Triunfo heroico de Van der Poel ante un Pogacar asombroso en una etapa para la historia
El neerland¨¦s conquist¨® la etapa con un ataque a 50 km de meta. Pogacar se fue a por ¨¦l cuando perd¨ªa tres minutos y a punto estuvo de quitarle la victoria.
Mathieu van der Poel conquist¨® su segundo triunfo en Tirreno-Adri¨¢tico en una jornada ¨¦pica de ciclismo que se recordar¨¢ durante mucho tiempo. Una buena parte de los grandes talentos actuales del pelot¨®n mundial se batieron en un duelo sin cuartel sobre un trazado exigente, repleto de subidas y bajadas y con un clima de viento, lluvia y frio. Un escenario donde emergieron dos fen¨®menos, dos talentos que van camino de marcar una ¨¦poca como son Mathieu van der Poel y Tadej Pogacar. Dos ciclistas fabulosos que protagonizaron un duelo ¨¦pico en los que los dos encontraron beneficio: Van der Poel, una victoria para el recuerdo, y Pogacar, la sentencia a la general de la carrera.
Ambos protagonizaron una persecuci¨®n espectacular en los ¨²ltimos kil¨®metros, los dos en solitario, en la que la emoci¨®n, la ¨¦pica y la agon¨ªa se mezclaban con el talento de estos corredores. Van der Poel por delante, despu¨¦s de atacar a los favoritos a 50 km de meta, en busca de la gloria con un esfuerzo en el que por primera vez se intuy¨® el l¨ªmite del fen¨®meno neerland¨¦s. Por detr¨¢s, Tadej Pogacar, quien arranc¨® a 18 km de meta, cuando marchaba a unos tres minutos de Van der Poel, pero con una fuerza que pronto empez¨® a recortar diferencia al cabeza de carrera a una velocidad asombrosa.
Los dos acapararon toda la atenci¨®n, con un Van der Poel que poco a poco iba acusando la fatiga, cada vez m¨¢s castigado y con referencias de que por detr¨¢s ven¨ªa el cohete esloveno, un Pogacar que m¨¢s all¨¢ del triunfo de etapa, iba sacando ventaja al resto de sus rivales por la general (Van der Poel no era una amenaza).Y as¨ª, con esa emoci¨®n, el del Alpecin lleg¨® al ¨²ltimo kil¨®metro con el aliento de Pogacar en el cogote, pero con la constancia suficiente (fuerza ya no le quedaba) para dar pedales hasta entrar primero en meta... y pr¨¢cticamente desvanecerse, ante la mirada de un Pogacar que casi se aseguraba la general a pesar de que a¨²n falten dos jornadas.
Van Aert, el que mejor se defendi¨® ante los dos protagonistas y que en muchas fases de carrera mostraba un rostro desencajado por el esfuerzo y el frio, entr¨® tercero a 49". Bernal, quien tuvo numerosos problemas despu¨¦s de que no cuajaran sus intentos de ataque, quinto a 2:07. Mikel Landa, quien siempre estuvo delante hasta que los dos protegonistas hicieron saltar la carrera por los aires, a 2:25... Todos dejaron una buena imagen, pero superados por dos ciclistas que estuvieron a un nivel superior y que son serios candidatos a dominar el ciclismo en los pr¨®ximos a?os.?
"No pod¨ªa ni escuchar"
Tras la etapa, abrigado hasta arriba y recuperado el aliento, Van der Poel valor¨® la gesta: "Estaba rodando completamente vac¨ªo en los ¨²ltimos kil¨®metros. Me dijeron que Pogacar se estaba acercando, pero ni siquiera pude escuchar. Solo quer¨ªa llegar a la meta lo m¨¢s r¨¢pido que pudiera. Estoy feliz con la victoria". Tadej Pogacar tambi¨¦n destac¨® el triunfo del neerland¨¦s y sac¨® una lectura positiva: La idea no era quitar la etapa a Van der Poel, sino aumentar la ventaja con Van Aert, que ahora es m¨¢s c¨®moda. Pero casi logro atrapar a Van der Poel. Mis elogios para ¨¦l, una vez m¨¢s hizo una gran etapa, no fue f¨¢cil estar en cabeza durante tantos kil¨®metros solo en esta etapa y con este clima".