Los negocios il¨ªcitos est¨¢n a la orden del d¨ªa en Venezuela, pero no siempre levantan el revuelo que ha tra¨ªdo el ¨²ltimo negocio pol¨¦mico inaugurado en el pa¨ªs. Seg¨²n cuenta un art¨ªculo publicado en El Pa¨ªs, la apertura de un establecimiento de nombre Starbucks, pero no vinculado con la franquicia californiana ha trascendido de forma mundial tras hacerse viral en la plataforma TikTok.

Starbucks cuenta con m¨¢s de 30.000 tiendas en 78 pa¨ªses de todo el mundo, pero ha negado que la tienda de caf¨¦s y boller¨ªa que llevan su nombre y su logo est¨¦ vinculado de forma alguna a su marca y sus productos. Este establecimiento se encuentra en el interior de un supermercado, y ofrece a los clientes una oferta similar a la oficial, y en unos precios al cambio bastante relativos a lo que podr¨ªa marcar la empresa si de una franquicia real se tratase.

Tras la controversia iniciada por algunos clientes que notaron las diferencias entre este Starbucks y uno oficial, se dijo inicialmente que se trataba de un emprendimiento parte del programa We Proudly Serve (Servimos con orgullo, en ingl¨¦s) que la marca gestiona a trav¨¦s de Nestl¨¦ para comercializar algunos de sus productos, pero Nestl¨¦ Venezuela y Starbucks, desde Estados Unidos, emitieron comunicados en los que se desvinculan de la cafeter¨ªa en apenas dos p¨¢rrafos y agregan que el programa no opera en Venezuela.

Tras esto, la presi¨®n medi¨¢tica hizo que George Nieves, que figura como CEO de Yeet! (el supermercado que alberga la cafeter¨ªa) a pronunciarse acerca de las evidencias, y reconocer que aunque usan el logo y sus productos, no son una tienda Starbucks oficial, pues la compa?¨ªa no opera con el modelo de franquicias. ¡°Con la apertura del caf¨¦ solo busc¨¢bamos que la experiencia de compra en la tienda fuese m¨¢s amena y divertida¡±, ha admitido en una entrevista al medio venezolano El Nacional. Nieves tambi¨¦n agreg¨® que con esta tienda, buscaban ofrecer al cliente una experiencia de compra 'm¨¢s internacional'.

Un pa¨ªs en guerra con la globalizaci¨®n

Venezuela vive una largu¨ªsima recesi¨®n econ¨®mica. Tras 20 a?os de revoluci¨®n chavista, bloqueos internacionales, conflictos diplom¨¢ticos, revueltas y una emigraci¨®n masiva, el pa¨ªs se nutre en un porcentaje alto de los negocios il¨ªcitos que operan en su territorio, a veces en algunos casos, dirigidos por organismos p¨²blicos. El Pa¨ªs cuenta como ejemplo que, Cuando Kellog¡¯s se fue de Venezuela, el Gobierno tom¨® sus instalaciones y continu¨® produciendo sus cereales, pese a las advertencias de la compa?¨ªa que se trataba de un uso il¨ªcito su marca.

Las consecuencias de la 'econom¨ªa il¨ªcita'

Se ha calculado que la denominada econom¨ªa negra o il¨ªcita, ocupa cerca del 20% del PIB venezolano, situaci¨®n favorecida en parte gracias a algunas de estas burbujas de crecimiento y empleo de las que tambi¨¦n forman parte las concesiones dadas por Maduro sobre bienes expropiados y empresas p¨²blicas quebradas, en transacciones opacas habitualmente.

Pese a la aparici¨®n de una gran cantidad de nuevos supermercados y comercios en los ¨²ltimos meses, los indicadores muestran una desigualdad econ¨®mica dif¨ªcil de salvar, y que evidencia que, para muchos de los venezolanos, la llegada de estos negocios es totalmente indiferente, puesto que no pueden permitirse participar en el circuito econ¨®mico dados sus bajos salarios y su situaci¨®n socioecon¨®mica.

Por otro lado, el Bol¨ªvar empieza a vivir momentos muy cr¨ªticos, puesto que las personas que han permitido recibir parte de sus ingresos en d¨®lares, se han visto beneficiados por el crecimiento a un cort¨ªsimo plazo, lo que no hace para nada competitivo el producto nacional con respecto a los poqu¨ªsimos bienes que llegan por los aranceles y del exterior en general.