Monumental Van der Poel

Mahieu van der Poel logr¨®, a sus 25 a?os, la victoria m¨¢s importante de su carrera, un triunfo que ser¨¢ recordado por la forma de hacerlo y el rival ante qui¨¦n lo hizo. El neerland¨¦s se impuso en el Tour de Flandes, el primer Monumento de su palmar¨¦s, tras superar en un mano a mano a su archienemigo Wout van Aert. En un esprint ajustad¨ªsimo, el nieto del difunto Raymond Poulidor celebr¨® la victoria tras la foto-finish que certificaba su triunfo. Su padre, Adrie van der Poel, logr¨® esta misma victoria en 1986. "Es algo incre¨ªble", dijo en meta tras una celebraci¨®n de ¨¦poca, cogiendo su bicicleta y elev¨¢ndola a lo m¨¢s alto. Y es que hubo un momento clave en la carrera: el accidente de Alaphilippe contra una moto de carrera.

A 50 kil¨®metros de meta, el Elegant-Quick Step (que cambi¨® el nombre para esta prueba) decidi¨® romper la carrera en el Koppenberg con un Alaphilippe que debutaba en la cita belga. Anteriormente, el reducido pelot¨®n hab¨ªa neutralizado a la fuga de la jornada compuesta por M¨¹hlberger, Van Hoecke, Batistella, Peyskens, Van Poppel y Van den Bossche, que llegaron a tener ocho minutos de renta. Alaphilippe se sent¨ªa bien y lo prob¨® con fuerza. Solo un corredor pudo seguir su rueda: Van der Poel. Desde atr¨¢s, Van Aert trataba de perseguir, y es que el belga no llevaba un d¨ªa f¨¢cil ya que se fue al suelo en la primera parte de la carrera. Por suerte, sin mayores consecuencias. En la siguiente cota, el Taaienberg, Van Aert s¨ª pudo enlazar para formar un tr¨ªo de cabeza inmejorable. Por desgracia, los tres no duraron mucho juntos, y no fue por causas meramente deportivas.

Quedaban 37 kil¨®metros a Oudenaarde cuando lleg¨® el drama. Los tres, rodando para dejar atr¨¢s al escueto pelot¨®n, marchaban en fila: Van Aert, Van der Poel y Alaphilippe. El belga, primero y siguiendo la estela de una moto, el neerland¨¦s sigui¨® tras ¨¦l y el maillot arco¨ªris, algo distra¨ªdo, se top¨® violentamente con el motorista. Su bicicleta sali¨® disparada y qued¨® tendido en el suelo con muestras de mucho dolor. Desde entonces, se formaba un mano a mano entre dos corredores que suman a?os y a?os de rivalidad, empezando por los Mundiales de ciclocross. En la ¨²ltima de las 17 cotas, el Patterberg (este a?o se suprimi¨® el Kapelmuur al ser un recorrido m¨¢s corto), Van der Poel aceler¨® para intentar descolgar a un Van Aert que no dio ninguna muestra de flaqueza. Se lo jugar¨ªan todo al esprint.

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Los dos ven¨ªan de un marcaje poco exagerado en la Gante-Wevelgem que les dej¨® sin triunfo. En Flandes no les quedaba otra que entenderse para evitar ser neutralizados. Sin miradas, solo con movimientos de brazos, entraban al relevo. Te¨®ricamente, Van Aert era m¨¢s potente al esprint, ya que en el pasado Tour logr¨® as¨ª dos triunfos y tambi¨¦n la Mil¨¢n-San Remo, todo ello esta temporada. Van der Poel en recta de meta era el que aguantaba por delante y a 180 metros inici¨® al esprint. Van Aert se puso a la par y, en un final ag¨®nico, Van der Poel lanz¨® la bici con todo sobre la l¨ªnea de meta. "Sab¨ªa que cuanto m¨¢s tardase en lanzar el esprint, m¨¢s opciones tendr¨ªa", dijo Van der Poel. Ninguno celebr¨® a falta de la foto definitiva, pero Van Aert era consciente de que no hab¨ªa ganado. En el esprint por el ¨²ltimo caj¨®n del podio, el veterano Kristoff fue el m¨¢s fuerte y termin¨® tercero. Van der Poel ya tiene su Monumento y ante Van Aert. Dif¨ªcil que lo hubiese so?ado de una manera mejor.