Daniel Entwistle, el ni?o del BMX: 20 a?os desaparecido
Se cumplen dos d¨¦cadas sin saber absolutamente nada de lo que le ocurri¨® al joven rider ingl¨¦s, del que solo se encontr¨® su bici cerca de casa.
"Desde la desaparici¨®n de Daniel, nuestros agentes han abierto m¨¢s de 2.500 l¨ªneas de investigaci¨®n y han tomado casi 600 declaraciones. En los ¨²ltimos seis a?os los oficiales han seguido buscando en Great Yarmouth y han obtenido nuevos datos que tambi¨¦n se han investigado. Sin embargo, Daniel sigue siendo una persona desaparecida a d¨ªa de hoy. Los agentes siguen solicitando nueva informaci¨®n que pueda ayudar a resolver este caso", explica el responsable de la investigaci¨®n de la desaparici¨®n de Daniel Entwistle. El 3 de mayo del 2003, Daniel Entwistle era un ni?o de tan solo 7 a?os que pidi¨® a sus padres -Paula y David- salir a jugar con su bici de BMX y asegur¨® que volver¨ªa a casa "a la hora del t¨¦". Una casa en la poblaci¨®n costera de Great Yarmouth, en Inglaterra, a la que se hab¨ªan mudado tres a?os antes (en el 2000), si ben hab¨ªa nacido en Burnley. Una casa a la que nunca volvi¨® y nadie sabe el porqu¨¦. Todo lo que se sabe es que sobre las 15:30h se le vio jugando con un grupo de ni?os en Trinity Quay. Luego, justo pasadas las 17:00h, parece que iba a cumplir su palabra porque las c¨¢maras de seguridad de una tienda que est¨¢ a 1 minuto de casa le grabaron caminando por los pasillos. Esta fue la ¨²ltima vez que alguien le vio. Luego se iniciar¨ªa una investigaci¨®n con m¨¢s de 60 agentes, amigos y vecinos que encontraron su bici roja de BMX abandonada, cerca del r¨ªo, a unos 10 minutos de casa. Obviamente peinaron todo el r¨ªo, pero no encontraron nada. Su madre, en 2012, expresaba la angustia que genera no saber nada de su hijo a la BBC: "No s¨¦ si est¨¢ vivo o muerto. Y si est¨¢ vivo, si alguien le secuestr¨®. O podr¨ªa haber ca¨ªdo al r¨ªo. Ni lo sabemos ni estamos cerca. Desear¨ªa haberle dicho que no pod¨ªa ir a jugar. Duele mucho". Su padre muri¨® en 2015 sin saber qu¨¦ le hab¨ªa piasado a su hijo. En este contexto y por el impacto que tuvo la desaparici¨®n en la familia, en la comunidad y en la sociedad en general, la polic¨ªa de Norfolk sigue abierta a recibir pistas que le permitan cerrar el caso.
