Adi¨®s a uno de los grandes cl¨¢sicos de las cocinas espa?olas desde los a?os 50. La empresa francesa Duralex, con sede en La Chapelle-Saint-Mesmin y activa desde el a?o 1945, ha sido declarada en quiebra por un tribunal comercial de Orleans. Sus productos, pr¨¢cticamente irrompibles, han sido desde entonces habituales en la mayor¨ªa de hogares. Ahora, con la pandemia del coronavirus y con las medidas adoptadas para frenar su expansi¨®n, han tenido que parar.

La decisi¨®n fue tomada el pasado 23 de septiembre y estar¨¢ acompa?ada de un tiempo de observaci¨®n de seis meses. En el comunicado emitido por Duralex, recogido por el diario Le Monde, la direcci¨®n expresa que "se congelan las deudas de la empresa el d¨ªa de la apertura del tr¨¢mite. Al finalizar el inventario de todos los cr¨¦ditos por parte de los representantes legales, la empresa podr¨¢ proponer un plan de recuperaci¨®n por continuaci¨®n".

Antoine Ioannid¨¨s, presidente de Duralex, ha confirmado que los 248 trabajadores de la compa?¨ªa "siguen trabajando y cobrando".

El origen de la deuda

Los problemas financieros de la firma francesa se remontan al a?o 2017, cuando se produjo un cambio en su modelo de horno que desencaden¨® una reducci¨®n de la producci¨®n por el mal funcionamiento de la nueva instalaci¨®n. Pasaron de 160 toneladas diarias de producci¨®n a ¨²nicamente 20.

"Hemos perdido cerca del 60% de nuestra facturaci¨®n por el cese de las exportaciones, que representan el 80% de nuestra actividad", lamenta el consejero delegado. Seg¨²n ha trascendido, ya tienen varios compradores y ahora estudiar¨¢n las propuestas para encontrar la mejor soluci¨®n.

La empresa, inicialmente dedicada a la fabricaci¨®n de lunas de veh¨ªculos, se pas¨® al menaje de cocina debido a la gran resistencia de sus productos. Estos son forjados a 700 grados y posteriormente enfriados de forma s¨²bita, lo que les otorga una gran resistencia.