Igual que han subido las pensiones, el Ingreso M¨ªnimo Vital, la renta estatal que se aprob¨® en 2020 para paliar las consecuencias de la pandemia, enfocada a familias con pocos recursos, ha establecido una  subida cada a?o.

Seg¨²n los datos que ha confirmado Jos¨¦ Luis Escriv¨¢, ministro de Seguridad Social, la paga se abonar¨¢ en la segunda quincena de enero. Ser¨¢ de 492 euros al mes, lo que hace un total de 5.899,6 euros al a?o. A comienzos de a?o, el Gobierno aplic¨® un alza del 1,8% pero, debido a una inflaci¨®n m¨¢s alta de lo esperado, se incrementa finalmente en un 3,4% respecto al a?o anterior. as¨ª, los pensionistas recibir¨¢n una paga compensatoria (conocida como 'paguilla').

Riesgo extremo de pobreza

El Gobierno quiere llegar a las 700 mil familias en riesgo de pobreza, de las 350 mil que hay ahora mismo recibiendo la prestaci¨®n, y para ello quiere contar con ONG's que conocen de cerca el drama social que se vive en Espa?a

Las ayudas econ¨®micas en esta l¨ªnea han variado. As¨ª, con hijos a cargo, habr¨¢ una aportaci¨®n de 100 euros al mes por cada menor en el hogar con una edad inferior a tres a?os; de 70 euros mensuales para los ni?os de entre tres y menos de seis a?os, y de 50 euros al mes en el caso de los mayores de seis a?os y menores de 18.

Otra modificaci¨®n es el tipo de hogar, los posibles beneficiarios ser¨¢n los que tengan menos ingresos de los fijados y que cumplan con ciertos l¨ªmites en el patrimonio. Un hogar monoparental con un hijo tiene unos ingresos de 300 euros al mes, la renta m¨ªnima ser¨¢ de 447 euros al mes para alcanzar los 747 euros mensuales.

La ayuda contra la exclusi¨®n econ¨®mica, la pobreza real, var¨ªa tambi¨¦n dependiendo de los integrantes de la unidad familiar. Se puede percibir el IMV hasta un m¨¢ximo de 1.082 euros al mes, en los casos de hogares con dos adultos y tres o m¨¢s menores; con tres adultos y dos o m¨¢s menores y de cuatro adultos y un menor.

El impacto de la COVID-19

Seg¨²n Foessa, Fomento de Estudios Sociales y Sociolog¨ªa Aplicada, constituida en 1965, con el impulso de C¨¢ritas Espa?ola para conocer de forma objetiva la situaci¨®n social de Espa?a, "la cohesi¨®n social en nuestro pa¨ªs ha sufrido un ¡°shock¡± sin precedentes como consecuencia de la tensi¨®n que ha sufrido la actividad econ¨®mica y el empleo a causa de la irrupci¨®n del SARS CoV-2".

Seg¨²n la investigaci¨®n, llevada a cabo por un equipo de m¨¢s de 30 investigadores procedentes de m¨¢s de diez universidades y entidades de investigaci¨®n social, la precariedad laboral durante la crisis sanitaria se ha duplicado y alcanza a casi 2 millones de hogares que dependen econ¨®micamente de una persona sustentadora principal que sufre inestabilidad laboral grave. Lo que significa que en el ¨²ltimo a?o ha tenido: 3 o m¨¢s meses de desempleo, 3 o m¨¢s contratos diferentes, en 3 o m¨¢s empresas distintas.

"Se ha producido un empeoramiento de las condiciones de trabajo que genera m¨¢s trabajadores pobres y trabajadores m¨¢s pobres y menos realizados personal y socialmente", afirma  Ra¨²l Flores, coordinador del Equipo de Estudios de C¨¢ritas y secretario t¨¦cnico de FOESSA

A lo largo de 700 p¨¢ginas, el informe Foessa confirma adem¨¢s que "lo que empobrece a muchos trabajadores no solo es un salario insuficiente, sino muchas veces trabajar una jornada de 3 horas cuando podr¨ªan y desear¨ªan trabajar una jornada completa, o la temporalidad y estacionalidad de los contratos".

Hay casi dos millones de n¨²cleos familiares donde todas las personas activas est¨¢n en paro. Y a pesar del aumento de la protecci¨®n social no se ha logrado compensar esta situaci¨®n y un tercio de estos hogares (esto es, 600 mil familias) carece de alg¨²n tipo de ingreso peri¨®dico, predecible, que permita una cierta estabilidad y capacidad de generar proyectos vitales.

La pandemia, adem¨¢s, ha destapado un nuevo factor de exclusi¨®n social: la desconexi¨®n digital, el nuevo analfabetismo del siglo XXI. La pandemia adem¨¢s ha aumentado la brecha de g¨¦nero. Esta crisis ha tenido m¨¢s impacto en sectores m¨¢s feminizados, como el comercio o la hosteler¨ªa, lo que ha implicado un retroceso mayor para muchas mujeres en t¨¦rminos de integraci¨®n social.

Mientras que la tendencia general en hogares encabezados por hombres ha sido el descenso de la integraci¨®n plena a la precaria, en hogares encabezados por mujeres ha prevalecido el descenso de la integraci¨®n precaria a la exclusi¨®n.

La exclusi¨®n social en los hogares encabezados por mujeres ha pasado del 18% en 2018 al 26% en 2021, un incremento que multiplica por 2,5 el registrado durante el mismo periodo en el caso de los hombres (que pasaron del 15% al 18%).