Cold Water Journal, el documental que recoge una expedici¨®n surfeando por Alaska
Este nuevo documental recopila la magia del surf con la belleza del paisaje del noroeste de Am¨¦rica. Todo ello con un reparto de lo m¨¢s estelar.
Una de las mejores cosas que tiene el mundo del surf, sin dudarlo, es la gran variedad de paisajes y rincones repartidos por el globo donde poder practicarlo. Desde Haw¨¢i hasta en Jap¨®n, la variedad de condiciones y paisajes es inacabable. No es de extra?ar, pues, que hasta en rincones como Alaska, un pa¨ªs que pasa la mayor parte del a?o recubierto de nieve, se encuentren olas perfectamente surfeables. Un territorio basto y apartado pero con un potencial de lo m¨¢s intenso.
As¨ª lo vieron pues los del team Surfer que, de la mano del realizador Ben Weiland, el colectivo de Surfer y un reparto de surfistas estelar con nombres como Alex Grey, Dane Gudauskas, Timmy Reyes, Sam Hammer, Cyrus Sutton o Keith Malloy, se calzaron los neoprenos y se fueron a buscar olas por los maravillosos parajes congelados del noroeste del continente americano. Una experiencia recogida en un documental que, con el nombre de ¡°Coldwater Journal¡± muestra la belleza infinita de los remotos p¨¢ramos de Alaska junto con la magia del surf.
Todo ello empezando con un tr¨¢iler que ya deja latente el enorme potencial que hay en Alaska a la vez que inmortaliza la belleza salvaje de este remoto estado de los Estados Unidos. Un paisaje de ensue?o, de altas monta?as y costas de lo m¨¢s escarpadas que propician la creaci¨®n de un oleaje sin igual. Todo ello acompa?ado de una fauna que, guiada por la curiosidad, no duda en asomarse para observar a estos incre¨ªbles surfistas.
Y a pesar del fr¨ªo del agua, la cual no supera ni los 12? en verano, estos surfistas han demostrado estar a la altura de las circunstancias consiguiendo surfear con esas bajas temperaturas y de esa manera tan impecable sin faltar a sus estilos ¨²nicos. Un documental sin igual que promete mostrar hasta donde puede llegar la magia de este maravilloso deporte. ?Qu¨¦ ganas de que se estrene!