El programa de vacunaci¨®n contra el coronavirus SARS-CoV-2 se acerca ya al a?o y medio en Espa?a, despu¨¦s de que a finales de diciembre de 2020 se inocularan las primeras dosis. Desde entonces se han administrado m¨¢s de 94 millones de vacunas, que han servido para inmunizar con la pauta completa a unos 40 millones de personas en Espa?a. Y de ellas, casi dos terceras partes corresponden a Pfizer (62 millones), muy por delante del resto de vacunas, Moderna, AstraZeneca y Janssen.

Sobre todas ellas, salvo la de Janssen, las autoridades sanitarias internacionales han detectado nuevos efectos secundarios, como con la urgencia urinaria, la miocarditis y la vejiga hiperactiva. As¨ª lo asegura un informe reciente publicado por el Instituto de Posgrado de Medicina Cl¨ªnica de la Universidad M¨¦dica de Kaohsiung, en Taiw¨¢n. De acuerdo con este centro, las vacunas se asocian "significativamente" a problemas con el tracto urinario inferior (STUI).

El estudio, publicado en la revista Journal of Clinical Medicine de Jap¨®n, revela cambios en la urgencia y la frecuencia urinaria de los pacientes. En la investigaci¨®n participaron 889 voluntarios, que fueron inoculados con las vacunas contra la COVID-19 y que no se hab¨ªan sometido a ning¨²n procedimiento urol¨®gico en los ¨²ltimos tres meses. El reparto de las vacunas fue as¨ª: el 65,9% recibi¨® AstraZeneca (586), el 29,2% (260) la de Pfizer y el 4,9% restante (89) la de Moderna.

Resultados

Los resultados del estudio revelaron que estos eventos adversos "autoinformados", relacionados con la orina, aparecieron despu¨¦s de la una de las vacunas contra la COVID aparecieron en el 13,4% de los pacientes. De ellos, el 5,5% opt¨® por buscar ayuda m¨¦dica. "Nuestros hallazgos demostraron que despu¨¦s de la vacunaci¨®n contra el Covid-19, hasta el 13,4 por ciento de los 889 participantes revelaron un deterioro en los STUI de almacenamiento", indican los autores del estudio.

Paralelamente, el s¨ªndrome de la vejiga hiperactiva previo a la vacunaci¨®n se asoci¨® con posterioridad a un mayor riesgo de empeoramiento de los STUI de almacenamiento, sobre todo en lo relativo a la urgencia y la frecuencia urinaria. Concretamente, un estudio de la revista JAMA Cardiolog¨ªa asegura que la miocarditis o la vejiga hiperactiva es m¨¢s frecuente tras la segunda dosis.

Miocarditis y vejiga hiperactiva

El primero de los efectos consiste en la inflamaci¨®n del coraz¨®n, que puede producir un menor bombeo del miocardio o la aparici¨®n de arritmias. Su origen suele estar en un virus o la reacci¨®n a alg¨²n medicamento, y sus s¨ªntomas principales son el dolor de pecho, problemas para respirar, fatiga y latidos irregulares.

Por otro lado, la vejiga hiperactiva supone una necesidad casi extrema de miccionar, de forma m¨¢s constante que lo habitual. Puede provocarla algunas enfermedades, como la diabetes o los trastornos neurol¨®gicos, pero tambi¨¦n diversas infecciones o tumores.