Soria tiene en los hongos un recurso econ¨®mico de gran valor tur¨ªstico. Se trata de una actividad que en circunstancias normales llena casas rurales, restaurantes o ferias dedicadas a este producto. Castilla y Le¨®n expidi¨® en 2020 unos 70.000 permisos, de los cuales 40.000 se aglutinan solamente en la mencionada ciudad. Esta autorizaci¨®n, que vale 300 euros anuales, permite la obtenci¨®n y venta de 50 kilos diarios de hongos.

Ahora, un reportaje publicado por El Pa¨ªs, ha desvelado el golpe a las mafias que efect¨²an recolecciones indiscriminadas de setas para su posterior venta en restaurantes y comercios. Muchos ciudadanos locales denuncian que algunas personas utilizan recurrentemente licencias recreativas, que tan s¨®lo autorizan cinco kilos diarios.

Actuaci¨®n de la Guardia Civil

Un control de la Guardia Civil efectuado en Langa de Duero, al lado de Burgos, ha permitido decomisar 1.316 kilos de n¨ªscalos, la mayor aprehensi¨®n de la temporada dentro de la Operaci¨®n Espora. Adem¨¢s, los agentes identificaron como autores de los hechos a 30 personas, todas ellas de nacionalidad rumana.

Pero las irregularidades en este negocio no acaban en los recolectores furtivos. Javier Andr¨¦s, de la asociaci¨®n micol¨®gica de Navaleno (775 habitantes), se?al¨® en El Pa¨ªs que muchos intermediarios locales explotan a los inmigrantes. As¨ª, dos socios, uno espa?ol y otro rumano, fueron detenidos en 2015 en la localidad de Canicosa de la Sierra (Soria) por hacinar a 200 extranjeros y someterlos a extremas condiciones laborales.

Una norma decisiva

Pedro Tejada, capit¨¢n de la Guardia Civil en El Burgo de Osma, explica en el citado medio que una norma de Castilla y Le¨®n de 2017 ayud¨® a actuar contra estas "mafias", pues pasaron de poner denuncias administrativas a intervenir la carga y requisar el veh¨ªculo.

Gracias a esta disposici¨®n, el a?o pasado interceptaron 24 veh¨ªculos con 7.500 kilos de setas, aunque este a?o, debido a la pandemia, el n¨²mero se ha reducido: 14 veh¨ªculos y 3.500 kilos.

Para evitar enriquecer a estas mafias, algunos distribuidores como ?lvaro Ortego evitan adquirir productos sospechosos: "No compro setas sin licencia", subraya en El Pa¨ªs. Ortego tambi¨¦n recalca que la trazabilidad es clave y asegura que a los recolectores extranjeros ni los atiende.