Copa Intertoto | Gloria Bistrita 2 - Atl¨¦tico 1
El Atl¨¦tico se olvida la gloria en Bistrita
El conjunto rojiblanco no fue capaz de sacar un resultado positivo ante un d¨¦bil rival, que se aprovech¨® del nefasto partido de la defensa visitante para adelantarse en el marcador. El golazo de Seitaridis maquilla el resultando, dando esperanzas al Atl¨¦tico en el partido de vuelta.
"Tenemos que aprovechar la ¨²ltima oportunidad de entrar en UEFA", dec¨ªa Aguirre d¨ªas antes del partido. Pero sus pupilos, lejos de seguir las indicaciones de su t¨¦cnico, mostraron su peor cara ante un mediocre equipo, situado sexto clasificado en la Liga rumana, que se aprovech¨® de las constantes indecisiones visitantes.
Es verdad que es el primer encuentro de la pretemporada y que los jugadores no est¨¢n en forma, pero estas excusas dejan de ser ¨²tiles cuando somos espectadores de excepci¨®n de un equipo que ha mostrado, gracias a sus directivos, todo su inter¨¦s en reforzar la l¨ªnea ofensiva despu¨¦s de la marcha de Torres, fi¨¢ndose de una defensa que ha demostrado hoy su verdadera val¨ªa, ni un ¨¢pice de seguridad.
El inicio del partido hac¨ªa presagiar que el conjunto visitante no iba a tener problemas ante un rival que no presionaba, ni siquiera abusaba del bal¨®n en largo en una oportunidad hist¨®rica para eliminar a un equipo grande ante su propio p¨²blico. El Gloria Bistrita dejaba jugar y el Atl¨¦tico pose¨ªa el control del bal¨®n y dominaba el juego a su antojo llegando incluso con peligro al ¨¢rea defendida por el portero local Arbut. Maxi Rodr¨ªguez empezaba a crear peligro e incluso estuvo cerca de estrenar el marcador de su equipo, pero su inocente cabezazo no impacient¨® al portero local, que ya se estaba temiendo una avalancha visitante.
Primer mazazo local
Pero una peligrosa prolongaci¨®n local seguida de un clamoroso fallo de la defensa atl¨¦tica en el marcaje, dej¨® al delantero rumano Zaharia s¨®lo ante Leo Franco. El portero atl¨¦tico, desastroso en toda la tarde, no pudo detener la potente volea del jugador local.
El gol espole¨® a un equipo rumano que ya ten¨ªa el partido donde quer¨ªa y que hab¨ªa destapado que su inicial letargo se pod¨ªa convertir en una trampa mortal a modo de contraataque para la defensa atl¨¦tica, que empezaba a sentir que el miedo imperaba en todas sus acciones.
A partir de aqu¨ª, Maxi Rodr¨ªguez quiso, en su primer partido como capit¨¢n rojiblanco, liderar una remontada que se presagiaba muy previsible despu¨¦s de la calidad mostrada por uno y otro equipo. La reacci¨®n visitante tuvo su punto m¨¢s ¨¢lgido en sendos remates de cabeza que no llegaron a culminar ni un voluntarioso Ra¨²l Garc¨ªa ni un Mista que ten¨ªa el punto de mira m¨¢s bien desviado.
El ¨¢nimo visitante empezaba a dar sus frutos, hasta que un clamoroso fallo de Luccin en la entrega de un bal¨®n dej¨® a Tilinka una oportunidad de oro para enmarcar una primera parte con la que poder deleitar a un p¨²blico que empezaba a creer ciegamente en las posibilidades de su equipo.
Una clara ocasi¨®n final de un voluntarioso Maxi Rodr¨ªguez cerr¨® una primera parte que pon¨ªa de manifiesto el verdadero nivel del Atl¨¦tico.
Reacci¨®n visitante
El descanso o m¨¢s bien la charla de su entrenador debi¨® sentar bien a los jugadores rojiblancos que empezaron a creer en la remontada gracias al magn¨ªfico gol de Seitaridis. El lateral griego control¨® el esf¨¦rico a 20 metros de la porter¨ªa y sin pens¨¢rselo dos veces telegrafi¨® un disparo a la escuadra de la porter¨ªa local que hac¨ªa in¨²tiles los esfuerzos del portero rumano Arbut.
Aguirre intent¨® refrescar al equipo con las salidas de Jurado y Braulio, pero los constantes ataques visitantes no dieron sus frutos y el Atl¨¦tico vuelve a Madrid con un resultado adverso y, lo que es m¨¢s importante, con la gloria olvidada en Bistrita.