Al comienzo de la pandemia, las mascarillas EPI (Equipos de Protecci¨®n Individual) de FFP2 estaban indicadas exclusivamente para el personal sanitario. Sin embargo, su uso se ha extendido al resto de la poblaci¨®n despu¨¦s de que los expertos las recomendaran en espacios interiores debido a su elevada capacidad filtrante, del 95%, y su alta eficacia contra los aerosoles, elementos muy peligrosos en la propagaci¨®n de la COVID-19.

El principal problema de este producto es su elevado coste, ya que su precio individual puede rondar los 2 o 3 euros. As¨ª, hay quien ha aprovechado su ¨¦xito para falsificarlas y venderlas m¨¢s baratas, pero con una menor protecci¨®n. Por eso, a la hora de comprar una mascarilla FFP2 es necesario fijarse en ciertos aspectos.

C¨®mo saber si son seguras

Una mascarilla solo podr¨¢ garantizar su autenticidad estando homologada. Para saber si lo est¨¢ o si, en su defecto, es falsa, debemos comprobar que est¨¦ aprobada por el Reglamento de la UE 2016/425 y por la norma EN149:2001+A1:2009. Por tanto, tendr¨¢ que contar con esta nomenclatura en su envase.

Asimismo, en su etiquetado debe reflejar si es reutilizable o no reutilizable con las letras R o NR, respectivamente, y especificar el nombre de la empresa productora. Por ¨²ltimo, el producto tambi¨¦n deber¨¢ contar con los cuatro n¨²meros del organismo notificado junto a las iniciales de la Comisi¨®n Europea (CE).

Dentro del tipo de mascarillas FFP2, las del tipo KN95 son las m¨¢s comunes en Espa?a. Sin embargo, al proceder de China, su comercializaci¨®n no tienen un marcado CE, por lo que se podr¨¢n vender hasta el 31 de diciembre, siempre y cuando sean mascarillas que ya est¨¦n en stock en Espa?a. No obstante, deben tener la homologaci¨®n EN149:2001+A1:2009, que aparecer¨¢ visible en el equipo.