gomes tras un grave fallo de la defensa turca. M¨¢s tarde, Cristiano primero y Moutinho despu¨¦s volvieron a probar suerte, pero primero Demirel, y luego la falta de punter¨ªa evitaron el tanto.

La tripleta Deco-Moutinho-Petit ten¨ªa completamente controlado el centro del campo, y Cristiano comenzaba a encarar como no lo hab¨ªa hecho en la primera mitad. Turqu¨ªa segu¨ªa dando alg¨²n que otro aviso cada cierto tiempo, pero nada serio, y siempre a expensas de lo que hiciera el rival. En Portugal comenzaba a cundir la desesperaci¨®n, tal vez por el recuerdo de la ¨²ltima Euro, en la que se les escap¨® el primer encuentro. Hasta que apareci¨® Pepe. El central estaba siendo de los mejores del encuentro, y en el minuto 61 de encuentro decant¨® la balanza disfraz¨¢ndose de Beckembauer. Cogi¨® el bal¨®n en campo turco, arranc¨® con fuerza y decisi¨®n, lanz¨® una pared con Nuno Gomes, y se plant¨® solo ante Demirel. La definici¨®n fue lo m¨¢s sencillo. Golazo por todo lo alto.

Con la tranquilidad de la ventaja en el marcador, Portugal sigui¨® con la misma idea fija, el gol. Cuatro minutos despu¨¦s del tanto, Cristiano Ronaldo se invent¨® un pase a la cabeza de Nuno Gomes, que de nuevo demostr¨® no ser un delantero centro nato, y envi¨® el bal¨®n al travesa?o. La falta de gol puede ser uno de los lastres de este equipo.

Turqu¨ªa intent¨® revertir la situaci¨®n. Trat¨® de tener m¨¢s el bal¨®n y no precipitarse, pero no encontraban el modo de acercarse al marco de Ricardo. A excepci¨®n de Emre, uno de los m¨¢s talentosos del equipo turco, nadie parec¨ªa capaz de sacarse de la chistera el ¨²ltimo pase necesario en los metros finales. Por unos instantes, Portugal acept¨® el cambio de papeles y se dedic¨® a lanzar contras. Cristiano, de delantero tras la sustituci¨®n de Nuno Gomes, a punto estuvo en un par de ocasiones de sorprender a la zaga rival.

En los minutos finales Turqu¨ªa estaba ya volcada. Un gol nunca llega en buen momento, pero el de Pepe les daba muy poco margen de reacci¨®n, y ahora su conformismo anterior les comenzaba a pasar factura. De nuevo el juego a bal¨®n parado era su principal arma, m¨¢s a¨²n despu¨¦s de unas acciones de Ricardo en las que se hab¨ªa mostrado un tanto inseguro.

Con tantos espacios, a Portugal se le abri¨® el cielo y en una contra mat¨® el choque con una gran jugada colectiva que arranc¨® en la banda derecha y finaliz¨® Meirelles llegando desde la izquierda. El tanto fue una clara muestra de la superioridad lusa, que no s¨®lo se lleva los tres puntos y encarrila su clasificaci¨®n, sino que da un aviso a los rivales. Est¨¢n aqu¨ª para ganar, y por algo son favoritos.