"Hemos tomado la decisi¨®n de declarar la situaci¨®n de pandemia mundial. La COVID-19 puede ser categorizada como pandemia. Podemos esperar que el n¨²mero de casos, decesos y de pa¨ªses afectados aumente". El director general de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, pronunciaba estas palabras el 11 de marzo, hace exactamente medio a?o.

De esta forma, el coronavirus SARS-CoV-2 pasaba de ser casos graves de neumon¨ªa en Wuhan (China) a convertirse en una amenaza para los sistemas de salud de todo el mundo. Desde entonces, en el mundo se han contagiado m¨¢s de 28 millones de personas y han fallecido m¨¢s de 900.000.

Evoluci¨®n de la pandemia

31 de diciembre de 2019, Wuhan, China. La Comisi¨®n Municipal de Salud de Wuhan informa a la OMS de una serie de casos de una neumon¨ªa extra?a en la regi¨®n. Era la primera informaci¨®n de la pandemia, aunque meses despu¨¦s saltaron informaciones de que el primer contagio se podr¨ªa haber producido en noviembre, e incluso que el virus ya se encontraba en Barcelona a trav¨¦s de aguas residuales.

Durante el mes de enero, en China se esmeran para levantar a contrarreloj hospitales de campa?a para atender a los miles de contagios que se suceden d¨ªa a d¨ªa. El resto de pa¨ªses permanecen at¨®nitos a la situaci¨®n, cruzando los dedos para no tener que verse en la misma tesitura.

Sin embargo, d¨ªas m¨¢s tarde, el 13 del mismo mes, se confirma el primer caso de coronavirus fuera de China: el virus ha saltado a Tailandia. En febrero y marzo y virus comenz¨® a golpear con mayor fuerza a Europa, especialmente en Italia y Espa?a, pero tambi¨¦n Francia o Reino Unido fueron fuertemente castigadas por la enfermedad.

Pa¨ªses confinados, fronteras cerradas, econom¨ªas quebradas. El coronavirus afect¨® gravemente a todos los ¨¢mbitos de la sociedad, mientras en los hospitales se afanaban por intentar atender a todos los pacientes que llegaban contagiados. El virus salt¨® de Europa al resto de continentes, con especial virulencia en Am¨¦rica, donde Estados Unidos se convirti¨® pronto en el pa¨ªs m¨¢s afectado.

A d¨ªa de hoy, nos hemos acostumbrado a vivir con distancia de seguridad, mascarilla y el lavado de manos de forma regular como formas de convivir con un virus que sigue amenazando la salud de todos. Los brotes y la segunda ola de contagios siguen de forma muy presente, aunque de forma diferente por pa¨ªses.

Los negacionistas del virus

Durante todos estos meses, varios han sido los que han minusvalorado al coronavirus. Entre ellos, varios dirigentes de algunos pa¨ªses. Uno de ellos fue Jair Bolsonaro, uno de los m¨¢s esc¨¦pticos. El mandatario brasile?o lleg¨® a calificarlo como una "gripezinha". Hoy en d¨ªa, Brasil es el tercer pa¨ªs m¨¢s afectado, con m¨¢s cuatro millones de contagios, incluido el del propio Bolsonaro.

Donald Trump, dirigente de Estados Unidos, fue otro de los l¨ªderes mundiales que rest¨® importancia al virus desde el inicio de la pandemia. En poco tiempo pas¨® de asegurar que los contagios se ir¨ªan reduciendo "casi a cero" a decir que "si nos quedamos en 100.000 muertos habremos hecho un gran trabajo". Hoy esa cifra casi est¨¢ multiplicada por dos.

Boris Jonhson, primer ministro del Reino Unido, fue otro de los que en un primer momento rest¨® importancia al virus. Sin embargo, lleg¨® a reconocer d¨ªas m¨¢s tarde que estaba equivocado al no tomar medidas de confinamiento antes. Johnson, como Bolsonaro, tambi¨¦n se contagi¨®.