Elvis Garc¨ªa es profesor de Salud P¨²blica en la Universidad de Harvard (Estados Unidos) y es uno de los expertos m¨¢s reputados para hablar sobre enfermedades infecciosas que afectan a los seres humanos. El docente ha valorado la gesti¨®n de la pandemia durante todos estos meses, ha hecho varias recomendaciones a los distintos expertos y, ahora, en una entrevista en El Huffington Post habla de c¨®mo sera la Navidad, evidentemente marcada por la COVID-19.

Preguntado por si se puede salvar la Navidad, Garc¨ªa indica que es un "error seguir pensando en t¨¦rminos de normalidad, como si nada hubiera pasado". "Quisimos primero salvar la temporada tur¨ªstica y as¨ª estamos. Por supuesto que podemos 'salvar la Navidad', s¨®lo hay que poner en la balanza cu¨¢ntos fallecidos estamos dispuestos a asumir para poder ir de compras y salir de fiesta", razona.

Por eso, hace un llamamiento a la poblaci¨®n y pide que sean unas Navidades dom¨¦sticas: "Mi recomendaci¨®n es que hagan el esfuerzo por pasarlas en casa. Que hagan las compras online o por tel¨¦fono si es en peque?os negocios, o que lo escalonen en el tiempo para evitar aglomeraciones. Que busquen alternativas para compartir estos momentos con la familia utilizando la tecnolog¨ªa. O hacemos esto o estaremos creando las condiciones perfectas para otro pico de casos a partir de enero".

Garc¨ªa advierte de otra ola de casos a principios del pr¨®ximo a?o, porque asegura que ¡°o cambian las cosas dram¨¢ticamente, o estos picos seguir¨¢n siendo recurrentes¡±. ¡°Si el Gobierno no implementa las medidas que los profesionales de la salud p¨²blica llevamos pidiendo desde el principio seguiremos enfrent¨¢ndonos a una ola tras otra¡±.

Condicionantes de la vacuna

A pesar de ello, ve motivos para el optimismo, sobre todo tras el anuncio de que la vacuna de Pfizer es eficaz en m¨¢s de un 90%. ¡°Son fant¨¢sticas noticias, nadie se esperaba una efectividad del 90%. Esto es definitivamente un paso de gigante hacia el final del t¨²nel. Dicho lo cual, la vacuna no es una ¡®bala de plata¡¯. Esta soluci¨®n acarrea demasiadas incertidumbres. A¨²n con una efectividad tan alta, debemos conocer la duraci¨®n de la protecci¨®n, la capacidad de producci¨®n por parte del fabricante, la capacidad del Gobierno para obtener las dosis necesarias, la gesti¨®n de la cadena de fr¨ªo o incluso la voluntad de la gente a la hora de vacunarse¡±, argumenta.

Vuelta a la vieja normalidad

Por eso, y dados todos estos condicionantes, considera ¡°imprudente¡± dar una fecha para la vuelta a la vieja normalidad. ¡°Depender¨¢ en gran parte de la efectividad y disponibilidad de las primeras vacunas. No descartar¨ªa un futuro pr¨®ximo en el que adaptemos nuestros h¨¢bitos para convivir con el virus. Nada muy dram¨¢tico, por ejemplo, puede que la gente lleve mascarillas durante ciertos periodos del a?o, o que hacernos test en casa despu¨¦s de haber ido a un evento sea tan normal como utilizar el term¨®metro, o que nos vacunemos todos los a?os como si de la gripe se tratase. Esto ser¨¢ un escenario bastante realista hasta que haya una vacuna de verdad efectiva a medio o largo plazo¡±, agrega.

Gesti¨®n de la segunda ola

Por ¨²ltimo, Elvis Garc¨ªa valora la evoluci¨®n actual de la pandemia, que tilda de ¡°preocupante¡± y por la que se muestra incr¨¦dulo por ¡°lo mal preparados que estaban los Gobiernos¡± para combatir la segunda ola. ¡°Puedo entender una limitada capacidad de respuesta durante la primavera, pero ahora no hay excusa posible. ¡°Estaba claro que no se estaban haciendo los deberes durante el verano. Se pas¨® muy r¨¢pido del confinamiento a la apertura del turismo, pero no se pusieron medidas activas del control de la epidemia. Es decir, limitar el aforo de bares y restaurantes es una medida de medio pelo que intenta limitar la r¨¢pida escalada de casos, pero que no ataca el problema de ra¨ªz.