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Descubren el cr¨¢neo del dinosaurio "que causa miedo"

JORGE BLANCO

Se trata del Llukalkan aliocranianus, un depredador de cinco metros de largo que habit¨® la Patagonia durante el Cret¨¢cico tard¨ªo, hace 85 millones de a?os.

Cient¨ªficos del sur de Argentina han descubierto el cr¨¢neo de una nueva especie de dinosaurio carn¨ªvoro, bautizada como Llukalkan aliocranianus. El nombre otorgado al animal provienedel t¨¦rmino mapuche Llukalkan, que significa 'el que causa miedo', y del latino aliocraniaus, que es 'cr¨¢neo diferente'.

Depredador nato

El ejemplar habitaba en la Patagonia hace 85 millones de a?os, durante el Cret¨¢cicotard¨ªo, la ¨²ltima ¨¦poca antes de que los dinosaurios se extinguieran. Era uno de los principales depredadores de la zona, mientras que el hemisferio norte lo dominaba el Tyrannosaurus rex, con quien comparte algunas caracter¨ªsticas. Ambos ten¨ªan dos patas y brazos muy cortos, aunque el dinosaurio Llukalkan era de tama?o mediano en comparaci¨®n con el T-rex gigante. Sol¨ªa medir alrededor de 5 metros (16 pies) de largo y pesaba entre una y cinco toneladas.

Por otra parte, los investigadores afirman que el animal, perteneciente a una de las 10 especies hasta ahora conocidas de abelis¨¢uridos, estaba dotado de una mand¨ªbula extremadamente poderosa, dientes muy afilados, enormes pezu?as y un olfato muy sensible, lo que le convert¨ªa en un depredador nato. Adem¨¢s, los hallazgos, publicados el martes en la revista Journal of Vertebrate Paleontology, tambi¨¦n sugieren que ten¨ªa mejor audici¨®n que otros dinosaurios de la familia de los abelis¨¢uridos, por lo que tambi¨¦n ser¨ªa mejor cazador, seg¨²n explic¨® a Reuters Federico Gianechini, paleont¨®logo de la Universidad Nacional de San Luis Argentina.

Asimismo, los restos f¨®siles incluyen una b¨®veda craneal muy bien preservada que indica que el cr¨¢neo de Llukalkan ten¨ªa huesos gruesos que formaban protuberancias en la cabeza parecidas a las de algunos reptiles del presente como el monstruo de Gila y ciertas iguanas.

Convivi¨® con el Viavenator exxoni

"Este descubrimiento es particularmente importante porque indica que la diversidad y abundancia de abelis¨¢uridos era notable no solo en la Patagonia, sino tambi¨¦n en m¨¢s ¨¢reas durante el ocaso de los dinosaurios", se?al¨® Gianechini. El estudio apunta que este reptil habit¨® la misma ¨¢rea en el mismo per¨ªodo de tiempo que otra especie de abelis¨¢urido furelisauria (lagarto de espinazo r¨ªgido), el Viavenator exxoni. Restos de ambos ejemplares se encontraron a solo 700 metros de distancia en la Formaci¨®n Bajo de la Carpa, cerca del mismo sitio famoso de f¨®siles en La Invernada, en Argentina.

Gianechini asegur¨® que es muy inusual encontrar dos abelis¨¢uridos viviendo juntos al mismo tiempo: "Llukalkan era un poco m¨¢s peque?o que Viavenator, aunque, si viv¨ªan juntos, seguramente compart¨ªan el mismo nicho ecol¨®gico y se alimentaban de la misma presa, por lo que habr¨ªan competido entre ellos y, por qu¨¦ no, incluso comido entre ellos".

Los abelis¨¢uridos conforman una familia sorprendente de dinosaurios ter¨®podos, y vivieron principalmente en la Patagonia y otras zonas del sur de Gondwana, la masa continental que formaban lo que hoy es ?frica, la India, Ant¨¢rtida, Australia y Am¨¦rica del Sur.