Copa UEFA | Athletic - Steaua
Gigi Becali levanta una iglesia por cada t¨ªtulo conquistado
George Gigi Becali, actual presidente del Steaua de Bucarest, es un hombre de palabra. Multimillonario, este constructor alcanz¨® la presidencia del Steaua con la ¨²nica misi¨®n de intentar reverdecer los viejos laureles europeos del antiguo club que representaba los colores del Ej¨¦rcito rumano en la ¨¦poca de Nicolae Ceaucescu, y que le permiti¨® conquistar una Copa de Europa (1986, ante el Barcelona) y disputar otra final (1989, ante el Mil¨¢n en Barcelona).
Becali, un tipo bastante peculiar y populista, tiene dentro de su junta directiva a Stefan Iovan y Adrian Bumbescu, dos de los hombres que conquistaron la Copa de Europa en Sevilla... y al propio Ilie Nastase, enfant terrible del tenis europeo en la d¨¦cada de los 70. Eso s¨ª, es un hombre de palabra y eso no se lo puede discutir nadie: este nuevo rico ha construido m¨¢s de 20 iglesias en Ruman¨ªa, una cifra que aumenta con cada t¨ªtulo que gana el Steaua. "Le promet¨ª a Dios que construir¨ªa una iglesia si lo logr¨¢bamos. Y as¨ª lo har¨¦", dijo tras vencer al Southampton hace un par de a?os. Y lo sigue cumpliendo.
Amante del di¨¢logo, tras una conversaci¨®n suya con algunos jugadores de su plantilla, eligi¨® a Walter Zenga como t¨¦cnico tras el desplante de Victor Piturca el pasado verano. El entrenador, que ahora se postula como ¨²nico candidato a seleccionador rumano, le acus¨® de trato dictatorial. Ahora tiene la Copa de la UEFA, un primer escal¨®n que subir para volver a ver a su equipo en lo m¨¢s alto. Por ahora no le van mal las cosas. El Steaua es l¨ªder del Grupo B.
Duckadam se ha pasado a la pol¨ªtica
Han sido a?os duros para aquel portero que le dio la Copa de Europa de 1986 al Steatua en Sevilla, ante el Barcelona. Helmut Duckadam le par¨® a los cul¨¦s cuatro penaltis y entr¨®, de la mano del malogrado Urruti (que detuvo dos), en el libro de los r¨¦cords: nunca se han detenido seis penaltis de ocho en una tanda como aquella vez. El t¨ªtulo se fue a Ruman¨ªa y mand¨® a Ducadam al Olimpo de Bucarest, aunque fuera poco tiempo.
Seis a?os m¨¢s tarde, Ducadam se retir¨® del f¨²tbol y el Steatua no tuvo la generosidad de concederle un puesto ni de conserje. Helmut se dedic¨® a entrenar aqu¨ª y all¨¢ a juveniles y vivir de su nombre en Arad, su tierra natal, hasta que se march¨® a los EE UU hace tres a?os con un billete de loter¨ªa de esos que concede el Gobierno americano para residir en su pa¨ªs. El a?o pasado, Duckadam volvi¨® y pact¨® con Gigi Becali, presidente del Steaua y del partido pol¨ªtico PNG, presentarse con ¨¦l a las elecciones del pasado domingo, en el que s¨®lo han logrado el 1,79 por ciento de los votos. El ex meta, claro, se ha quedado sin esca?o.