El avance de las tecnolog¨ªas es cada vez m¨¢s asombroso. Con ellas se puede llegar a hacer, pr¨¢cticamente, cualquier cosa. Solo as¨ª se puede explicar que un hombre, Alexandr V¨®lchek, haya decidido implantarse hasta cinco microchips en sus manos. El objetivo: hacer su vida m¨¢s f¨¢cil. Con estas manos rob¨®ticas puede abrir las puertas que usan llaves electr¨®nicas de su trabajo, pagar en los medios de transporte, guardar informaci¨®n o usar su tarjeta de cr¨¦dito.

V¨®lchek, de 40 a?os de edad y ginec¨®logo de profesi¨®n, se implant¨® el primero de los dispositivos debajo de su piel hace ya unos a?os. Gracias ¨¦l, ten¨ªa acceso a los telef¨¦ricos de una estaci¨®n de esqu¨ª. Viendo su desempe?o no se qued¨® ah¨ª, sino que fue a m¨¢s: hoy en d¨ªa cuenta con cinco de estos diminutos chips (de 2x12 mil¨ªmetros): dos en la mano derecha y tres en la izquierda.

Utilidad de los chips

De todos ellos, el que m¨¢s usa es que activa el pase para su trabajo, que se encuentra en el dedo coraz¨®n de su mano derecha. Seg¨²n el m¨¦dico, le resulta de gran utilidad tenerlo. Mientras que los datos de las tarjetas de identificaci¨®n se almacenan en su mu?eca izquierda, en la derecha cuenta con un chip para experimentar con los sistemas de transporte.

Alexandr no duda en confirmar que su vida fue a mejor, siendo "m¨¢s f¨¢cil", tras implantarse los microchips. Antes de ello, mediante programas especiales de ordenador, saca el dispositivo que necesita en cada caso. Fue ¨¦l mismo quien se los insert¨® bajo la piel, vali¨¦ndose de una jeringa de grandes dimensiones con un inyector grueso. La familia del m¨¦dico apoya esta iniciativa. Incluso, su mujer tambi¨¦n se implant¨® uno, despu¨¦s de constantes olvidos de las llaves de casa y la tarjeta de acceso a su puesto de trabajo.