Colbrelli toca la gloria en la Par¨ªs-Roubaix m¨¢s infernal
El italiano derrot¨® a Vermeersch y Van der Poel en una Par¨ªs-Roubaix bajo unas condiciones infernales de lluvia y barro que dej¨® im¨¢genes de ciclismo de otra ¨¦poca.
Un llanto de pura euforia y agon¨ªa fue lo ¨²nico que pudo expresar un Sonny Colbrelli cubierto de barro tras conquistar una Par¨ªs-Roubaix para la historia. Italia celebr¨® por primera vez en el siglo XXI su triunfo en la 'cl¨¢sica de las cl¨¢sicas' despu¨¦s de que el ciclista del Bahrain batiera a Vermeersch y Van der Poel en el m¨ªtico vel¨®dromo. Hasta all¨ª llegaron los tres corredores m¨¢s fuertes de una edici¨®n, la 118?, marcada por la lluvia, el fr¨ªo, las aver¨ªas, tramos de pav¨¦s resbaladizos convertidos en trampas terror¨ªficas... y ca¨ªdas, muchas ca¨ªdas.
Porque la Par¨ªs-Roubaix prepar¨® para su regreso oto?al unas condiciones que casi parec¨ªan olvidadas en esta carrera. Las extremas condiciones con las que se encontraron los corredores parec¨ªan homenajear a otro ciclismo mucho m¨¢s antiguo, al que forj¨® la leyenda de esta prueba del norte franc¨¦s creada en 1896. De ese infierno emergieron los tres fen¨®menos que se jugaron la gloria, todos debutantes en la Roubaix, para honrar a esta carrera.
Prueba que, m¨¢s que nunca en su historia moderna, fue de supervivencia, porque desde muy pronto comenzaron los accidentes y los problemas mec¨¢nicos. Nadie se libraba, la cuesti¨®n estaba en c¨®mo cada uno era capaz de solventar sus obst¨¢culos. De ah¨ª se vio c¨®mo Van der Poel se repon¨ªa de una aver¨ªa con una carrerita al m¨¢s puro estilo ciclocross, o c¨®mo cada ca¨ªda era un problema no s¨®lo para los corredores que le segu¨ªan, sino para los veh¨ªculos de la prueba.
La pericia sobre la bicicleta en ese pav¨¦s mojado era clave. Y as¨ª se demostr¨® c¨®mo Van Aert volaba sobre los adoquines en el primer intento entre los favoritos, a m¨¢s de 100 km de meta. Sin embargo fue la ¨²nica vez que el belga tom¨® la iniciativa. A partir de ah¨ª le toc¨® perseguir. Tanto a un Colbrelli que lo intentaba con ¨¦xito a continuaci¨®n, como a un Van der Poel que a 70 de meta se march¨® en una cruzada en solitario. El neerland¨¦s gast¨® mucho para ir cazando a todos los cortes que le preced¨ªan, sino tambi¨¦n al tirar de aquellos ciclistas que intentaban ir a su rueda.
Ya por entonces, otro italiano, Gianni Moscon, so?aba en cabeza de carrera con ser el primer italiano en alzar los brazos en Roubaix en el nuevo siglo (Andrea Tafi, en 1999, fue el ¨²ltimo) y, de paso, darle al Ineos su primera Roubaix. El bravo corredor se defendi¨® a las mil maravillas en solitario... hasta que el Infierno del Norte se ceb¨® con ¨¦l. Pinch¨® su bicicleta y, tras cambiar de montura, se fue al suelo con ¨²n 30 km por delante. A 15 de meta se le acab¨® la aventura. Van der Poel, que en cada tramo de pav¨¦s organizaba una escabechina, lleg¨® a su rueda con Colbrelli y el joven Vermeersch, los ¨²nicos que le pudieron seguir.
Con Moscon descartado por el agotamiento, Colbrelli, Van der Poel y Vermeersch se jugar¨ªan el triunfo. Este ¨²ltimo, un prodigio neoprofesional belga, fue la gran sorpresa del d¨ªa al subir al podio en segunda posici¨®n tras un Sonny Colbrelli que de principio a fin pareci¨® ser el m¨¢s inteligente adem¨¢s del derroche de fuerza obligado. En el tr¨ªo s¨®lo dio los relevos necesarios y al vel¨®dromo dio la impresi¨®n de llegar con m¨¢s chispa. No obstante, era el m¨¢s r¨¢pido y lo demostr¨® en un esprint final en el que Van der Poel acab¨® tumbado en la hierba exhausto. En la misma posici¨®n, pero entre l¨¢grimas de felicidad, Colbrelli festejaba su gesta. Una tremenda en el escenario m¨¢s infernal posible. Una Par¨ªs-Roubaix que volvi¨® con toda su grandeza, el de su historia centenaria, en pleno siglo XXI.
Iv¨¢n Garc¨ªa Cortina, 26?
En cuanto a la actuaci¨®n espa?ola, el Movistar quiso estar presente desde el principio e Imanol Erviti y Matteo Jorgenson estuvieron en los primeros cortes. Sin embargo, su principal baza, Iv¨¢n Garc¨ªa Cortina, tampoco pudo librarse de las ca¨ªdas y una le hizo desaparecer del grupo de favoritos. No obstante, el asturiano fue el mejor de la formaci¨®n espa?ola, en el puesto 26?.